Éxodo: Dioses y Reyes
2014 

5.2
23,632
21 de diciembre de 2014
21 de diciembre de 2014
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Vaya por delante que me resisto a comparar este Éxodo con el de Los diez mandamientos, pues sería como comparar Psicosis con La bella durmiente. Éxodus parece querer aprovechar todos los recursos técnicos actuales para contar la archi conocida historia de Moisés utilizando y abusando de efectos especiales cada vez mas apabullantes. Así, en esta película todo es grande. Los espacios aéreos con vistas de las ciudades, las montañas y los desiertos, los ejércitos, las batallas, los cocodrilos, las ranas, la langosta... y sobre todo, el tsunami tan salvaje que te dan ganas de encogerte en el asiento. Todo tan bien hecho que la frase "de proporciones bíblicas" queda plenamente justificada. Como la que pronuncian a menudo las beatas referida al "temor de Dios" Aquí, Yaveh es tan retorcido como temible. Queda claro que para Ël, el fin justifica los medios y no se anda con chiquitas. Pero en esta historia en la que Dios está presente y en plena forma, se echa de menos el toque místico, el roce religioso o como queramos llamarle y se utiliza un recurso tan discutible como crear una especie de mensajero entre el Creador y Moisés que rechina por todos lados. Aquí sí se echa de menos la voz cavernosa que en Los Diez Mandamientos dice "Yo soy el que sooooy" Christian Bale está muy bien. Actor ducho en papeles violentos (el tren de las 3.10, American Psycho,, Batman) hace un Moisés convincente y consigue en algunos planos parecerse a Charlton Heston y estupenda y guapísima Maria Valverde que no se arruga para nada trabajando al lado de celebridades de Hollywood. En suma, un entretenimiento más que, si tiene éxito, propiciará Unos nuevos Sansón y Dalila, David y Goliath o Joseph and his brothers.
26 de diciembre de 2014
26 de diciembre de 2014
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Exodus es una película hinchada en su propia importancia, anabolizada y abrillantada casi tanto como los trajes que lleva Joel Edgerton en la cinta. Ridley Scott me parece un gran director de cine épico (Gladiator, El Reino de los Cielos), incluso cuando el material que maneja es intrascendente (Robin Hood). Pero repasando su carrera, pienso que los mejores momentos de sus películas son los más intimistas y/o no necesariamente los más espectaculares (el aborto de Noomi Rapace en Prometheus, las escenas abyectas de Joaquin Phoenix en Gladiator, todos los metrajes de Thelma y Louise, Alien y Blade Runner, películas intimistas incluso en su espectacularidad)...
En Exodus Scott se nos ha puesto bíblico, solemne, grandioso, importante, pero ha olvidado que para que todos estos adjetivos funcionen, hace falta un guión que los respalde, y esto no ésta presente en Exodus. Su historia, conocida de sobra por todos, se hace rutinaria y arrítmica, en parte debido a errores de montaje y supresión de escenas (vamos a ver, contando con actores tan extraordinarios como Aaron Paul, Sigourney Weaver y Ben Kingsley, ¿dónde han ido a parar sus personajes?). Eso hace que el visionado de Exodus se reduzca a la expectativa de que sus grandes escenas (las plagas de Egipto, la apertura del mar Rojo) ocurran.
Por el camino asistimos a epatantes decorados y un vistoso diseño de producción típico de gran película de Hollywood; al esfuerzo por parte de buenos actores (Bale, Edgerton) de darle hondura a unos personajes y una relación mal planteada desde el principio. Y finalmente, cuando esas escenas mencionadas llegan, es cuando ver Exodus, con todos sus fallos, ha merecido la pena.
Porque tanto las plagas como la persecución y el clímax con el pueblo judío en el Mar Rojo son las mejores escenas de Exodus. Los efectos especiales y la planificación dramática de las escenas son dignas del gran espectáculo que propone la película, y emocionan más que cualquiera de las frases impostadas que sus intérpretes tienen que recitar. Al final, eso es lo más rescatable de esta fallida lectura bíblica (como lo fue el esperpento de Noé que hizo este mismo año Aronofsky), que al menos no es demasiado sionista, pero cuyas lecturas históricas, políticas y religiosas se quedan en el tintero como una mera anécdota.
