No llevábamos ni 15 minutos de película cuando Deadpool se auto proclamaba el Jesucristo de Marvel. Y no es para menos, después de unas películas mediocres y de otras tantas series que tampoco daban la talla llegaba Ryan Reynolds y nos prometía el regreso de uno de los personajes más carismáticos del mundo superheroico: Lobezno.

En una época donde el mundo de cinematográfico de los superhéroes esta cada vez más explotado y el consumidor medio se está empezando a aburrir ya de los trajes y los superpoderes, Deadpool llegó para, en una clara autocrítica al mundillo, dar un atisbo de esperanza a los que creemos que el género aún puede darnos grandes cosas.

Está claro, si te pones a leer las críticas profesionales, aunque tienen a ser más positivas, la película es un claro fracaso. Menos mal, que algunas veces el público y la crítica no están de acuerdo. Deadpool y Wolverine es una película creada para el disfrute del público. Y lo consigue con creces.

Es normal que la crítica profesional le de caña, seamos sinceros, la historia no es del todo buena ni está muy bien desarrollada, algunos chistes no tienen gracia y las constantes autorreferencias a películas que fracasaron en Marvel (no nos matéis, hablamos de Blade Trinity con un jovencísimo Ryan Reynolds también en el elenco) pueden llegar a abrumar, pero sorpresa. Nos da igual.

La película es divertida, la historia se pasa rápido, la acción mola, las escenas post-créditos son muy buenas y Wolverine… Hugh Jackman, te echábamos de menos. Lobezno y Hugh Jackman consiguen que de verdad queramos verlos hasta los 90 años. Rebosan carisma, físico, testarudez y furia. Solo por ver a nuestro X-Men favorito con su traje amarillo merece la pena visionar la película.

Hay tantos chistes, que por probabilidad todos no iban a ser buenos, de echo hay algunos que dan vergüenza ajena, pero se compensa con los momentazos que encontramos a lo largo de la película.

Bye bye bye… Otra cosa que funciona a la perfección es la música, ya sea por esa intro que se cuela en el top 3 de las mejores de Marvel, como por todas las canciones elegidas para las peleas o momentos épicos. Tirar de clásicos no siempre es malo, y recuperar algunos como este de NSYNC le da a la película toque necesario para que no pierda ritmo,

Recomiendo Deadpool y Wolverine a
Si te gustan las películas de comedia violentas, las pelis de superhéroes, eres fan de los X-Men o simplemente te gusta Lobezno, esta película te va a encantar. A los demás, si igualmente soportáis la sangre y os gusta la acción, vais a disfrutar igualmente de una película que se pasa muy rápido.

Me he reído de principio a fin.
Para mi es una película "fan service" en el sentido que se mete con todos los temas criticados por el mundo friki en cuanto al universo de super héroe.
Hay muchos guiños que podrán entender solamente los aficionados de Marvel/disney/DC o incluido la Fox.
En cuanto al estilo, es francamente políticamente incorrecto. los diálogos son una maestría del mal hablado (no recomendado para niños) pero tan divertido que son risas tras risas.

Parece que el UCM ha entrado en una especie de crisis creativa y saturación de nuevos personajes carentes de carisma. Por suerte la compra de Fox por parte de Disney ha servido para fichar a base de talonario a este mercenario bocazas que logra resucitar su nueva casa, en este caso de las Ideas, y ofrecernos además la mejor entrega de su trilogía. Ahora cuenta con el dinero y los contactos necesarios para deleitarnos con una super producción llena de cameos de toda índole y épocas, pero sin perder la desfachatez, la violencia y el humor absurdo y constante de las dos cintas anteriores.

Ahora bien, el hecho de entrar en este grandioso universo hace que sea recomendable estar un poco al día del mismo para pillar muchos chistes y referencias, y como mínimo haber visto la serie de Loki para entender algunos conceptos "multiversales". Más allá de todo esto, la diversión llena de risas constantes está garantizada, gracias también al modo en el que Jackman se ha dejado contagiar por el desenfreno de Reynolds, y que ojalá sirva para que desde arriba vean que lo importante no es la cantidad de contenido superheroico con el que nos llevan saturando desde hace años, si no la calidad, la originalidad y la frescura con la que se realiza y se plasma en pantalla.

Más mini críticas en cinedepatio.com

Una cinta que ha recibido muy buenas críticas, y que como aficionado al género no podía perderme.

En esta ocasión Deadpool y Lobezno se juntan para viajar por el multiuniverso. Las actuaciones y los efectos especiales están a gran nivel, la película es entretenida, y no falta el característico humor de Deadpool, si bien a mi no me ha parecido mejor que las dos primeras de Deadpool. En principio el guión es muy interesante por el espectáculo o el juego que da el multiuniverso, aunque también ya no sorprende porque estaba algo visto por ejemplo con el Dr.Strange y Spiderman.

En resumen, una película recomendable que no defraudará a los aficionados al género.

La nueva entrega de Deadpool y Wolverine podría definirse como un ejercicio de fanservice llevado a la máxima expresión, un fenómeno que algunos han bautizado como el "efecto Endgame". En esencia, la película ofrece a los espectadores todo lo que han deseado ver, desde diálogos cargados de humor hasta escenas de acción trepidante, cumpliendo con las expectativas más inmediatas. Sin embargo, surge la pregunta inevitable: ¿perdurará este entusiasmo con el tiempo o será relegada a una cinta más en el vasto universo de películas de superhéroes?

Es fácil caer en la tentación de calificar esta película como “una oportunidad perdida”, sobre todo si, como yo, has sentido que algunas franquicias han desaprovechado su potencial, como ha sido el caso de Star Wars, una saga que ha marcado mi infancia. Crear una historia con personajes tan queridos no es tarea fácil, y es doloroso ver cuando se realiza de manera superficial, solo para explotar una propiedad intelectual. Sin embargo, Deadpool y Wolverine logran esquivar en gran medida este destino.

El deseo de ver a estos dos personajes icónicos compartiendo pantalla es algo que los fans han anticipado por años. La química entre Ryan Reynolds y Hugh Jackman, quienes dan vida a Deadpool y Wolverine respectivamente, es innegable y resulta en algunos de los momentos más memorables y surrealistas del cine reciente. Admito que si hubiera tenido la oportunidad de escribir una historia para ellos, no creo que hubiese alcanzado el nivel de ingenio y sorpresa que el equipo creativo ha conseguido.

Es cierto que para disfrutar plenamente de esta película, se requiere un amplio bagaje en el cine de superhéroes, que va más allá del Universo Cinematográfico de Marvel, abarcando también las producciones de Fox y otras más. Sin embargo, mencionar cuáles podrían arruinar algunas de las sorpresas que la cinta ofrece, por lo que prefiero dejar esos detalles en el misterio para evitar spoilers.

La trama y el desarrollo de personajes, en esta ocasión, son aspectos secundarios. A diferencia de las películas anteriores de ambos personajes, donde una narrativa más profunda no excluía el entretenimiento, aquí el enfoque está claramente en la conexión entre Deadpool y Wolverine, y en cómo se crean situaciones humorísticas y absurdas en un contexto que Marvel rara vez explora: el cine clasificado para mayores de 18 años.

En resumen, la película es una experiencia sumamente disfrutable que deja al espectador con ganas de más. Aunque el fanservice está presente en abundancia, incluso para los propios actores que parecen disfrutar de sus roles, se siente que la película ha aprovechado al máximo la oportunidad de juntar a estos dos titanes del cine de superhéroes. Si eres fan de Deadpool, Wolverine o simplemente del género, seguramente saldrás satisfecho.