Haz click aquí para copiar la URL

BarakaDocumental

Baraka
1992 Estados Unidos
Documental
8.1
11,575
Documental Aclamado documental sobre la naturaleza del planeta Tierra. Rodada en 24 países diferentes, trata de captar la esencia de la naturaleza y la cultura de la humanidad y sus costumbres, al tiempo que señala las formas en las que el ser humano se relaciona con su medio ambiente. La aparente fragilidad de la vida humana es contrastada con la grandeza de sus obras, subrayándose la desigual relación entre hombre y naturaleza. Baraka no tiene ... [+]
Críticas 52
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
10
5 de noviembre de 2012
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Y hablaré en plata. Si usted se dispone a ver este film, cuídese de verlo en las circunstancias óptimas, pues de ser así, se expone a pegar un viaje místico y a alcanzar una serenidad reflejas a la del coma del éxtasis. Dopamina para la córnea. Fumadón sin hachís. Viajazo sin setas.
6
9 de mayo de 2014
6 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Dicen que el infierno está lleno de buenas intenciones, y Baraka es una de ellas.

Dejando de lado que no hay ni un solo hilo conductor en todo el documental más allá de las secuencias (preciosas, eso sí) que se suceden a lo largo del metraje y conectadas entre sí de un modo más o menos torpe, Baraka es un documental que a mi modo de ver se debe disfrutar a pedazos, sino uno corre el riesgo (prácticamente inevitable) de quedarse sopa a la media hora.

Más que nada porqué en ningún momento al espectador le queda claro qué está viendo. Secuencias del mundo, la naturaleza, sus costumbres y tradiciones, etc... Sí, pero porqué está viendo eso? Dónde y que representan las imágenes? Estas son algunas de las incógnitas que sin duda te asaltan cuando ves el documental. No tiene narrativa ni explicación alguna más allá de querer mostrar lo precioso y cruel que es nuestro mundo, algo que creo que ya todos sabemos.

En general el documental está bien y consigue su finalidad (mostrar escenas bellas y hacer metáforas sobre el mundo que nos rodea) pero está excesivamente impregnado por el estilo new age de finales de los 90 (para bien o para mal) y las metáforas, aunque bien logradas, son excesivamente simplistas (como la analogía entre los cementerios y los bloques de viviendas).

Además, se centra demasiado en las culturas no occidentales, buscando una espécie de lección moral sobre lo errada que está la sociedad occidental y su supuesta culpabilidad en los males que achacan a la Tierra.

Quitando el moralismo del documental, su inconnexión y su falta de contextualización nos encontramos con escenas cinemáticas preciosas, una música acorde con lo que vemos y una grata experiencia para los sentidos.
8
13 de mayo de 2006 5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Que puedo decir, sencillamente espectacular. Un paseo absorbente por la historia de la civilización conectada con la naturaleza. Imágenes y una inmejorable banda sonora es todo lo que encontraremos en este film, acaso hace falta más?, aseguro a cualquiera que vaya a verla que las palabras sobran. Buscad un momento y lugar tranquilos y dejaros llevar por esta maravilla, no os arrepentireis.
8
8 de junio de 2011 5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Baraka cuenta sin palabras más que la mayoría de documentales, porque a lomos de la música y con cámaras aladas nos lleva al pie de la inmensidad natural y nos sitúa ante la verdad incuestionable para que veamos con nuestros propios ojos, de hormiguitas ridículas, qué somos, qué hacemos y hacia dónde caminamos; convirtiendo en pecata minuta siglos de introspección y filosofías existencialistas.

Las miradas de los otros, de culturas exóticas y milenarias, nos hablan de mundos que están siendo exterminados por quienes se han puesto la etiqueta de "nosotros, los más civilizados". Las religiones, en todas partes, venden mágicas recetas para solventar la brevedad de la vida prometiendo paraísos en el más allá y atribuyéndose el monopolio de la espiritualidad. Mientras los ricos intentan embotellar el Iguazú y transformar en dinero el oxigeno del Amazonas, un simple estornudo de cualquier volcán o un bostezo de la tierra nos devuelve a nuestra condición de amedrantados homínidos irresponsables.

