The Square
6.4
12,715
Comedia. Drama
Christian, mánager de un museo de arte contemporáneo, se encarga de una exhibición titulada "The Square" en la que hay una instalación que fomenta valores humanos y altruistas. Un día le roban el móvil y la cartera en plena calle, incidente que causará más consecuencias de las esperadas.
28 de noviembre de 2017
28 de noviembre de 2017
20 de 22 usuarios han encontrado esta crítica útil
“The Square” se hace eco de la crítica y surrealismo que contenía “La gran belleza” de Sorrentino para centrarse en el mundo del arte contemporáneo y en la sociedad sueca actual. Nadie se salva de la quema: los medios de comunicación, las agencias de publicidad, las clases sociales más enriquecidas, los absurdos del arte… Todo se mira desde un prisma ácido y se plasma en unos planos con gran poder visual. Su único pecado es alargarse en exceso y que contenga un ritmo desigual en su metraje, pero es una película que no deja a nadie indiferente y que tiene múltiples lecturas. De las mejores películas de 2017 y generadora de debates. No hay que perdérsela.
Más críticas de cine y series (y algún que otro monigote): https://unhombresinpiedad.com
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7 de enero de 2018
7 de enero de 2018
17 de 19 usuarios han encontrado esta crítica útil
The square
El andamiaje en el que se sustenta el discurso intelectual sobre el arte moderno se tambalea. El propio lenguaje, en demasiadas ocasiones, se traiciona o presenta preocupantes fisuras. Los exquisitos críticos o especialistas de tan espinosa cuestión se enredan -o se ocultan- tras una jerga poco legible, cuando no incomprensible, incluso para ellos mismos. Y algunos museos, por desgracia, se han convertido en mastodónticos contenedores sin contenido, más preocupados por el aspecto de la fachada que por la excelencia de su interior, más por la arquitectura y la firma de autor que por su verdadera razón de ser, más como imán y atracción turística que como templo de conservación y exposición de sus obras.
Estas y otras cuestiones se dirimen en "The square", una película del director sueco -también responsable del guion- Ruben Östlund que mezcla con humor y ácida ironía el conflicto existente en una sociedad totalmente fracturada. Por un lado, una sofisticada elite intelectual que, como "sumos sacerdotes", dictan controvertidos juicios sobre la concepción e interpretación del arte; por otro, una aburguesada y aburrida clase media que sigue sus consignas como un rebaño descabezado de todo poder analítico; y finalmente, los dammificados del sistema, parias expulsados del paraíso, emigrantes marginados, más preocupados por su propia sobrevivencia que por las elevadas y doctas consideraciones de sus satisfechos vecinos que miran sin pudor hacia otro lado.
Con estos mimbres, Östlund construye una cruel metáfora, irreverente, gamberra e hilarante, cuya finalidad no es otra que la de incomodarnos y a fe mía que lo consigue. Es cierto que Östlund se extiende innecesariamente en alguna de las diferentes historias que -como matrioskas- contiene en el guion y que, de no haberse recreado excesivamente, hubiera corregido sin mayores dificultades en el montaje. A pesar de ello, disfruté mucho con esta inteligente fábula que, entre otras cosas, tiene la virtud de ridiculizarnos sin piedad y mostrarnos la cara más esperpéntica y desagradable de un modelo de sociedad a la que nos ha dado por llamar "occidental". Y ese espejo no siempre es del gusto de un público cómodamente instalado que evita ver la pus que ha invadido su propia herida.
Y como contrapunto, Östlund utiliza con acierto los delicados acordes del "Ave María" de Gounod, que repiquetea insistente a lo largo de la cinta como para suavizar, en parte, la salvaje y a la vez desenfadada ferocidad de su parodia.
Emilio Castelló Barreneche
El andamiaje en el que se sustenta el discurso intelectual sobre el arte moderno se tambalea. El propio lenguaje, en demasiadas ocasiones, se traiciona o presenta preocupantes fisuras. Los exquisitos críticos o especialistas de tan espinosa cuestión se enredan -o se ocultan- tras una jerga poco legible, cuando no incomprensible, incluso para ellos mismos. Y algunos museos, por desgracia, se han convertido en mastodónticos contenedores sin contenido, más preocupados por el aspecto de la fachada que por la excelencia de su interior, más por la arquitectura y la firma de autor que por su verdadera razón de ser, más como imán y atracción turística que como templo de conservación y exposición de sus obras.
