Thor: Un mundo oscuro
2013 

5.6
41,449
Fantástico. Acción. Aventuras
Thor lucha por restablecer el orden en el cosmos, pero una antigua raza liderada por el vengativo Malekith regresa con el propósito de volver a sumir el universo en la oscuridad. Se trata de un villano con el que ni siquiera Odín y Asgard se atreven a enfrentarse; por esa razón, Thor tendrá que emprender un viaje muy peligroso, durante el cual se reunirá con Jane Foster y la obligará a sacrificarlo todo para salvar el mundo. (FILMAFFINITY) [+]
17 de noviembre de 2013
17 de noviembre de 2013
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Regresa el Pataky y su martillazo de poder, y si, la primera respuesta es para las féminas, se ve dándose un agua con el pelazo ondeando al viento y sobre todo, con el torso desnudo, y es que eso es precisamente lo que caracteriza esta adaptación del personaje de Marvel, su paso por un filtro prefabricado que ya desde su comienzo, deja sensaciones encontradas en el espectador.
Las ventajas de este mundo oscuro, es que el nuevo realizador, Alan Taylor, responsable de un sinfín de capítulos en series tan prestigiosas como "Los Soprano", "Mad Men", o la más reciente "Juego de Tronos", inyecta una mayor dosis de vigor al producto, potenciando las escenas de acción y regalando sabiamente la escena a los villanos, siempre infinitamente más atractivos y reveladores que el héroe de turno.
En contra, la ausencia de una mayor personalidad, rasgo que si contenía la cinta primigenia, que resultaba más lenta en su desarrollo, pero que hallaba mayor consistencia en su acabado final, aunque solo fuera porque sabía bordear con cierta habilidad ese sentido del ridículo que planeaba sobre tan compleja traslación de las viñetas del cómic a la gran pantalla.
La falta de un final memorable tampoco ayuda, se agradece mucho más su arranque, por mucho que la planificación en las escenas y la música de Bryan Tyler parezcan un refrito de "El Señor de los Anillos", sobra media hora, y la sensación de agotamiento, una de las constantes en la mayoría de cintas de la Marvel, producen una preocupante destemplanza hacia lo olvidable.
Pese a todo acudir a verla tampoco es un error, no se trata de un film memorable, y su narrativa funciona a golpes de que las cosas sucedan porque si, confluyendo siempre en sorprendentes y poco creíbles giros a favor de los protagonistas, pero no es menos cierto que aquí se trata de desconectar, pasarlo lo mejor posible, y empatizar con el cuidado imaginario de fantasía que se nos ofrece, si uno no es capaz de dejar sus complejos al traspasar el umbral de la sala, mejor que no se acerque a este tipo de propuestas.
Las ventajas de este mundo oscuro, es que el nuevo realizador, Alan Taylor, responsable de un sinfín de capítulos en series tan prestigiosas como "Los Soprano", "Mad Men", o la más reciente "Juego de Tronos", inyecta una mayor dosis de vigor al producto, potenciando las escenas de acción y regalando sabiamente la escena a los villanos, siempre infinitamente más atractivos y reveladores que el héroe de turno.
En contra, la ausencia de una mayor personalidad, rasgo que si contenía la cinta primigenia, que resultaba más lenta en su desarrollo, pero que hallaba mayor consistencia en su acabado final, aunque solo fuera porque sabía bordear con cierta habilidad ese sentido del ridículo que planeaba sobre tan compleja traslación de las viñetas del cómic a la gran pantalla.
La falta de un final memorable tampoco ayuda, se agradece mucho más su arranque, por mucho que la planificación en las escenas y la música de Bryan Tyler parezcan un refrito de "El Señor de los Anillos", sobra media hora, y la sensación de agotamiento, una de las constantes en la mayoría de cintas de la Marvel, producen una preocupante destemplanza hacia lo olvidable.