Baraka es un bombardeo pertinaz de imágenes, que sin orden preestablecido nos coloca ante los miles de trozos de un espejo que comenzó a hacer añicos el primer primate, ¿inteligente?, que averiguó que golpeando con una porra se conseguía poder.
3
9 de enero de 2015
11 de 18 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hal Foster, investigador y crítico de arte, abría una nueva vía con el artículo exitosísimo “El Artista como etnógrafo”. En dicho artículo, el autor proponía que una manera clara de hacer arte en la contemporaneidad era integrarse en las sociedades para convertirse precisamente en un etnógrafo que retratara el mundo en el que se adentra el artista (una especie de reportero artístico). En un principio puede parecer que el filme documental de Ron Fricke, Baraka (Baraka, 1992) cumple estos preceptos, pero lo cierto es que más lejos de la realidad, el filme realiza todo lo contrario.

Porque el estudio etnográfico debe tener un marco teórico detrás. No puede convertirse en una simple colección de imágenes dulces y bonitas. Precisamente, el meollo de la cuestión de esta nueva vía se centra precisamente en tratar al otro de una nueva manera que hasta ahora no habíamos hecho. La alteridad no como un estado primitivo de nosotros mismos (por aquí es donde tira el filme), ni tampoco como un elemento exótico. Sólo desde el respeto al otro (y admitiendo las propias diferencias que nos salvan) podremos evitar caer en la brocha gorda y en el retrato pueril. Todo lo contrario que sucede en Baraka.

¿Realmente el espectador, al terminar el filme, conoce mejor las tribus indígenas a las que se acerca el documental? Indudablemente no. La simplificación del filme es tan burda que incluso no se tiene reparo alguno en mezclar etnias de todo el mundo mientras sigan el mismo patrón: No pertenecer al mundo occidental. Haciendo cine ficción: Un documental similar realizado desde la otra perspectiva nos habría presentado a japoneses y españoles de la misma manera, ¿Se imaginan el tamaño de este error? Sin embargo, mezclar hindús con budistas y estos a su vez con tribus africanas es lo que hace este documental sin ningún tipo de pudor. La alteridad no existe, porque Ron Fricke trata por igual a todos los pueblos no occidentales de la tierra, cayendo en un error considerable.

Entonces, ¿Por qué ha triunfado un filme como Baraka? Paradójicamente, la simplificación de los hechos que propone el documental va en consonancia con las grandes masas que consumen el filme. Como Baraka propone un mensaje fácil y accesible para todos, es mucho más fácil que triunfe entre el populacho, que no se molesta en cuestionar ni un solo segundo lo que le presenta el filme. Si el filme hubiera abordado la temática de una manera seria y comprometida, seguramente nadie le habría prestado el mínimo caso.

Baraka es al fin y al cabo pura New Age. Patraña que trata de pasar por contenido intelectual cuando su discurso ideológico es simple hasta la extenuación. La diatriba que presenta el filme es evidente, comparar la industrialización del mundo occidental que en el filme es presentada como lo negativo, con la supuesta espiritualidad de cualquier pueblo primitivo. Así pues, todo está montado en torno a esta dicotomía, que el filme presenta con una subjetividad absoluta. Nuestros desastres, nuestro pérfido mundo, comparado con la pureza de los demás pueblos. La Conducción del filme es maniqueista (¿Se puede ser maniqueista sin recurrir ni una sola vez a la palabra? Sí, indudablemente se puede) subrayando las buenas y malas conductas. Siendo sensacionalista: Nunca veréis a un indígena realizar una ablación en Baraka.

Formalmente toda la película está montada en torno a este discurso y hay que decir que en honor a la verdad, Baraka es ciertamente impresionante. El filme no emplea ningún tipo de diálogo sino que recurre exclusivamente a las imágenes y al sonido. Hay que señalar que el filme de Ron Fricke es una absoluta epopeya formal, y que gracias a este sustento visual el filme ha conseguido el reconocimiento mundial, que de otra manera no habría logrado. La película es una recopilación de imágenes que fueron registradas alrededor del mundo. Grandes panorámicas de paisajes que impresionan por su propia naturaleza así como algunos recursos cinematográficos bastante interesantes, como es el caso de la fotografía fija se entremezclan en un espectacular (este es la palabra) todo.

También hay que señalar que el empleo de la música es excelente (en la memoria queda la secuencia con la música de Dead can Dance) y además un elemento imprescindible para el desarrollo del filme, pues forma parte del eje dramático, que utiliza el director para subrayar el tono de cada escena.

https://neokunst.wordpress.com/2015/01/09/baraka-1992/
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para