Snowpiercer: RompenievesSerie
2020 

Graeme Manson (Creador), James Hawes ...
5.5
3,001
Serie de TV. Ciencia ficción. Acción. Thriller
Serie de TV (2020-2024). 4 temporadas. 40 episodios. Ambientada siete años después de que el planeta Tierra se haya convertido en un páramo helado, 'Snowpiercer' sigue a los restos de la humanidad, que habitan en un tren de grandes dimensiones en continuo movimiento. Clases sociales, justicia social y juegos políticos se dan dentro de lo que para la humanidad es su único hogar. Adaptación de la novela gráfica homónima. (FILMAFFINITY)
26 de marzo de 2025
26 de marzo de 2025
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
De secuela a referencia
Lo que comenzó como una secuela de la película Snowpiercer (2014), del director coreano Bong Joon-ho, en un intento de expandir su universo, ha evolucionado a lo largo de cuatro temporadas hasta convertirse en mucho más que una simple prolongación. La serie ha sabido construir su propio lenguaje, enriquecer el trasfondo original y proponer nuevas capas de lectura política, filosófica y social.
Lejos de limitarse a replicar el planteamiento de la película, ha explorado con ambición las dinámicas del poder, la desigualdad y la supervivencia en entornos extremos, abriendo camino a una narrativa compleja, coral y profundamente simbólica. Su final no solo cierra un ciclo narrativo, sino que consolida su lugar como una obra de referencia dentro de la ciencia ficción distópica contemporánea.
Una metáfora social
Snowpiercer es una travesía épica que no solo explora la lucha por la supervivencia, sino también las profundidades de la condición humana bajo presión extrema. A lo largo de sus cuatro temporadas, el tren que nunca se detiene se convierte en un microcosmos de rebelión, poder y transformación. Con una premisa potente, buen desarrollo y espectáculo puro se construye una especie de distopía social que ofrece reflexión, tramas de calidad, trasfondo, acción e intriga. Aunque el tren nunca llegue a su destino, el verdadero trayecto es la vida misma.
El tren no es solo un refugio en un mundo helado; es una metáfora de la civilización, un experimento social sobre raíles. La humanidad, enfrentada a su propia extinción, recibe una segunda oportunidad para reorganizarse, redefinir su estructura y aprender de sus errores. ¿Es realmente posible cambiar? ¿O la historia está condenada a repetirse? En este microcosmos de metal y desesperación, las dinámicas de lucha de clases, revolución y control social se despliegan con crudeza, sin respuestas fáciles ni héroes impolutos.
Reparto coral y bien equilibrado
Las interpretaciones mantienen un nivel notable a lo largo de toda la serie, con personajes bien trazados y perfiles psicológicos complejos. Daveed Diggs, en la piel de Andre Layton, representa a un líder reacio atrapado entre la moral y la necesidad de sobrevivir, mientras que Jennifer Connelly dota a Melanie Cavill de una presencia magnética y determinante. A su alrededor, intérpretes como Mickey Sumner (Bess Till), Alison Wright (Ruth Wardell), Iddo Goldberg (Bennett Knox) y Roberto Urbina (Javier de La Torre) enriquecen el conjunto con actuaciones sólidas y carismáticas, aportando capas emocionales y matices a cada arco individual.
La fuerza se sostiene en la dimensión coral: Rowan Blanchard (Alexandra Cavill), Katie McGuinness (Josie Wellstead) y Sam Otto (John Osweiller) muestran una evolución notable, mientras que Sean Bean (Wilford) y Lena Hall (Miss Audrey) brillan en papeles marcados por la fractura interior y los excesos emocionales. Aleks Paunovic (Bojan Boscovic) encarna con sobriedad la lealtad inquebrantable. En la recta final, nombres como Clark Gregg o Michael Aronov se suman a la causa, aportando nuevas energías a este microcosmos distópico sobre raíles. Cuatro temporadas dan para mucho, y el reparto suma y sigue... pero siempre ha sabido estar a la altura del viaje.
Conclusión
A nivel conceptual, la serie es una distopía feroz sobre la desigualdad, la lucha de clases y los mecanismos que impulsan las revoluciones. No hay discursos maniqueos ni soluciones simplistas. Los personajes se mueven en una escala de grises, con contradicciones y dilemas constantes. Como en la vida, nada es blanco o negro.
