Braveheart
8.0
155,822
Aventuras. Drama
En el siglo XIV, los escoceses viven oprimidos por los gravosos tributos y las injustas leyes impuestas por los ingleses. William Wallace es un joven escocés que regresa a su tierra despues de muchos años de ausencia. Siendo un niño, toda su familia fue asesinada por los ingleses, razón por la cual se fue a vivir lejos con un tío suyo.
21 de septiembre de 2010
21 de septiembre de 2010
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mel Gibson, ojos azules, y “Corazón valiente” se ha convertido en un homenaje a los héroes inmortales del cine épico. Seres inmortales que parecen prevalecen aún después de la muerte. Guerreros ancestrales que luchan por un ideal, por una causa, más allá de las fronteras de este mundo.
Y como no recordar a Espartaco, a Judáh Ben-Hur, a Ojo de Halcón, al Capitán Algren, a Lawrence de Arabia, al rey Leónidas, al gran Aquiles y a tantos otros gladiadores legendarios que vimos en la pantalla en grandes batallas en las que su axioma era simplemente: “Gana o pierde, nunca mueres”
Mel Gibson se lleva todas las canicas en esta película y su recuerdo en las tierras de Escocia es inmortal, aunque nunca se le viera igual de esplendoroso ni si quiera cuando lo vimos como guerrero del asfalto pasando por policía con arma letal, luego siendo patriota y aún hasta héroe de guerra. Y Mel recordará cuando fue uno los héroes inmortales del cine épico.
Y como no recordar a Espartaco, a Judáh Ben-Hur, a Ojo de Halcón, al Capitán Algren, a Lawrence de Arabia, al rey Leónidas, al gran Aquiles y a tantos otros gladiadores legendarios que vimos en la pantalla en grandes batallas en las que su axioma era simplemente: “Gana o pierde, nunca mueres”
Mel Gibson se lleva todas las canicas en esta película y su recuerdo en las tierras de Escocia es inmortal, aunque nunca se le viera igual de esplendoroso ni si quiera cuando lo vimos como guerrero del asfalto pasando por policía con arma letal, luego siendo patriota y aún hasta héroe de guerra. Y Mel recordará cuando fue uno los héroes inmortales del cine épico.
16 de noviembre de 2012
16 de noviembre de 2012
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mel Gibson demostró su pericia como director, después de debutar un par de años antes con la intimista El hombre sin rostro, con este recordado film épico de tres horas de duración que no decae en ningún momento. El guión cuenta una historia sencilla ensalzando las virtudes de un héroe escocés llamado William Wallace que luchó contra el déspota rey inglés Eduardo I en las guerras de independencia de Escocia.
Históricamente resulta discutible con un guión no muy riguroso pero las espectaculares y sangrientas secuencias de batallas y el conseguido tono épico compensa sus imperfecciones. Gibson se entrega en cuerpo y alma en la labor conjunta de actor-director-productor y su actuación es muy convincente.
Gracias a su holgado presupuesto el film está muy bien hecho desde el punto de vista técnico y posee una potente banda sonora de un inspirado James Horner. Se llevó cinco Oscars y el aplauso del público que vibró con una película emocionante y vistosa.
Aquel mismo año se rodó una obra de temática parecida titulada Rob Roy, la pasión de un rebelde protagonizada por Liam Neeson, Jessica Lange, Tim Roth, John Hurt y un Brian Cox que hace de doblete. Sin desmerecerla, finalmente Braveheart se llevó todos los honores aquel año.
Braveheart me recuerda mucho a Gladiator, pertenece a esa clase de películas con argumentos asequibles y elementales pero filmados con toda la pompa y espectacularidad de Hollywood tan a gusto de la audiencia.
Históricamente resulta discutible con un guión no muy riguroso pero las espectaculares y sangrientas secuencias de batallas y el conseguido tono épico compensa sus imperfecciones. Gibson se entrega en cuerpo y alma en la labor conjunta de actor-director-productor y su actuación es muy convincente.
Gracias a su holgado presupuesto el film está muy bien hecho desde el punto de vista técnico y posee una potente banda sonora de un inspirado James Horner. Se llevó cinco Oscars y el aplauso del público que vibró con una película emocionante y vistosa.
Aquel mismo año se rodó una obra de temática parecida titulada Rob Roy, la pasión de un rebelde protagonizada por Liam Neeson, Jessica Lange, Tim Roth, John Hurt y un Brian Cox que hace de doblete. Sin desmerecerla, finalmente Braveheart se llevó todos los honores aquel año.
Braveheart me recuerda mucho a Gladiator, pertenece a esa clase de películas con argumentos asequibles y elementales pero filmados con toda la pompa y espectacularidad de Hollywood tan a gusto de la audiencia.
1 de diciembre de 2015
1 de diciembre de 2015
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si. Es mi debilidad. No le encuentro ningun pero a esta pelicula. Fotografia, direccion, actores, bso..... todo es perfecto. Me encanta. El unico pero seria que en los oscars de ese año solo ganara 5. La parte final, con la banda sonora de James Horner, y ese picado con el pañuelo cayendo me pone los pelos de punta. Al igual que la escena del entierro que sucede al principio de la pelicula. Pelicula perfecta.
