Educación siberiana
Drama
Rodada en inglés y basada en un libro de Nicolai Lilin, narra la adolescencia y formación del escritor dentro de la comunidad de los Urka, irreductibles criminales siberianos que fueron deportados a Transnitria (entre Moldavia y Ucrania) por orden de Stalin en los años 30. La historia se desarrolla poco antes de la caída de la Unión Soviética. (FILMAFFINITY)
17 de octubre de 2014
17 de octubre de 2014
9 de 12 usuarios han encontrado esta crítica útil
Decepcionante me parece que los responsables de editar películas en España, no hayan estrenado esta. Lo mismo me ocurrió en su momento con Equilibrium. Hay tantos films de 'americanadas cursis' que se olvidan del cine europeo.
La trama de esta película está bien dirigida y, sobre todo, bien interpretada. La fotografía es estupenda y la calidez de la escena, a pesar de estar centrada en la URSS antigua, es perfecta.
Yo la recomiendo, a pesar de que no esté en español.
La trama de esta película está bien dirigida y, sobre todo, bien interpretada. La fotografía es estupenda y la calidez de la escena, a pesar de estar centrada en la URSS antigua, es perfecta.
Yo la recomiendo, a pesar de que no esté en español.
31 de octubre de 2015
31 de octubre de 2015
7 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
El trailer me pareció lo suficientemente sugerente como para perdonar que fuera una película italiana sobre russia y grabada en inglés. Así me dispuse a visionarla con ganas de descubrir esta especie de Once upon a time in America versión Siberia que nunca se ha estrenado en España.
Es obvio que las comparaciones son odiosas y más con la magistral obra de Leone. No voy a entrar en detalles, pero a veces simplemente parece que las situaciones se suceden de forma arbitraria, sin demasiado sentido una detrás de otra. No se acaban de comprender las motivaciones de los protagonistas ni como han llegado hasta donde están, especialmente de cara al final de la cinta. John Malkovich está sobresaliente como de costumbre y los dos jóvenes protagonistas resultan también creíbles, lo que unido a una decente ambientación me convenció para quedarme hasta el final.
En resumen, es una película que se deja ver sin grandes pretensiones.
Es obvio que las comparaciones son odiosas y más con la magistral obra de Leone. No voy a entrar en detalles, pero a veces simplemente parece que las situaciones se suceden de forma arbitraria, sin demasiado sentido una detrás de otra. No se acaban de comprender las motivaciones de los protagonistas ni como han llegado hasta donde están, especialmente de cara al final de la cinta. John Malkovich está sobresaliente como de costumbre y los dos jóvenes protagonistas resultan también creíbles, lo que unido a una decente ambientación me convenció para quedarme hasta el final.
En resumen, es una película que se deja ver sin grandes pretensiones.
30 de enero de 2016
30 de enero de 2016
5 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
Educación Siberiana es una peli italiana ambientada en Siberia y rodada en inglés, con actores de Hollywood y Lituania, menuda mezcla. Trata sobre la juventud de un grupo de chavales cuyas familias han sido desterradas a Siberia por ser ladrones, asesinos y gente de mal vivir. Así que sobreviven haciendo lo que saben, robar, matar y malviviendo. Actores jóvenes que solventan bien los papeles y un John Malkovich que pasaba por allí para dar un poco de nombre a la cinta y termina ganando para sí las escenas ya que está francamente bien. En general me ha gustado, adolece de altibajos en el ritmo. Comienza muy bien, te gana con el ingenio que tienen para hacer el mal, con los valores de unos honrados ladrones, pero se pierde al final en un duelo con escaso ritmo y falta de malas artes, que era lo que más nos estaba gustando. De todas formas, se deja ver bastante bien. La fotografía es bastante destacable, la nieve y el frío siempre queda muy bien en cámara. Pero le falta fuerza y la mala follá y el costumbrismo que se respiraba en Gomorra.
20 de octubre de 2014
20 de octubre de 2014
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Por fin algo de mafia rusa,el libro no lo leí quizá la adaptación no sea la correcta,pero el ritmo y estructuración de la película me parece muy bueno, una narración con un narrador excepcionales ,buenas transiciones temporales, fotografía muy idónea para la época ensalzada por la BSO, guión e interpretación quizás lo mas flojo,pero en lineas generales buena película y muy recomendable ver para aquel que le guste el mundo de la mafia.