El desenlace plantea una poderosa metáfora sobre la liberación del pensamiento único y la ruptura con estructuras opresivas disfrazadas de salvación. Abandona la idea de que la seguridad se encuentra en la obediencia a un orden preestablecido y señala, en cambio, que la verdadera supervivencia nace de cuestionar, de arriesgar y de imaginar alternativas más allá de los límites impuestos.
Es también un canto a la naturaleza como fuerza regeneradora y autónoma, que sigue adelante al margen de la arrogancia humana. La vida no necesita permiso para abrirse paso, y el mundo no gira en torno a nuestra presencia. La esperanza, entonces, no está en conservar lo que nos encierra, sino en atrevernos a mirar más allá, confiar en el cambio y asumir que adaptarse no es rendirse, sino evolucionar.
Nota: B+
Lo que comenzó como una secuela de la película Snowpiercer (2014), del director coreano Bong Joon-ho, en un intento de expandir su universo, ha evolucionado a lo largo de cuatro temporadas hasta convertirse en mucho más que una simple prolongación. La serie ha sabido construir su propio lenguaje, enriquecer el trasfondo original y proponer nuevas capas de lectura política, filosófica y social.
Lejos de limitarse a replicar el planteamiento de la película, ha explorado con ambición las dinámicas del poder, la desigualdad y la supervivencia en entornos extremos, abriendo camino a una narrativa compleja, coral y profundamente simbólica. Su final no solo cierra un ciclo narrativo, sino que consolida su lugar como una obra de referencia dentro de la ciencia ficción distópica contemporánea.
Una metáfora social
Snowpiercer es una travesía épica que no solo explora la lucha por la supervivencia, sino también las profundidades de la condición humana bajo presión extrema. A lo largo de sus cuatro temporadas, el tren que nunca se detiene se convierte en un microcosmos de rebelión, poder y transformación. Con una premisa potente, buen desarrollo y espectáculo puro se construye una especie de distopía social que ofrece reflexión, tramas de calidad, trasfondo, acción e intriga. Aunque el tren nunca llegue a su destino, el verdadero trayecto es la vida misma.
El tren no es solo un refugio en un mundo helado; es una metáfora de la civilización, un experimento social sobre raíles. La humanidad, enfrentada a su propia extinción, recibe una segunda oportunidad para reorganizarse, redefinir su estructura y aprender de sus errores. ¿Es realmente posible cambiar? ¿O la historia está condenada a repetirse? En este microcosmos de metal y desesperación, las dinámicas de lucha de clases, revolución y control social se despliegan con crudeza, sin respuestas fáciles ni héroes impolutos.
Reparto coral y bien equilibrado
Las interpretaciones mantienen un nivel notable a lo largo de toda la serie, con personajes bien trazados y perfiles psicológicos complejos. Daveed Diggs, en la piel de Andre Layton, representa a un líder reacio atrapado entre la moral y la necesidad de sobrevivir, mientras que Jennifer Connelly dota a Melanie Cavill de una presencia magnética y determinante. A su alrededor, intérpretes como Mickey Sumner (Bess Till), Alison Wright (Ruth Wardell), Iddo Goldberg (Bennett Knox) y Roberto Urbina (Javier de La Torre) enriquecen el conjunto con actuaciones sólidas y carismáticas, aportando capas emocionales y matices a cada arco individual.
La fuerza se sostiene en la dimensión coral: Rowan Blanchard (Alexandra Cavill), Katie McGuinness (Josie Wellstead) y Sam Otto (John Osweiller) muestran una evolución notable, mientras que Sean Bean (Wilford) y Lena Hall (Miss Audrey) brillan en papeles marcados por la fractura interior y los excesos emocionales. Aleks Paunovic (Bojan Boscovic) encarna con sobriedad la lealtad inquebrantable. En la recta final, nombres como Clark Gregg o Michael Aronov se suman a la causa, aportando nuevas energías a este microcosmos distópico sobre raíles. Cuatro temporadas dan para mucho, y el reparto suma y sigue... pero siempre ha sabido estar a la altura del viaje.
Conclusión
A nivel conceptual, la serie es una distopía feroz sobre la desigualdad, la lucha de clases y los mecanismos que impulsan las revoluciones. No hay discursos maniqueos ni soluciones simplistas. Los personajes se mueven en una escala de grises, con contradicciones y dilemas constantes. Como en la vida, nada es blanco o negro.