11 de junio de 2018
11 de junio de 2018
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
William Wallace fue un Libertador escocés que vivió en el siglo XIII y XIV, en esta pelicula se narra (cinematográficamente), no con un 100% de veracidad, las hazañas realizadas por este luchador que encabezó fisica y después de póstumo moralmente, una rebelión contra la monarquía inglesa y la posterior independencia de Escocia, quedando como un símbolo del coraje y la libertad, y siendo homenajeado y venerado en su país natal.
Sabiendo esto la pregunta es ¿De que manera se nos muestra esto?, de la mejor manera posible, causando emoción, irá, suspenso, alegría, ternura y sobretodo, un sentimiento de libertad transmitido por William Wallace. El montaje se logra a la perfección haciéndonos creer que estamos en la edad media y dándonos unas batallas épicas e inolvidables, la historia de amor de William que derivó en una rebelión acompañada de esa banda sonora que nos obliga a creer que es una auténtica leyenda, la fotografía espectacular, acercándose vagamente a lo que fue Barry Lyndon (lo mejor en fotografía que hay) y sobre todo la historia y como es narrada por Mel Gibson que lo hace digno de todo elogió, ponen a esta pelicula en el podio mental del buen cine.
Una obra maestra en todo el sentido de la palabra.
Sabiendo esto la pregunta es ¿De que manera se nos muestra esto?, de la mejor manera posible, causando emoción, irá, suspenso, alegría, ternura y sobretodo, un sentimiento de libertad transmitido por William Wallace. El montaje se logra a la perfección haciéndonos creer que estamos en la edad media y dándonos unas batallas épicas e inolvidables, la historia de amor de William que derivó en una rebelión acompañada de esa banda sonora que nos obliga a creer que es una auténtica leyenda, la fotografía espectacular, acercándose vagamente a lo que fue Barry Lyndon (lo mejor en fotografía que hay) y sobre todo la historia y como es narrada por Mel Gibson que lo hace digno de todo elogió, ponen a esta pelicula en el podio mental del buen cine.
Una obra maestra en todo el sentido de la palabra.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Destacar los momentos de humor presentes en todo el relato frutos de un guión espectacular para nada normal que la hace ser lo que es, las actuaciones son buenísimas, Mel Gibson es Mel Gibson y no se le puede pedir más, pero logra ser William Wallace a la perfección. Ese discurso previo a la batalla nunca se olvidará, ni el grito al final de la película cuando atado a la Cruz hace valer a lucha y grita ¡¡Fredoom!! Que me causo escalofrios.
7 de abril de 2008
7 de abril de 2008
56 de 109 usuarios han encontrado esta crítica útil
Esta película apesta. Yo la vi en el cine, que es la única forma de verla sin suicidarse, básicamente porque estás rodeada de gente y no es plan y no la vería en televisión ni aunque me diesen un Black Lotus en borde negro a cambio. La pena es que tenía unas buenas expectativas porque el cine épico me encanta, en esa época no odiaba a Mel Gibson y los guerreros escoceses de antaño tienen como un aura mítica, casi legendaria, que provoca gratas cosquillitas en mi imaginación y en la de la valquiria hambrienta de batalla que llevo dentro.
Lo que ocurre es que tengo tolerancia cero a las gilipolleces, a las frases grandilocuentes diseñadas para empalmar al personal, a las doncellas medievales perfectamente depiladas y maquilladas, a los diálogos de besugo que sirven para rellenar los espacios entre las frases grandilocuentes y a la falsa y maniquea heroización del bando que más le pete al director en el momento. Y curiosamente, "Braveheart" rebosa de todo este tipo de tonterías.
Habrá a quien le parezca entretenida y espectacular y eso le parezca bastante como para elevarla al superpoblado altar de supuestas obras maestras del cine. Pero si buscáis algo más, algo así como credibilidad, historia, estudio de los personajes, en suma, complejidad de algún tipo, más vale que vayáis a mirar a otro lado, porque aquí, de eso, nada de nada.
Lo que ocurre es que tengo tolerancia cero a las gilipolleces, a las frases grandilocuentes diseñadas para empalmar al personal, a las doncellas medievales perfectamente depiladas y maquilladas, a los diálogos de besugo que sirven para rellenar los espacios entre las frases grandilocuentes y a la falsa y maniquea heroización del bando que más le pete al director en el momento. Y curiosamente, "Braveheart" rebosa de todo este tipo de tonterías.
Habrá a quien le parezca entretenida y espectacular y eso le parezca bastante como para elevarla al superpoblado altar de supuestas obras maestras del cine. Pero si buscáis algo más, algo así como credibilidad, historia, estudio de los personajes, en suma, complejidad de algún tipo, más vale que vayáis a mirar a otro lado, porque aquí, de eso, nada de nada.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here