La revelación

No se porqué tan malas críticas, me gustó mucho la película.
Hay gente que se queja de que no ahonda y te deja con un vacío, pero es que ¿acaso alguien puede explicarlo?, es una obsesión con el numero 23, posiblemente con un final esperado, pero bajo mi punto de vista una película creativa.
Me arrepiento de no haberla visto antes por las malas críticas, pienso que no la han sabido ver ni valorar.

Y conste que la vi en cine, en estreno, en 2007 y que no la he vuelto a ver. Pero con la mano de 2 y de 3 que tiene como puntajes me han dado ganas de alquilarla y ver si la loca soy yo o simplemente los prejuicios contra el género, contra el cine comercial o contra Jim Carrey, que hace aquí un muy buen papel, a la altura de olvídate de mí y haciendonos olvidar por completo al de las muecas (que también es bueno, en su ley). En fin, la ví porque mi hijo es fan del fulano y me gustó no sólo la interpretación de él sino también un guión bien hecho, un ritmo suficiente, el giro final. Ahí va mi puntaje de 8 para hacer constar que me parece, en su genero, bastante decente.

Mira que sois juguetones con los números queridos amigos de Filmaffinity, podíamos hacer un concurso para ver a quién se le ocurre más cosas con el número 23.

Yo lo que pienso es que cuando un piloto de Formula 1 se dedica a dirigir en vez un Ferrari una película pasan cosas de estas ¿Porque este es el conductor no? Lo digo pues supongo que conduce mucho mejor que dirige el condenado ¡Zapatero (No el presi) a tus zapatos!

Y eso que hay un buen rato que la cosa promete, la idea parece de principio bastante original y hasta entretiene, pero se metió el guionista 42 (si como lo leen 42 ¿Qué pasa?) chutes y se le nublo el cerebro y empezó a alucinar de mala manera.

Después de 95 minutos (si conseguís el 23 os invito a una copa) en la que se mezcla lo bueno y lo malo desgraciadamente terminas diciendo ¿Qué he hecho yo para merece esto?, nunca he hecho mal a nadie, pago en el cine hasta las palomitas, no ronco, no entiendo por qué me hacen esto…Y te vas pensando que desgraciadamente has visto otra película fallida que tenía buena pinta de entrada.

De los actores voy a salvar a Virginia, no esta mal, pero nada mal; Jim en contra de sus fans, que los tiene a espuertas, soso y desangelado en un papel para lucirse 63 veces por fotograma, pues la peli es suya y no sabe dar la talla.

Los actores de reparto de lo más penoso que he visto en mi vida, no se salva ni uno.

El ambiente ¡Jo con el ambiente!, intenta por una parte recrear el de una película de detectives de cine negro, sin la menor gracia y por otra intenta dar un halo de misterio que no acojona, ni intriga en ningún momento ¡Calamitoso!, con lo que molan las escenas en los que hay un cementerio por medio.

En fin otra vez será, voy a calificar esta peli de ¡Huy!, pues casi, casi, el Joel consigue hacer algo decente.

Por cierto no tenían otro nombre que poner al protagonista, pues yo leí en las críticas que salía un tal Sparrow y me pase media película buscando a Johnny Deep, hasta en esto falta de originalidad.

Este comercial thriller aborda un tema muy interesante sobre la psique humana: cómo a partir de una serie de casualidades uno es capaz de relacionar todo con el mismo concepto. Esto sucede con quienes creen en las profecías de nostradamus, o en el sentido secreto de la Biblia. Pero lo cierto es que si uno se para a pensar y decide encontrar un número concreto, lo verá en todos lados, ya sea el 11, el 23 o el 5322.
Esto mismo es lo que aborda este entretenido thriller: la paranoia y la obsesión por un número. Pero esta premisa inicial rápido se ve degenerada hasta un final apropiado para cómo se desarrollan los acontecimientos.
Como dato curioso, y para deleite de quienes creen en el sentido oculto de los números, después de ver la película fui a comprar al supermercado, y cuando puse las lechugas sobre la cinta, ¿adivinan que número tenían?

Curiosa película que, a mi entender, ha sido azotada con demasiada dureza por la crítica, centrada en dar latigazos al director y al protagonista, que no gozan de demasiada simpatía en el círculo crítico "profesional".

Joel Schumacher, autor de crímenes contra la humanidad como 'Batman & Robin' o 'Batman Forever', dirige este guión del primerizo Fernley Phillips. El director, siempre con esa estética tan característica, nos ofrece un thriller que, si bien no es lo angustioso que podría haber sido, sí es cierto que mantiene el interés, aunque sea bastante previsible desde el inicio. La doble película muestra con evidencia sus diferencias, dejando a las claras (quizás demasiado) la relación real que hay entre ellas. Tal vez el montaje flojee un poco, pero apenas se nota y no son más que simples errores en los cortes. La dirección, en general, acierta con esa atmósfera de contrastes en la parte "imaginaria" y tan gris en la parte real, dando claras muestras de las personalidades de ambos personajes. Siendo una película relativamente corta, la sensación de angustia debería haber sido mayor, pero tampoco se siente insulsa en ningún momento, ya que los constantes giros (aunque te los esperes, siguen siendo giros) ayudan a mantener la atención.

Jim Carrey me cae bien. Eso es así y punto. La crítica dice que es un actor de pena y tal y cual, pero creo que pocos piensan en la evidencia: en las películas de risa, escogen a Jim Carrey para que haga de Jim Carrey. Como pasa con Adam Sandler y otros cómicos. Tal vez Sandler algún día dé el paso de probar suerte en otros géneros, como ha hecho Carrey con gran éxito (para mi gusto) en 'El número 23', 'Olvídate de mi' (vaya traducción, por cierto) o 'The Majestic'. Aquí el actor canadiense está correctísimo, mucho más que otros actores "serios" en thrillers de este tipo. Demuestra que no vive solamente de muecas, sino que también maneja otros campos, como la asfixia que vive su personaje en este caso. La bella Virginia Madsen no destaca por ser una gran actriz, aunque aquí, al menos cumple. Debo comentar que me parece indignante que pongan a Rhona Mitra (todos tenemos nuestro gusto, y según el mío es la actriz más bella de Hollywood) de cabeza de cartel, cuando sale dos ratos.

Resumiendo, que es gerundio: la película tiene un guión aceptable (si bien hay que decir que tiene tres agujeros importantes en lo relativo a la búsqueda del famoso numerito) que se agarra a evidencias y que monta las cosas como mejor le conviene para que encajen. Schumacher dirige la película con demasiadas pretensiones tal vez, aunque el resultado es bastante correcto, y Jim Carrey cierra las bocas de los que se ciñen a la evidencia y no a la marea crítica. Una película interesante y nada más.