El desenlace plantea una poderosa metáfora sobre la liberación del pensamiento único y la ruptura con estructuras opresivas disfrazadas de salvación. Abandona la idea de que la seguridad se encuentra en la obediencia a un orden preestablecido y señala, en cambio, que la verdadera supervivencia nace de cuestionar, de arriesgar y de imaginar alternativas más allá de los límites impuestos.
Es también un canto a la naturaleza como fuerza regeneradora y autónoma, que sigue adelante al margen de la arrogancia humana. La vida no necesita permiso para abrirse paso, y el mundo no gira en torno a nuestra presencia. La esperanza, entonces, no está en conservar lo que nos encierra, sino en atrevernos a mirar más allá, confiar en el cambio y asumir que adaptarse no es rendirse, sino evolucionar.
Nota: B+
17 de agosto de 2020
17 de agosto de 2020
4 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si, así es, si tu eres fan del director, y/o fan de la película original, y cuando viste el anuncio de la producción de una serie te echaste a temblar, siento decirte que todos los miedos que tenías se han cumplido.
Han convertido una historia de clases sociales, en una serie prácticamente procedimental de detectives.
Una de esas que generan los programas de PC. Secuencias unidas una detrás de otra siguiendo un guión mediocre. Insulsa, sin fondo, sin ganas. Solo Jennifer Connelly parece ponerle ganas, intenta tirar del carro, pero no es ni de lejos suficiente, la serie se hunde precipitadamente en un pozo sin fondo.
Pero hay algo que se puede salvar, algunos escenarios de los vagones del tren son espectaculares, algunos.
Han convertido una historia de clases sociales, en una serie prácticamente procedimental de detectives.
Una de esas que generan los programas de PC. Secuencias unidas una detrás de otra siguiendo un guión mediocre. Insulsa, sin fondo, sin ganas. Solo Jennifer Connelly parece ponerle ganas, intenta tirar del carro, pero no es ni de lejos suficiente, la serie se hunde precipitadamente en un pozo sin fondo.
Pero hay algo que se puede salvar, algunos escenarios de los vagones del tren son espectaculares, algunos.
25 de noviembre de 2021
25 de noviembre de 2021
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
En general me suelen gustar las distopías y esta ofrece temas interesantes que se entrecruzan. Con un guión rápido para que en todos los capítulos haya alguna trama interesante y algo de acción. Muchos actores han conseguido representar muy bien los intereses de los personajes, ese realismo que no abunda en las ficciones por el que los personajes pueden ser principalmente malvados o buenos pero sus acciones moverse en un abanico más complejo. La serie también intenta traer una reflexión sobre el origen de los gobiernos, estados, actuar de las personas con poder o sin poder y todos los cambios que se producen en las sociedades reflejado aquí en un tren inmenso pero que no es sino una mínima muestra de lo que sería el mundo.
Ciertas cosas que no o sí me han gustado ya entrando en detalles de guión:
Ciertas cosas que no o sí me han gustado ya entrando en detalles de guión:
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La serie intenta no seguir todos los tópicos y se agradecen escenas mu completas con personajes secundarios que en mi opinión van enriqueciendo la historia pero hay detalles que sí caen en repetir patrones ya muy vistos como que Miss Audrey provenga de la prostitución, el pasado de las heroínas que fueron violadas y luego acaban de mataharis como que no es necesario en una serie que parece mostrar un mundo bastante igualitario (donde por cierto hay luchas cuerpo a cuerpo entre hombres y mujeres que me tengo que creer pero no puedo creerme que una mujer no regente un vagón de noche y sea sensual sin haber sido prostituida) y otro detalle de esta índole es que vuelven a poner a mujeres como astutas manipuladoras para alterar el orden, quizás podrían hacerlo para ellas conseguir poder, pero no, lo hacen por razones un poco absurdas o sentimentales, de hecho Melanie se tortura todo el tiempo por el abandono de su hija en cambio Andree no menciona casi nunca a su hijo y está obsesionado igualmente con el poder y conseguir un fin.
Pese a esos detalles los personajes siguen pareciendo muy reales y teniendo particularidades que te ayuda a recordarlos y sentir la coherencia de su historia en el relato.
El personaje de Willford me gusta mucho, es tan odioso y divertido como debe ser.