Estas y otras cuestiones se dirimen en "The square", una película del director sueco -también responsable del guion- Ruben Östlund que mezcla con humor y ácida ironía el conflicto existente en una sociedad totalmente fracturada. Por un lado, una sofisticada elite intelectual que, como "sumos sacerdotes", dictan controvertidos juicios sobre la concepción e interpretación del arte; por otro, una aburguesada y aburrida clase media que sigue sus consignas como un rebaño descabezado de todo poder analítico; y finalmente, los dammificados del sistema, parias expulsados del paraíso, emigrantes marginados, más preocupados por su propia sobrevivencia que por las elevadas y doctas consideraciones de sus satisfechos vecinos que miran sin pudor hacia otro lado.
Con estos mimbres, Östlund construye una cruel metáfora, irreverente, gamberra e hilarante, cuya finalidad no es otra que la de incomodarnos y a fe mía que lo consigue. Es cierto que Östlund se extiende innecesariamente en alguna de las diferentes historias que -como matrioskas- contiene en el guion y que, de no haberse recreado excesivamente, hubiera corregido sin mayores dificultades en el montaje. A pesar de ello, disfruté mucho con esta inteligente fábula que, entre otras cosas, tiene la virtud de ridiculizarnos sin piedad y mostrarnos la cara más esperpéntica y desagradable de un modelo de sociedad a la que nos ha dado por llamar "occidental". Y ese espejo no siempre es del gusto de un público cómodamente instalado que evita ver la pus que ha invadido su propia herida.
Y como contrapunto, Östlund utiliza con acierto los delicados acordes del "Ave María" de Gounod, que repiquetea insistente a lo largo de la cinta como para suavizar, en parte, la salvaje y a la vez desenfadada ferocidad de su parodia.
Emilio Castelló Barreneche
24 de enero de 2018
24 de enero de 2018
39 de 64 usuarios han encontrado esta crítica útil
Como varios camaradas, vi la película esperanzado de encontrar un excelente film, pero desgraciadamente, no lo fue.
Me he sorprendido, al igual que mucha gente, de que haya ganado la Palma de Oro: no lo veo posible. O el jurado no vio la película, o hay trampa, porque es imposible que un borrador de la sala de montaje haya ganado un premio de semejante envergadura.
Coincido con la mayoría de los críticos de revistas de cine y diarios (lo cual es raro), y por primera vez, estoy en total desacuerdo con la gente del festival.
¿Tanto ha cambiado Cannes?
¿Es que ahora le dan el premio a cualquier película?
Leo usuarios que la comparan con "La Dolce Vita"... ¿es en serio la comparación?
Me parece que muchos que han votado, tienen cero cine encima. De entrada, en el mismo país (Suecia), y mismo género (drama, comedia, humor negro, simbolismos, filosofía, arte, etc) tenemos las películas de Roy Andersson, cualquiera de ellas es ampliamente superior a "The Square", y no por eso hay que darle la Palma de Oro a Roy, no confundir.
"The Square" es un borrador con ciertas escenas interesantes, y nada más. No hay historia, y solo seguimos al protagonista, viendo que es lo que le sucede a continuación (con quien habla, con quien se encuentra, etc). A su vez, estamos todo el rato esperando por la famosa escena del trailer (y tapa DVD), y cuando por fin llega... *Spoiler*.
Película totalmente prescindible, e indiferente.
PD: quiero aclarar que coincido completamente con la mirada que posee el director sobre los personajes de este film, y yo también me reiría de ellos, pero evidentemente no gracias a ésta película...
Me he sorprendido, al igual que mucha gente, de que haya ganado la Palma de Oro: no lo veo posible. O el jurado no vio la película, o hay trampa, porque es imposible que un borrador de la sala de montaje haya ganado un premio de semejante envergadura.
Coincido con la mayoría de los críticos de revistas de cine y diarios (lo cual es raro), y por primera vez, estoy en total desacuerdo con la gente del festival.
¿Tanto ha cambiado Cannes?
¿Es que ahora le dan el premio a cualquier película?
Leo usuarios que la comparan con "La Dolce Vita"... ¿es en serio la comparación?
