La película entretiene.
Si nos ceñimos sólo a eso, entonces, un 8. Acción, Bruce en su eterno papel de policía problemático con familia desestructurada (que, digo yo, a estas alturas ya le debe de salir de por sí, sin esforzarse siquiera en aprender el papel, ¿no?), crimen, suspense, efectos alucinoides, saltos tipo Matrix y moraleja final con malo que quiere reventar el mundo mundial. Todo embutido en un envoltorio bastante aparente, moderno y tal.
El problema, creo, lo tuve, porque mientras veía esta película, no sé exactamente porqué, tenía la extraña sensación de que intentaban remedar una especie de mezcladillo entre Blade Runner, la ya nombrada Matrix, Yo Robot y Minority Report. Y que no salía, oiga.
De ese modo, con el fondo de mi cerebro runruneando en esas lides, no había forma de concentrarse y creerme la historia que cuenta.
O sea, ¿me voy a quedar tooodo el día acostada en una silla de dentista, mientras un robot muy mono y muy sofisticado sale, trabaja, practica sexo, conduce, se relaciona, va al centro de belleza, se pega descargas eléctricas a modo de crack, cuida a mis hijos (que a estas alturas me gustaría saber cómo los he tenido) y liga en la disco, por mí? Genial perspectiva.
Anda que le debe de quedar el cuerpo a una como una jota, al cabo de 24 ó 18 horas de estar tirada, sin moverse, esperando a que la Barbie o el Ken vuelvan a casa para prepararme un Gin Tonic y echar una meadilla.
Nada, que no me lo creo, señor Willis.
Por cierto, los de efectos especiales ya se lo podían haber currado un poquito, que el resto parecen salidos de un especial de Victoria´s Secret y el ex marido de Demi, con ese pelucón y la capota maquillaje, da una grima que no me extraña que prefiera ir sin robotito por la vida. No parece joven, parece Sara Montiel.

La película suscita el dilema que trata plantear de manera algo insatisfactoria para el espectador, pues cambia lo anunciado por algo totalmente diferente al poco rato de empezar.
Bruce Willis es un avatar desaprovechado por la película y que debería haber tenido más tiempo en pantalla.
Visualmente no está mal, pero es algo genérica.
El dilema está bien, pero los personajes no son interesantes y no se conecta con nadie en esta película realmente.
El audiovisual no está mal, pero el propio planteamiento falla y peca de que el entretenimiento no abunda demasiado que digamos.
La trama no termina de convencer y el apartado artístico no tiene demasiada personalidad. El final deja algo indiferente, pero por falta de conexión con los personajes.

Acción con escasas ideas y un planteamiento reiterativo, carente de fluidez, que ha sido juzgado por los espectadores, sin generosidad. Entre los más de 25.000 la nota no alcanza el 6... y eso que existe mucho fanático de estos productos.

Al principio sorprenden los sustitutos, pues se parecen de manera asombrosa, a Lola Flores en ese anuncio que la devolvió a la vida... Estos fueron diseñados hace unos doce años, y sospecho que la técnica utilizada es bastante similar.

Lo peor que le puede pasar a una película de acción, es que sea aburrida... porque ya es difícil que contando con el material que contaban, construyesen semejante...

Mediocre film de ciencia ficción con el gran Bruce Willis de protagonista ambientado en un mundo fututo dónde los humanos nos servimos de robots con nuestra apariencia mejorada (los sustitutos) para hacer nuestras funciones vitales, cómo ir a trabajar, conducir... Mientras los seres reales estamos en casa durmiendo la mona y engordando cómo cerdos ya que no nos movemos en todo el día. La premisa puede resultar interesante pero és aquí dónde está el fallo del film, la trama se hace muy pesada (y eso que sólo dura 88 minutos), las motivos de los protagonistas no quedan muy bien expuestos y lo peor: Willis por primera vez en tiempo no és el actor carismático a que nos tiene acostumbrados, sale viejo y por momentos hasta parece Resines cuando lleva su americana marrón, sólo falta que salga Bonilla y pareceria un episodio de Los Serrano. De Bruce pido acción y entretenimiento no un subproducto cómo este que no le hace justicia.

La propuesta inicial de la película, aunque algo vista, despierta cierto interés.
La trama de intriga que se nos ofrece resulta bastante atractiva, pero se ve empañada al no saber llevar debidamente la parte emocional; la cual, si se hubiese hecho bien, habría contribuido a que la película fuese mucho mejor.