Ruth y Madeleine: La primera me parece que hace un trabajo muy bueno, dan muchas ganas de patearla y luego te ves entendiéndola. La segunda al principio cansa un poco ese "hacer todo y hacerlo bien" hasta los genios se cansan, su parte en la estación sí que hace un trabajo muy bueno y mantiene el interés que es difícil siendo episodios más lentos y con poco dialogo entre personajes.
Pese a esos detalles los personajes siguen pareciendo muy reales y teniendo particularidades que te ayuda a recordarlos y sentir la coherencia de su historia en el relato.
El personaje de Willford me gusta mucho, es tan odioso y divertido como debe ser.
Ruth y Madeleine: La primera me parece que hace un trabajo muy bueno, dan muchas ganas de patearla y luego te ves entendiéndola. La segunda al principio cansa un poco ese "hacer todo y hacerlo bien" hasta los genios se cansan, su parte en la estación sí que hace un trabajo muy bueno y mantiene el interés que es difícil siendo episodios más lentos y con poco dialogo entre personajes.
24 de abril de 2025
24 de abril de 2025
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El director Bong Joon-ho nos ofreció su película Rompenieves (Snowpiercer, 2013), cuya idea y guion fueron revolucionarios. A partir de esa propuesta nació la serie Snowpiercer: Rompenieves (2020). Doce guionistas han intentado expandir el universo creado por Bong Joon-ho, pero lamentablemente no han logrado estar a la altura.
Las dos primeras temporadas son aceptables y logran recordar, en cierta medida, a la película original. Sin embargo, las dos temporadas restantes —incluida la cuarta, que acabo de ver— resultan interminables.
La serie decae con un desarrollo lento; las escenas violentas aumentan con el tiempo, pero las ideas y el guion se vuelven repetitivos. Su visionado se hace pesado, tosco y aburrido.
Ni siquiera las actuaciones de estrellas como Sean Bean y Jennifer Connelly logran rescatar la serie. Por otro lado, los actores Mickey Sumner, Daveed Diggs y Alison Wright sí ofrecen interpretaciones destacables.
Lamentablemente, la tercera y cuarta temporada han sido insoportables.
No la recomiendo.
Las dos primeras temporadas son aceptables y logran recordar, en cierta medida, a la película original. Sin embargo, las dos temporadas restantes —incluida la cuarta, que acabo de ver— resultan interminables.
La serie decae con un desarrollo lento; las escenas violentas aumentan con el tiempo, pero las ideas y el guion se vuelven repetitivos. Su visionado se hace pesado, tosco y aburrido.
Ni siquiera las actuaciones de estrellas como Sean Bean y Jennifer Connelly logran rescatar la serie. Por otro lado, los actores Mickey Sumner, Daveed Diggs y Alison Wright sí ofrecen interpretaciones destacables.
Lamentablemente, la tercera y cuarta temporada han sido insoportables.
No la recomiendo.
16 de mayo de 2025
16 de mayo de 2025
Sé el primero en valorar esta crítica
Ambientada siete años después de que el mundo se convirtiera en un páramo helado, Snowpiercer se centra en los restos de la humanidad, que habitan un gigantesco tren en perpetuo movimiento que da la vuelta al mundo. De hecho el tren necesita estar en constante movimiento, gracias a su motor perpetuo (como se ve en los planos de la secuencia inicial), llamado "Motor Eterno". Si el tren se detuviera durante más de trece minutos, todos morirían congelados. La temperatura exterior ronda los -120 grados Celsius (-184 grados Fahrenheit). La controladora del tren, Melanie (Jennifer Connelly), le pide a un rebelde de la clase baja del tren llamado Layton que investigue un asesinato. Andre Layton (Daveed Diggs: 41 episodios, 2020-2024) utiliza su nuevo puesto como detective del tren para investigar el asesinato mientras recopila información para la revolución. Layton, junto con Bess Till (Mickey Sumner), se adentran en el mercado negro de Snowpiercer en busca del asesino y de un valioso producto para su revolución. Más tarde, Melanie se enfrenta a una crisis de recursos, con consecuencias potencialmente drásticas para todo el tren. Mientras tanto, Layton es un valiente luchador por la libertad que debe tomar decisiones desesperadas y arriesgadas para proteger a sus seres queridos, así como enfrentarse a todo tipo de peligros. ¡Los pasajeros del tren son los únicos supervivientes de la Tierra! ¡Ábrete paso hasta el frente! ¡Avanzamos!