5 de noviembre de 2015
5 de noviembre de 2015
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una navaja en lugar de caricias, la honra en lugar de ese olvidado abrazo.
Localización rusa/ dirección italiana/inglés como idioma, peculiar triángulo para una loable, vibrante y eficiente cinta de consideración honda.
Una región, dividida por territorios dominados por diferentes clanes, cada uno con sus normas y costumbres, modo de proceder y actuar según circunstancias y linaje; el de Kolima es el de los siberianos, cuyo patriarca, su abuelo, le enseñará todo lo que debe saber sobre el honor y respeto por su pueblo, el amor a una sangre y el incondicional deber hacia los suyos, lecciones duras, firmes y categóricas para un niño que ve reflejado en su maestro el aspirante símbolo en quien convertirse.
Educación teórica de palabra recta e incuestionable, sabiduría de quien posee el mandato y las intransigentes reglas/ educación práctica que convierte al muchacho en hombre, experiencia de quien encara su día a jornada con la aptitud de aprender a ser un líder y la fortaleza de resistir las duras pruebas que el destino ose poner delante; no drogas, no alcohol, sin lágrimas en el rostro de quien debe velar y defender a la familia, nunca dinero sucio en el hogar, se roba a quien tiene sin merecerlo, se mata a quien atenta contra los nuestros, se cuida de los desvalidos , no se juntan con la inmundicia, son la estirpe de Los Siberianos, sus cuerpos tatuados cuentan su historia, ese altivo camino de resistencia y coraje por no perder y transmitir a la siguiente generación la valentía y orgullo de ser uno de los nuestros.
Exquisita fotografía, del frío y amenazante sudoeste ex-soviético, y una potente música, de tierra tan hostil y helada, se unen en este ambicioso y vigoroso relato, de interpretación enérgica y inmensa áurea respirada con devoción interrogativa, a quien acompaña un constante sentimiento cohibido, pero de mirada penetrante, que amenaza sin necesidad de palabras y cuya presente y cotidiana violencia es equipaje de mano para utilizar en todo momento como muestra de poder y autoridad nunca puesto en duda, dictatorial mandato que se aprende en la niñez y debe ser absorbido y focalizado según se crece y se demuestra la valía y lugar de cada cual.
La hermosura del lugar e inocencia sensible que va pareja a todo crío coexisten con la vileza, rivalidad y dureza de los primeros enfrentamientos y sólidas decisiones, marcar rumbo de carácter, claridad de personalidad y bravura de espíritu con tenacidad, convicción y entereza.
John Malkovich, atractivo comercial para una película inquisitiva, imponente y glorificado en esta libre adaptación del libro de Nicolai Lillin, donde Grabriele Salvatores opta por desmarcarse de la feroz estructura piramidal de sangre, muerte y venganza y centrarse en la relación de admiración del nieto, en el compañerismo del amigo y en el imposible amor que surge sin quererlo, y como tanta presión, carga y herencia recibida, sin ser preguntado previamente, deviene en esa imperiosa necesidad de correr, huir y comenzar a caminar solo, pasos elegidos por andadura propia que nadie juzga, dirige ni somete por más.
El guión juega con saltos temporales, de incomprensible presente a añorado pasado, para proceder a la configuración lineal de todos los acontecimientos que llevan al infierno actual donde la mancillada traición de un ser querido obliga a llevar a cabo lo que no se desea, pero se debe hacer; es contundente sin olvidar su calidez, intensa en su humanidad, inmune en su ejecución, soberbia sin pestañear, sensible en su roce corporal sin vocablos que liberen su emoción contenida, donde se cumple que “un hombre no puede poseer más de lo que su corazón puede amar”, sólo que, sin atreverse a tomar lo que más quería, todo le fue arrebatado.
A pesar de tratarse de historia verídica de la mafia rusa y la despiadada barbarie y atropello que de ello se deduce, estamos ante una narración de sentimientos agredidos, de confianza pérdida y lealtad rota y cómo encarar y reaccionar ante tal decepción; sublime simpleza y honestidad para observar un relato cuya abducción es franca y segura.
Si has leído la obra, su desvío de la misma puede restarle puntos a tu contento ánimo, los vírgenes de conocimiento saldrán gratos, sin que su interés decaiga.
“Quiero volver a casa. Sólo hay una manera”, la de Los Siberianos.
Lo mejor, su fortaleza visual y carácter expositivo.
Lo peor, su desmarque de la versión escrita para quien sepa de ella.
