Una cinta de los especiales por decirlo de alguna manera, hermanos Coen.
Esta vez el film tiene final, ya que todas sus películas que he visto anteriormente te dejaban con muchos cabos sueltos y ganas de mas.
Una historia algo alocada con un guion enrevesado, con pequeñas dosis cómicas o un humor algo especial, un reparto brutal que da la talla en todo momento y muy Coen en todo momento.
Lo mejor: Sin duda las actuaciones y el papel gracioso de Brad Pitt.
Lo peor: Hay ocasiones en las que dudas que se trate de una comedia por su falta en casi todo momento, lo mas gracioso son las situaciones pero deja mucho que desear.
Mejor escena: La embajada rusa.

Un muy interesante thriller-comedia, que nos narra como varias historias comunes se van entrelazando por un así decirlo mal entendido. Y es este enlace, muy ingeniosamente echo, lo que produce un gran entretenimiento y de vez en cuando algunas risas.

Pero en si la película no llega a ser nada del otro mundo, ya que no solo no llega a ser hilarante, sino que también se le siente la falta de un guión más inteligente y fresco. Aún así no se puede negar su originalidad.

Las interpretaciones están a muy buen nivel, cumpliendo con su objetivo y no dejando mal a la película.

Bueno en conclusión, los Coen no decepcionan pero tampoco brillan. Si eres fan de estos hermanos pasarás un buen rato.

Deleitosa, irónica, desvergonzada y extravagante comedia de enredo de espías... con el sello tan propio y peculiar de los hermanos Coen estampado en este caso de la mejor manera posible (al menos desde "El gran Lebowsky").

Es cierto que los Coen han tenido cintas de humor más o menos afortunadas (que en este caso no se pueden comparar con sus films "serios")... pero la verdad es que "Quemar después de leer" es uno de sus mejores exponentes hasta la fecha.

Los Coen nos ofrecen (desde el primer diálogo de la C.I.A. hasta el último) de manera resolutiva y elegante una comedia llena de un humor audaz y descarado, con un enredo tan ingenioso como disparatado, y con unos diálogos alocados y socarrones.

Todos los ingredientes del cine de humor de los Coen se dan en este metraje para poder pasar un buen rato divertido de principio a fin (que, al fin y al cabo, es lo único que pretende el film): una notable fotografía, una narración dinámica, una actuaciones geniales (que humanizan con gracejo a esa caterva de perdedores, paranoicos, granujas, hedonistas e idiotas varios) pero sobre todo un guión atrapante, negro e ingenioso cargado de divertidos malentendidos, confusiones, farsas y paranoias varias... una bola de nieve que cada vez se va haciendo más grande y que va dejando por el camino estilosas situaciones caústicas y surrealistas, un lío monumental de más y más carcajadas cuanto más se encizaña.

Probablemente los Coen se hayan lucido más en films como "No es país para viejos". Pero si lo que se va buscando es una cinta de humor ingenioso y disfrutable, desde luego en "Quemar después de leer" se encuentra. En mi caso cumple tan bien su honorable cometido de hacer reir y sonreir que no la quemaré de mi videoteca.

Lo mejor: Su guión (y algunos de sus diálogos de carcajada). John Malcovich...

Con un muy buen casting, divertidos personajes y con una historia creativa e hilarante esta es una comedia muy divertida de ver y muy recomendable.

Gracias al cansino y húmedo tiempo que nos está regalando este 2013 hoy he podido descubrir una de esas pocas películas que consiguen hacerte llorar de pura risa. Una de esas películas que hacen que durante una hora y media te creas un poquito más feliz y que te ayudan a olvidar que al otro lado de la ventana desluce un día gris y oscuro y que estás muy hasta las narices de ese frío que pela y de todas esas personas que deambulan sin licencia para conducir sus paraguas.
La criatura:“Quemar después de leer”.Casi cinco añazos. Los papás: Joel y Ethan Cohen, genios y figuras, más allá del bien y del mal y capaces de convertir un martes con pocas expectativas en casi-casi un punto de inflexión en tu vida (xagerá...).
Qué bueno poder reírnos de esa estupidez humana, la nuestra, genética, innata... Y qué bueno poder hacerlo desde casa, donde el pause se convierte en aliado para que puedas descojonarte libremente y sin prisas, sin perderte ni una coma de los diálogos y dándote un tiempo para secarte las lágrimas.
Muchas escenas de esta película siembran en mi la sospecha de que tras la cara no amable de John Malkovich se esconde una deidad de apariencia humana. Huelga decir que su interpretación, como todas, es magistral. Destaca también un Brad Pitt hiperactivo y adicto al chicle que de divertido se le perdona hasta que esté un pelín sobreactuado. Tampoco le voy a negar felicitaciones al señor del Nespresso, a quien le queda como un guante su papel de mezquino. Y ya para rematar una Frances McDormand totalmente divertida,exquisita y dulcemente idiota.
Los hermanos Coen retozan en las profundidades del absurdo para regalarnos un enredo de ingenio, escenas brutales e imágenes imborrables. Y como resultado una película original y muy digna, aunque es obvio que esta no es su obra más seria ni la más laureada.