En Exodus Scott se nos ha puesto bíblico, solemne, grandioso, importante, pero ha olvidado que para que todos estos adjetivos funcionen, hace falta un guión que los respalde, y esto no ésta presente en Exodus. Su historia, conocida de sobra por todos, se hace rutinaria y arrítmica, en parte debido a errores de montaje y supresión de escenas (vamos a ver, contando con actores tan extraordinarios como Aaron Paul, Sigourney Weaver y Ben Kingsley, ¿dónde han ido a parar sus personajes?). Eso hace que el visionado de Exodus se reduzca a la expectativa de que sus grandes escenas (las plagas de Egipto, la apertura del mar Rojo) ocurran.
Por el camino asistimos a epatantes decorados y un vistoso diseño de producción típico de gran película de Hollywood; al esfuerzo por parte de buenos actores (Bale, Edgerton) de darle hondura a unos personajes y una relación mal planteada desde el principio. Y finalmente, cuando esas escenas mencionadas llegan, es cuando ver Exodus, con todos sus fallos, ha merecido la pena.
Porque tanto las plagas como la persecución y el clímax con el pueblo judío en el Mar Rojo son las mejores escenas de Exodus. Los efectos especiales y la planificación dramática de las escenas son dignas del gran espectáculo que propone la película, y emocionan más que cualquiera de las frases impostadas que sus intérpretes tienen que recitar. Al final, eso es lo más rescatable de esta fallida lectura bíblica (como lo fue el esperpento de Noé que hizo este mismo año Aronofsky), que al menos no es demasiado sionista, pero cuyas lecturas históricas, políticas y religiosas se quedan en el tintero como una mera anécdota.
24 de enero de 2015
24 de enero de 2015
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo peor de la película es sin duda lo fría que resulta. No transmite nada, ni emociones, ni personajes ni escenas.
Tenemos una vez más la historia de Moisés pero esta vez protagonizada por Batman y digo bien. No digo Christian Bale si no Batman porque parece más la versión bíblica del cruzado de la capa que otra cosa. Es muy molón, reparte castañas que ni las marujas en rebajas y tiene un liderazgo que hace parecer Lemmings al pueblo elegido. El resto de reparto están en el mismo nivel sin excepciones.
Luego todo se cuenta a saltos, como si faltaran minutos (y hablamos de más de dos horas) o algo parecido mientras se acompaña de algunos diálogos más simples que el mecanismo de un chupete.
No se hace especialmente densa pero uno tiene que poner de su parte para no mirar la hora ya que como he dicho antes todo es tan frío que mantener el interés en algo cuesta horrores.
Le salva del ridículo unos excelentes efectos especiales pero que es una limosna para una súper producción que podría haber dado mucho más de sí.
Tenemos una vez más la historia de Moisés pero esta vez protagonizada por Batman y digo bien. No digo Christian Bale si no Batman porque parece más la versión bíblica del cruzado de la capa que otra cosa. Es muy molón, reparte castañas que ni las marujas en rebajas y tiene un liderazgo que hace parecer Lemmings al pueblo elegido. El resto de reparto están en el mismo nivel sin excepciones.
Luego todo se cuenta a saltos, como si faltaran minutos (y hablamos de más de dos horas) o algo parecido mientras se acompaña de algunos diálogos más simples que el mecanismo de un chupete.
No se hace especialmente densa pero uno tiene que poner de su parte para no mirar la hora ya que como he dicho antes todo es tan frío que mantener el interés en algo cuesta horrores.
Le salva del ridículo unos excelentes efectos especiales pero que es una limosna para una súper producción que podría haber dado mucho más de sí.
28 de enero de 2015
28 de enero de 2015
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me ha gustado, buena peli. Eso sí, como en todas las cosas tenemos un "pero": Pero le falta sentimiento (por decirlo de alguna manera). Estamos completamente ante una epopeya bíblica, con una épica insensible. Las grandes batallas, la espectacularidad de las escenas, una correcta dirección y unas muy buenas actuaciones: no necesitamos hacer énfasis en este tema porque hacen bien su trabajo, pero nada espectacular y resultón como para remarcarlo con mayúsculas: es más, desaprovechan algunos actorazos como Kingsley, Weaver o Aaron Paul, simplemente anecdóticos. Vamos, un espectáculo superficial. Es decir, todos estos grandes decoros: las batallas, la sangre, el esplendor visual y el trabajo de Scott no puede camuflar los fallos del guion y algunos defectos de los actores...
Me ha encantado, eso sí, la relación de fe y ciencia: una dualidad palpable entre la explicación del fuerte mazazo que recibió Egipto con las plagas ante la duda de un Dios real o una locura de Moisés. Todo queda ambiguo, pero induce a la discusión: buen punto para ellos. He encontrado por eso muy pobre la relación de hermanos y su vertiente política que daría mucho para elevar a gran escala la trama (más allá de lo que todos conocemos), sin hablar del desaprovecho y abandono del drama sobre las aguas del mar Rojo. En fin.