Me parece que muchos que han votado, tienen cero cine encima. De entrada, en el mismo país (Suecia), y mismo género (drama, comedia, humor negro, simbolismos, filosofía, arte, etc) tenemos las películas de Roy Andersson, cualquiera de ellas es ampliamente superior a "The Square", y no por eso hay que darle la Palma de Oro a Roy, no confundir.
"The Square" es un borrador con ciertas escenas interesantes, y nada más. No hay historia, y solo seguimos al protagonista, viendo que es lo que le sucede a continuación (con quien habla, con quien se encuentra, etc). A su vez, estamos todo el rato esperando por la famosa escena del trailer (y tapa DVD), y cuando por fin llega... *Spoiler*.
Película totalmente prescindible, e indiferente.
PD: quiero aclarar que coincido completamente con la mirada que posee el director sobre los personajes de este film, y yo también me reiría de ellos, pero evidentemente no gracias a ésta película...
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
*La famosa escena en cuestión, con el "hombre-mono", es una escena suelta, y nada más. Tampoco pasa nada importante en ella, salvo por el final, donde la gente se enoja con el "artista" y lo muelen a palos, pero la escena no es graciosa, ni tampoco fuerte, peor, es indiferente en un 100%, me esperaba otra cosa, algo más enérgico, zarpado.
6 de febrero de 2018
6 de febrero de 2018
14 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
Extraña, muy curiosa, fascinante a ratos, e irregular, amén de muy larga en metraje, esta película no deja indiferente a nadie... aunque eso no quiere decir que convenza del todo.
Creo que es una buena película, sobre todo porque va claramente de menos a más, ofreciendo un universo donde se ríe el realizador y guionista a la vez, de diversos estamentos, sustratos sociales y culturales, ensimismados en un arte vacío de contenido, aunque se le quiera otorgar de modernidad y sobre todo de polémica. Que se hable de ello... aunque sea mal, parece ser su proclama.
Con un humor un tanto surrealista, contiene tres escenas magníficas, la del niño que se queja al ayudante del protagonista de la nota que ha recibido en su buzón, el descacharrante diálogo entre el protagonista y su amante y, por supuesto, el largo momento de la cena de alto copete con "el animal" dando un espectáculo que comienza con risas y sonrisas y acaba como acaba.
Irregular en su desarrollo, es verdad que cuesta al comienzo entrar en materia, aunque poquito a poco va calando tanto la personalidad del protagonista como el argumento y el mensaje que se transmite.
Al final, a mi parecer convence mayormente en su propuesta y no decepciona. Aunque hay que tener paciencia en su primer tercio.
La favorita para ganar el Óscar a la Mejor Película de habla no inglesa.
https://filmsencajatonta.blogspot.com.es
Creo que es una buena película, sobre todo porque va claramente de menos a más, ofreciendo un universo donde se ríe el realizador y guionista a la vez, de diversos estamentos, sustratos sociales y culturales, ensimismados en un arte vacío de contenido, aunque se le quiera otorgar de modernidad y sobre todo de polémica. Que se hable de ello... aunque sea mal, parece ser su proclama.
Con un humor un tanto surrealista, contiene tres escenas magníficas, la del niño que se queja al ayudante del protagonista de la nota que ha recibido en su buzón, el descacharrante diálogo entre el protagonista y su amante y, por supuesto, el largo momento de la cena de alto copete con "el animal" dando un espectáculo que comienza con risas y sonrisas y acaba como acaba.
Irregular en su desarrollo, es verdad que cuesta al comienzo entrar en materia, aunque poquito a poco va calando tanto la personalidad del protagonista como el argumento y el mensaje que se transmite.
Al final, a mi parecer convence mayormente en su propuesta y no decepciona. Aunque hay que tener paciencia en su primer tercio.
La favorita para ganar el Óscar a la Mejor Película de habla no inglesa.
https://filmsencajatonta.blogspot.com.es
31 de enero de 2018
31 de enero de 2018
27 de 46 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me ha pasado pocas veces con el cine que quiera acabar una película sin ver su final. Pero viendo esta cinta lo único que podía pensar durante cada segundo es que acabara ya. No puedo entender que le pasa al jurado de Cannes para premiar esta basura pseudo intelectualoide que solo llegara a gafas de pasta que creen ser entendidos del arte contemporáneo y de las miserias humanas.