Esta es una adaptación televisiva de la exitosa película «Snowpiercer» (2013). Esta película se ambienta en 2014 y 2031, protagonizada por Chris Evans, Jamie Bell, Ed Harris, Alison Pill, Luke Pascualino, Tilda Swinton y Octavia Spencer. Dirigida por Bong Joon Ho, su primera película en inglés. El guionista y director Bong Joon Ho quiso subrayar el apremiante peligro del calentamiento global al establecer el año de la dispersión de CW-7 en 2014. De hecho, este último es el productor de la serie, que consta de 4 temporadas con un total de 41 episodios.
Una atrayente serie de ciencia ficción con un concepto fascinante: varias personas luchan por sobrevivir en un tren rodeados de una tierra completamente congelada. Una historia distópica y polémica que denuncia el totalitarismo, la lucha de clases, la injusticia social y las políticas de supervivencia se cuestionan en esta fascinante adaptación televisiva. En los primeros episodios, se aborda el aumento de la tensión a medida que un tren avanza en medio de una ventisca eterna, albergando a cientos de personas divididas en clases. Luego, un asesinato espeluznante aviva la división de clases; en Snowpiercer, Melanie contacta a a un peligroso rebelde para ayudar a resolver el asesinato: el es nada menos que André Layton, el único detective de homicidios superviviente del mundo.
Esta historia está basada en la novela gráfica francesa "Le Transperceneige", ilustrada por Jacques Lob, Benjamin Legrand y Jean-Marc Rochette. Así, los dibujos de la larga cola del fantástico tren Snowpiercer fueron ilustrados por Jean-Marc Rochette. Bong Joon Ho descubrió el cómic a finales de 2004, durante la preproducción de The Host (2006), y quedó fascinado por la idea de las personas que luchan por sobrevivir en un tren. Entonces, el director contactó con el autor dibujante original de la novela gráfica Le Transperceneige. Bong Joon Ho conoció el material original, una novela gráfica francesa, mientras hojeaba una librería universitaria en Seúl. Leyó el libro completo en ese mismo momento, creando después la versión cinematográfica.
El tren consta de primera, segunda y tercera clase, la cola y la locomotora en la parte delantera. Los pasajeros de la cola no tenían billete y entraron al tren a la fuerza. Se menciona varias veces que 400 pasajeros viajan en la cola y que se les permite quedarse a cambio de trabajar. Los pasajeros de tercera clase no tenían que pagar el billete, pero sí trabajar. Los pasajeros de primera clase sí pagaban el billete; uno de ellos, según se menciona, pagó 400 millones. La locomotora es para los maquinistas y el Sr. Wilford interpretado por Sean Bean.
Como se ve en el mapa mundial de Industrias Wilford, expuesto en las salas de recepción, y en la secuencia del título inicial, la ruta del tren recorre las costas de la mayoría de los continentes, excluyendo Groenlandia y el norte de Europa (Gran Bretaña y los países escandinavos). Esto implica que existe algún tipo de conexión entre los continentes, posiblemente los océanos helados.
TNT publicó una cronología de la saga Snowpiercer, indicando que la serie transcurre siete años después de la extinción, mientras que la película transcurre diecisiete años después. Esto significa que, a pesar de estar basada en la película, los eventos de la serie ocurren diez años antes que el largometraje.
El piloto original, dirigido por Scott Derrickson y escrito por Josh Friedman, nunca se estrenó y solo se utilizaron algunas tomas en la serie. Trece de los actores del piloto original continuaron en la serie, pero varios fueron reinterpretados para personajes diferentes.
Se trata de una serie de ciencia ficción estándar, pero también original, con suspense, thriller, huidas y persecuciones, acción frenética, fuego cruzado, luchas, explosiones, violencia, lagunas argumentales y una caracterización abundante. Existe una crítica real a la rígida diferencia entre clases sociales: baja y alta, cada una creando su propia economía y sistema de clases, en el que cada sección del tren depara nuevas sorpresas para el grupo que debe abrirse paso. La serie fue dirigida profesionalmente por buenos directores de televisión, como: Christoph Schrewe, Leslie Hope, James Hawes, Sam Miller, Helen Shaver, Frederick E.O. Toye, David Frazee, Clare Kilner, Rebecca Rodriguez, Erica Watson, Joe Menendez, Everardo Gout, Scott Derrickson.