Lo dicho, en resumen: visualmente sin quejas, un blockbuster bíblico: no puedo olvidar las plagas. Todo lo demás no quedará en la memoria como Charlton Heston separando el mar Rojo.
Y se me olvidaba, la banda sonora junto a los VFX lo mejor de la peli: grandísimo trabajo de Alberto Iglesias.
Me ha encantado, eso sí, la relación de fe y ciencia: una dualidad palpable entre la explicación del fuerte mazazo que recibió Egipto con las plagas ante la duda de un Dios real o una locura de Moisés. Todo queda ambiguo, pero induce a la discusión: buen punto para ellos. He encontrado por eso muy pobre la relación de hermanos y su vertiente política que daría mucho para elevar a gran escala la trama (más allá de lo que todos conocemos), sin hablar del desaprovecho y abandono del drama sobre las aguas del mar Rojo. En fin.
Lo dicho, en resumen: visualmente sin quejas, un blockbuster bíblico: no puedo olvidar las plagas. Todo lo demás no quedará en la memoria como Charlton Heston separando el mar Rojo.
Y se me olvidaba, la banda sonora junto a los VFX lo mejor de la peli: grandísimo trabajo de Alberto Iglesias.
10 de marzo de 2015
10 de marzo de 2015
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hollywood lleva años tratando de desempolvar géneros olvidados en el baúl de los recuerdos y pretendiendo hacerlos resucitar a lo grande, lo hemos visto con el cine de artes marciales, el cine negro, incluso el cine mudo... todos estos intentos se cuentan mas en fracasos que en éxitos. La única excepción en mi mas humilde opinión ha sido con el Western, donde por seriedad, sobriedad y producción, se están consiguiendo verdaderas joyas 30 años después de que muriese con Sergio Leone.
En esta ocasión se trata de tratar de resucitar el Peplum, y debo decir que con esta película no solo no lo consiguen, sino que posiblemente lo hundan mas. Habíamos visto “Gladiator”, una notable tentativa... o “Troya”, que pasara sin pena ni gloria por la historia y los recuerdos del celuloide... o “Alejandro Magno”, una lamentable producción que no debería existir... Bueno pues en este ultimo escalón se encuadra perfectamente “Exodus”, película dirigida por Ridley Scott, excelente director con demasiados altibajos en su filmografía, este uno de los bajos, muy muy bajos.
Yo soy de la opinión de si vas a hacer algo que no es nuevo, al menos mejóralo; bien, señor Scott, puede usted meterse “Exodus” donde le quepa, y dejar al resto de la humanidad con “Los Diez Mandamientos”, una producción sin tacha, infinitamente superior a su película, 50 años mas mayor, y que tan abismal es la diferencia que hasta debería ser sacrilegio compararla... no, no unicamente compararla, mencionarla en el mismo texto, como imprudentemente estoy haciendo yo, ya debería de ser castigado.
Nadie se cree su película, ni su ritmo en la que todo ocurre en la ultima media hora, ni sus interpretaciones, y ya es difícil desaprovechar el estratosférico reparto con el que contaba señor Scott...
En esta ocasión se trata de tratar de resucitar el Peplum, y debo decir que con esta película no solo no lo consiguen, sino que posiblemente lo hundan mas. Habíamos visto “Gladiator”, una notable tentativa... o “Troya”, que pasara sin pena ni gloria por la historia y los recuerdos del celuloide... o “Alejandro Magno”, una lamentable producción que no debería existir... Bueno pues en este ultimo escalón se encuadra perfectamente “Exodus”, película dirigida por Ridley Scott, excelente director con demasiados altibajos en su filmografía, este uno de los bajos, muy muy bajos.
Yo soy de la opinión de si vas a hacer algo que no es nuevo, al menos mejóralo; bien, señor Scott, puede usted meterse “Exodus” donde le quepa, y dejar al resto de la humanidad con “Los Diez Mandamientos”, una producción sin tacha, infinitamente superior a su película, 50 años mas mayor, y que tan abismal es la diferencia que hasta debería ser sacrilegio compararla... no, no unicamente compararla, mencionarla en el mismo texto, como imprudentemente estoy haciendo yo, ya debería de ser castigado.
Nadie se cree su película, ni su ritmo en la que todo ocurre en la ultima media hora, ni sus interpretaciones, y ya es difícil desaprovechar el estratosférico reparto con el que contaba señor Scott...
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here