El problema con ''The square'' es que no tiene una estructura narrativa a la que poder seguir, va saltando de un escenario a otro, de una idea a otra, de una sátira y bufa a otra. Y así hasta el final... Quiere ser ácida, cínica y rompedora. Pretende señalarnos a todos con el dedo y hacer que nos planteemos las sociedades del bienestar en las que vivimos pero es imposible empatizar con ninguno de sus personajes. Pijos pedantes y absurdos que parecen vivir en un plano paralelo al del resto del mundo.
Ruben Östlund pretende no solo hacer una critica de lo políticamente correcto y de las propias bajezas que cada ser humano esconde. Con el pretexto del arte contemporáneo intenta decirnos que hoy en día ni siquiera el arte sirve para representar algo. Y es que una de las peores premisas del arte contemporáneo no es su capacidad para impactar sobre el espectador o mandar un mensaje. Es que cualquier imbécil puede vendernos una basura de obra como una joya de inigualable prestigio y encima un publico inmenso va y se lo traga.
Así de estúpidos somos pero no necesitamos que nos lo digan con dos horas y media soporíferas de repetición y ideas que no conducen a ningún sitio.
Porque esta película al final acaba cayendo en el mismo error que critica. Y se convierte en un montón de buenos propósitos que podrían haber sido interesantes pero que han sido tirados a la basura y se han convertido en algo que busca única y exclusivamente impactar en el espectador sin transmitir mensaje alguno.
Son demasiados conceptos, demasiados caminos y al final nos hace perder perder la pista del porque habíamos empezado a visualizarla.
Y la famosa escena del hombre simio se convierte en esa estrategia absurda del impacto de los dos segundos con el que muchos creerán que ha merecido la pena visualizar dos horas y media de sufrimiento continuo.
Pero no, a mi no me vale. Ademas creo sinceramente que no es para tanto. He visto performances mucho mejores y mas logradas.
Por cierto; quiero decir que la escena del preservativo me ha parecido tan humillante que solo por eso me he planteado cerrar la película y no llegar al final.
OJALA. Porque semejante mierda de película no se olvida ni acudiendo al mejor psiquiatra.
Por cierto; comparar ESTO con la dolce vita debería estar penado con cadena perpetua.
Veamos un poco mas de cine, gracias.
El problema con ''The square'' es que no tiene una estructura narrativa a la que poder seguir, va saltando de un escenario a otro, de una idea a otra, de una sátira y bufa a otra. Y así hasta el final... Quiere ser ácida, cínica y rompedora. Pretende señalarnos a todos con el dedo y hacer que nos planteemos las sociedades del bienestar en las que vivimos pero es imposible empatizar con ninguno de sus personajes. Pijos pedantes y absurdos que parecen vivir en un plano paralelo al del resto del mundo.
Ruben Östlund pretende no solo hacer una critica de lo políticamente correcto y de las propias bajezas que cada ser humano esconde. Con el pretexto del arte contemporáneo intenta decirnos que hoy en día ni siquiera el arte sirve para representar algo. Y es que una de las peores premisas del arte contemporáneo no es su capacidad para impactar sobre el espectador o mandar un mensaje. Es que cualquier imbécil puede vendernos una basura de obra como una joya de inigualable prestigio y encima un publico inmenso va y se lo traga.
Así de estúpidos somos pero no necesitamos que nos lo digan con dos horas y media soporíferas de repetición y ideas que no conducen a ningún sitio.
Porque esta película al final acaba cayendo en el mismo error que critica. Y se convierte en un montón de buenos propósitos que podrían haber sido interesantes pero que han sido tirados a la basura y se han convertido en algo que busca única y exclusivamente impactar en el espectador sin transmitir mensaje alguno.
Son demasiados conceptos, demasiados caminos y al final nos hace perder perder la pista del porque habíamos empezado a visualizarla.
Y la famosa escena del hombre simio se convierte en esa estrategia absurda del impacto de los dos segundos con el que muchos creerán que ha merecido la pena visualizar dos horas y media de sufrimiento continuo.
Pero no, a mi no me vale. Ademas creo sinceramente que no es para tanto. He visto performances mucho mejores y mas logradas.
Por cierto; quiero decir que la escena del preservativo me ha parecido tan humillante que solo por eso me he planteado cerrar la película y no llegar al final.
OJALA. Porque semejante mierda de película no se olvida ni acudiendo al mejor psiquiatra.
Por cierto; comparar ESTO con la dolce vita debería estar penado con cadena perpetua.
Veamos un poco mas de cine, gracias.
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