Esta es una adaptación televisiva de la exitosa película «Snowpiercer» (2013). Esta película se ambienta en 2014 y 2031, protagonizada por Chris Evans, Jamie Bell, Ed Harris, Alison Pill, Luke Pascualino, Tilda Swinton y Octavia Spencer. Dirigida por Bong Joon Ho, su primera película en inglés. El guionista y director Bong Joon Ho quiso subrayar el apremiante peligro del calentamiento global al establecer el año de la dispersión de CW-7 en 2014. De hecho, este último es el productor de la serie, que consta de 4 temporadas con un total de 41 episodios.
Una atrayente serie de ciencia ficción con un concepto fascinante: varias personas luchan por sobrevivir en un tren rodeados de una tierra completamente congelada. Una historia distópica y polémica que denuncia el totalitarismo, la lucha de clases, la injusticia social y las políticas de supervivencia se cuestionan en esta fascinante adaptación televisiva. En los primeros episodios, se aborda el aumento de la tensión a medida que un tren avanza en medio de una ventisca eterna, albergando a cientos de personas divididas en clases. Luego, un asesinato espeluznante aviva la división de clases; en Snowpiercer, Melanie contacta a a un peligroso rebelde para ayudar a resolver el asesinato: el es nada menos que André Layton, el único detective de homicidios superviviente del mundo.
Esta historia está basada en la novela gráfica francesa "Le Transperceneige", ilustrada por Jacques Lob, Benjamin Legrand y Jean-Marc Rochette. Así, los dibujos de la larga cola del fantástico tren Snowpiercer fueron ilustrados por Jean-Marc Rochette. Bong Joon Ho descubrió el cómic a finales de 2004, durante la preproducción de The Host (2006), y quedó fascinado por la idea de las personas que luchan por sobrevivir en un tren. Entonces, el director contactó con el autor dibujante original de la novela gráfica Le Transperceneige. Bong Joon Ho conoció el material original, una novela gráfica francesa, mientras hojeaba una librería universitaria en Seúl. Leyó el libro completo en ese mismo momento, creando después la versión cinematográfica.
El tren consta de primera, segunda y tercera clase, la cola y la locomotora en la parte delantera. Los pasajeros de la cola no tenían billete y entraron al tren a la fuerza. Se menciona varias veces que 400 pasajeros viajan en la cola y que se les permite quedarse a cambio de trabajar. Los pasajeros de tercera clase no tenían que pagar el billete, pero sí trabajar. Los pasajeros de primera clase sí pagaban el billete; uno de ellos, según se menciona, pagó 400 millones. La locomotora es para los maquinistas y el Sr. Wilford interpretado por Sean Bean.
Como se ve en el mapa mundial de Industrias Wilford, expuesto en las salas de recepción, y en la secuencia del título inicial, la ruta del tren recorre las costas de la mayoría de los continentes, excluyendo Groenlandia y el norte de Europa (Gran Bretaña y los países escandinavos). Esto implica que existe algún tipo de conexión entre los continentes, posiblemente los océanos helados.
TNT publicó una cronología de la saga Snowpiercer, indicando que la serie transcurre siete años después de la extinción, mientras que la película transcurre diecisiete años después. Esto significa que, a pesar de estar basada en la película, los eventos de la serie ocurren diez años antes que el largometraje.
El piloto original, dirigido por Scott Derrickson y escrito por Josh Friedman, nunca se estrenó y solo se utilizaron algunas tomas en la serie. Trece de los actores del piloto original continuaron en la serie, pero varios fueron reinterpretados para personajes diferentes.
Se trata de una serie de ciencia ficción estándar, pero también original, con suspense, thriller, huidas y persecuciones, acción frenética, fuego cruzado, luchas, explosiones, violencia, lagunas argumentales y una caracterización abundante. Existe una crítica real a la rígida diferencia entre clases sociales: baja y alta, cada una creando su propia economía y sistema de clases, en el que cada sección del tren depara nuevas sorpresas para el grupo que debe abrirse paso. La serie fue dirigida profesionalmente por buenos directores de televisión, como: Christoph Schrewe, Leslie Hope, James Hawes, Sam Miller, Helen Shaver, Frederick E.O. Toye, David Frazee, Clare Kilner, Rebecca Rodriguez, Erica Watson, Joe Menendez, Everardo Gout, Scott Derrickson.
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