Pese a todo acudir a verla tampoco es un error, no se trata de un film memorable, y su narrativa funciona a golpes de que las cosas sucedan porque si, confluyendo siempre en sorprendentes y poco creíbles giros a favor de los protagonistas, pero no es menos cierto que aquí se trata de desconectar, pasarlo lo mejor posible, y empatizar con el cuidado imaginario de fantasía que se nos ofrece, si uno no es capaz de dejar sus complejos al traspasar el umbral de la sala, mejor que no se acerque a este tipo de propuestas.
26 de noviembre de 2013
26 de noviembre de 2013
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En esta película vemos que se sigue el eje de otras de Marvel como Iron Man o Los Vengadores: efectos especiales, acción, y humor a partes iguales.
Te plantean un argumento clásico y muy sencillo para que solo te preocupes en ver a Thor y compañía dándose toñinas con los malos.
Adecuada para ver solo, con amigos, o en pareja, pasar una tarde entretenida y salir con una sensación agradable del cine. No le pidáis a esta película una reflexión filosófica o que algún personaje tenga sentimientos complejos, pues no lo encontrareis ni lo pretende el film en ningún momento.
En fin, buena película para pasar el rato, muy estereotipada y previsible en muchos tramos pero muy buena en lo que busca, entretener sin mas.
Te plantean un argumento clásico y muy sencillo para que solo te preocupes en ver a Thor y compañía dándose toñinas con los malos.
Adecuada para ver solo, con amigos, o en pareja, pasar una tarde entretenida y salir con una sensación agradable del cine. No le pidáis a esta película una reflexión filosófica o que algún personaje tenga sentimientos complejos, pues no lo encontrareis ni lo pretende el film en ningún momento.
En fin, buena película para pasar el rato, muy estereotipada y previsible en muchos tramos pero muy buena en lo que busca, entretener sin mas.
12 de diciembre de 2013
12 de diciembre de 2013
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La gente de MARVEL se está forrando de dólares con la franquicia de súper héroes que posee, y de paso, son unos cuantos. THOR, el afamado Dios escandinavo, es el que actualmente goza de las preferencias del público. Atlético, rubio, fuerte, un tanto primario, por no decir, bobalicón, ya que el que posee las dotes intelectuales es su pérfido hermano LOKI, nos pasea por escenarios surrealistas pasando de una dimensión temporal a otra como si se tratara de un acto de magia descomunal. Debo confesarles que me atrae más LOKI que THOR, y que por encima de ellos dos me quedo prendado por la belleza diabólica de una pícara e ingenua (femme fátale): Natalie Portman, una actriz que destila erotismo por todos sus poros, y que a mí, obviamente, me gusta. Dicho esto no tengo nada que agregar a una historia de fantasía y aventuras cuyo impacto es más fuerte en los niños y jóvenes que en los adultos, y que salvo la Portman, que convierte un insípido personaje en una invitación a los malos pensamientos, no hay nada que resaltar en la misma.
14 de diciembre de 2013
14 de diciembre de 2013
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La segunda entrega nos deja otra vez con el sabor agridulce de no haber conseguido lo que se esperaba de ella. El guión deja muchas cosas dichas pero pocas con sentido lògico que hagan de la historia un producto creíble desde el punto de vista imaginativo. Esta claro que a su directo la gran pantalla que le queda grande, no tanto como en el formato pequeño que concentra toda la imaginación en series de calidad. Thor 2 no convence en absoluto, su trama se vuelve repetitiva y todo lo referente a la tierra con las secuencias allì hechas son material de relleno. Los actores no se salvan tampoco ya que en particular el personaje de Portman no aporta el carisma y la intensidad que debe desmejorando toda su aportación; aparte tiene cierta tendencia hacía lo tópico y al "americanismo crónico" que provoca cierta predecibilidad en la mayor parte de las escenas. En lo referente a lo técnico aprueba para no con gran nota ya que un producto de estas dimensiones se merece algo mas de originalidad, cosa de la que escasea.
30 de diciembre de 2013
30 de diciembre de 2013
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Segunda parte de las aventuras del dios y guerrero asgardiano Thor tras sus peripecias con los Vengadores, aquí que ha aprendido más humildad y valor humano durante su corta etapa de convivencia con ellos, que ya vimos en la primera parte; y también segunda película de la Fase 2 del Universo Cinematográfico de Marvel. Esta secuela se nota más madura y entretenida visualmente hablando que la predecesora, los personajes los conocemos de sobra desde hace dos años.