Nota 6,5
Localización rusa/ dirección italiana/inglés como idioma, peculiar triángulo para una loable, vibrante y eficiente cinta de consideración honda.
Una región, dividida por territorios dominados por diferentes clanes, cada uno con sus normas y costumbres, modo de proceder y actuar según circunstancias y linaje; el de Kolima es el de los siberianos, cuyo patriarca, su abuelo, le enseñará todo lo que debe saber sobre el honor y respeto por su pueblo, el amor a una sangre y el incondicional deber hacia los suyos, lecciones duras, firmes y categóricas para un niño que ve reflejado en su maestro el aspirante símbolo en quien convertirse.
Educación teórica de palabra recta e incuestionable, sabiduría de quien posee el mandato y las intransigentes reglas/ educación práctica que convierte al muchacho en hombre, experiencia de quien encara su día a jornada con la aptitud de aprender a ser un líder y la fortaleza de resistir las duras pruebas que el destino ose poner delante; no drogas, no alcohol, sin lágrimas en el rostro de quien debe velar y defender a la familia, nunca dinero sucio en el hogar, se roba a quien tiene sin merecerlo, se mata a quien atenta contra los nuestros, se cuida de los desvalidos , no se juntan con la inmundicia, son la estirpe de Los Siberianos, sus cuerpos tatuados cuentan su historia, ese altivo camino de resistencia y coraje por no perder y transmitir a la siguiente generación la valentía y orgullo de ser uno de los nuestros.
Exquisita fotografía, del frío y amenazante sudoeste ex-soviético, y una potente música, de tierra tan hostil y helada, se unen en este ambicioso y vigoroso relato, de interpretación enérgica y inmensa áurea respirada con devoción interrogativa, a quien acompaña un constante sentimiento cohibido, pero de mirada penetrante, que amenaza sin necesidad de palabras y cuya presente y cotidiana violencia es equipaje de mano para utilizar en todo momento como muestra de poder y autoridad nunca puesto en duda, dictatorial mandato que se aprende en la niñez y debe ser absorbido y focalizado según se crece y se demuestra la valía y lugar de cada cual.
La hermosura del lugar e inocencia sensible que va pareja a todo crío coexisten con la vileza, rivalidad y dureza de los primeros enfrentamientos y sólidas decisiones, marcar rumbo de carácter, claridad de personalidad y bravura de espíritu con tenacidad, convicción y entereza.
John Malkovich, atractivo comercial para una película inquisitiva, imponente y glorificado en esta libre adaptación del libro de Nicolai Lillin, donde Grabriele Salvatores opta por desmarcarse de la feroz estructura piramidal de sangre, muerte y venganza y centrarse en la relación de admiración del nieto, en el compañerismo del amigo y en el imposible amor que surge sin quererlo, y como tanta presión, carga y herencia recibida, sin ser preguntado previamente, deviene en esa imperiosa necesidad de correr, huir y comenzar a caminar solo, pasos elegidos por andadura propia que nadie juzga, dirige ni somete por más.
El guión juega con saltos temporales, de incomprensible presente a añorado pasado, para proceder a la configuración lineal de todos los acontecimientos que llevan al infierno actual donde la mancillada traición de un ser querido obliga a llevar a cabo lo que no se desea, pero se debe hacer; es contundente sin olvidar su calidez, intensa en su humanidad, inmune en su ejecución, soberbia sin pestañear, sensible en su roce corporal sin vocablos que liberen su emoción contenida, donde se cumple que “un hombre no puede poseer más de lo que su corazón puede amar”, sólo que, sin atreverse a tomar lo que más quería, todo le fue arrebatado.
A pesar de tratarse de historia verídica de la mafia rusa y la despiadada barbarie y atropello que de ello se deduce, estamos ante una narración de sentimientos agredidos, de confianza pérdida y lealtad rota y cómo encarar y reaccionar ante tal decepción; sublime simpleza y honestidad para observar un relato cuya abducción es franca y segura.
Si has leído la obra, su desvío de la misma puede restarle puntos a tu contento ánimo, los vírgenes de conocimiento saldrán gratos, sin que su interés decaiga.
“Quiero volver a casa. Sólo hay una manera”, la de Los Siberianos.
Lo mejor, su fortaleza visual y carácter expositivo.
Lo peor, su desmarque de la versión escrita para quien sepa de ella.
Nota 6,5
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here