Thor (Chris Hemsworth) sigue igual como humilde defensor de los Nueve Reinos pero más carismático y sin la presuntuosidad y arrogancia que abundaba en él antaño. Loki (un magnífico Tom Hiddleston que siempre lo borda) sigue dando mucha guerra por tercera vez y se dibuja cada vez más su faceta de villano; al final hay que reconocer que se le coge cariño a pesar de ser un redundante malo, pero tendrá que colaborar con su medio hermano para frenar un caos proveniente de una raza alienígena llamada Elfos Oscuros. Odín (Anthony Hopkins) tiene más protagonismo y diálogo aquí, y sabe tocar pies con tierra metafóricamente hablando; y Jane Foster (Natalie Portman) vuelve a reunirse con Thor y haciendo sus gajes de científica pero pasa a ser fundamental en la trama.
El apartado técnico está muy bien trabajado, por no decir que cuando Kenneth Branagh dirigió la primera entrega parecía una tragedia shakespeariana y ahora que la realiza un tal Alan Taylor (director de "Juego de Tronos") parece eso, una mezcla de Star Wars y la susodicha serie, que para mi gusto ha quedado bastante mejor. Aunque sea una película fantástica y aventurera, no hay que olvidarse de la tradicional dosis de acción que hacen que "Thor: el mundo oscuro" quede como una secuela efectiva pero que no llega a la altura de "Iron Man 3", ya que me pareció mejor, y aún me sigue excitando las escenas post-créditos. El único fallo que veo es que no han hecho mucha mella en el guión porque no se adapta a la perfección en el valor interpretativo del elenco, pero se puede dejar pasar porque tampoco iban a hacer una película muy voluble. Con un ritmo bien endosado y unos oportunos toques humorísticos y sarcásticos por parte de Loki y demás secundarios, la secuela del héroe asgardiano es aceptable para esta segunda ola de adaptaciones de Marvel.
Thor (Chris Hemsworth) sigue igual como humilde defensor de los Nueve Reinos pero más carismático y sin la presuntuosidad y arrogancia que abundaba en él antaño. Loki (un magnífico Tom Hiddleston que siempre lo borda) sigue dando mucha guerra por tercera vez y se dibuja cada vez más su faceta de villano; al final hay que reconocer que se le coge cariño a pesar de ser un redundante malo, pero tendrá que colaborar con su medio hermano para frenar un caos proveniente de una raza alienígena llamada Elfos Oscuros. Odín (Anthony Hopkins) tiene más protagonismo y diálogo aquí, y sabe tocar pies con tierra metafóricamente hablando; y Jane Foster (Natalie Portman) vuelve a reunirse con Thor y haciendo sus gajes de científica pero pasa a ser fundamental en la trama.
El apartado técnico está muy bien trabajado, por no decir que cuando Kenneth Branagh dirigió la primera entrega parecía una tragedia shakespeariana y ahora que la realiza un tal Alan Taylor (director de "Juego de Tronos") parece eso, una mezcla de Star Wars y la susodicha serie, que para mi gusto ha quedado bastante mejor. Aunque sea una película fantástica y aventurera, no hay que olvidarse de la tradicional dosis de acción que hacen que "Thor: el mundo oscuro" quede como una secuela efectiva pero que no llega a la altura de "Iron Man 3", ya que me pareció mejor, y aún me sigue excitando las escenas post-créditos. El único fallo que veo es que no han hecho mucha mella en el guión porque no se adapta a la perfección en el valor interpretativo del elenco, pero se puede dejar pasar porque tampoco iban a hacer una película muy voluble. Con un ritmo bien endosado y unos oportunos toques humorísticos y sarcásticos por parte de Loki y demás secundarios, la secuela del héroe asgardiano es aceptable para esta segunda ola de adaptaciones de Marvel.
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