Las paredes hablan

La idea es buena: confrontar el arte más antiguo con el contemporáneo. Arte mural en las cavernas y en las paredes de la calle. Pero el resultado es tan lamentable que escuece. Se salvan por los pelos las intervenciones de Barceló, sin que tampoco llegue a decir nada realmente interesante. Pero en general, se trata de marear la perdiz, soltar obviedades y hacernos perder el tiempo, que es lo más valioso que tenemos (ojalá con estas líneas se lo ahorre yo a alguien, como me han ahorrado a mí muchas horas de aburrimiento, estoy seguro, críticas oportunas y fiables de otros usuarios).

Se echan de menos reflexiones con contenido; profundas, teóricas, sicológicas, técnicas, lo que fuere, pero más preparadas, mejor pensadas, menos improvisadas. Los que hablan sobre lo rupestre no aciertan ni a proponer una razón plausible por la que aquella gente pintaba. Barceló dice que ahora pintamos por la misma razón, pero tampoco dice cuál es esa razón. Bueno, pues para eso, ya me pongo yo a pensar, y no necesito ningún documental (más que documental es un reportajillo).

Dirigida por el mismísimo Carlos Saura, y producida por María del Puy Alvarado (un valor en alza en el sector audiovisual español), ´Las Paredes Hablan´ es una bellísima reflexión sobre la pulsión que lleva al ser humano a crear imágenes, desde aquellas maravillosas pinturas rupestres que nuestros antepasados creaban en las cuevas europeas hasta los modernos grafitis que vemos hoy en día en cada ciudad. Una película didáctica, amena y llena de belleza. Mucho más que recomendable.

El último largometraje firmado por Carlos Saura, fallecido justo antes de recoger el Goya de Honor a su carrera, nos deja un documental aparentemente sencillo pero que denota un gran trabajo visual y está recorrido por un contenido muy hondo.

Parece que después de toda una vida detrás de la cámara, ha querido irse siendo protagonista y capitaneando un elenco de entrevistados formado por artistas e historiadores entre los que destaca el mismísimo Arsuaga. Un elenco de personajes guiados por la pregunta del millón de dólares: Qué mueve al pintor. Una pregunta que la película nos demostrará que abre otros muchos interrogantes.

Saura firma este trabajo como director y coguionista, en colaboración con el realizador de RTVE José Morillas, del que esperamos sigan saliendo trabajos de esta altura. Las ideas de Las Paredes Hablan se van desgranando sin que el espectador pueda advertir que originalmente hubiera un guión, como si estuvieran improvisadas, pero acaba profundizando en temas que son habitualmente esquematizados.

Desde el paleolítico hasta los grafitis de las ciudades, los hombres han tenido un impulso por pintar, en un acto que está fuera de toda lógica racional o intereses personales. La aparente evolución de la historia del arte se pone en tela de juicio a lo largo del metraje y de la mano de Saura, el personaje y el director, iremos encontrando las preguntas cada vez más fascinantes y los misterios que encierran cada vez más quintaesenciales.

Las Paredes Hablan es una película bella que habla de cosas importantes haciendo preguntas sencillas y observaciones sencillas. Rompe esquemas muy asentados en la concepción sobre la historia del arte y consigue compartir con el espectador un punto de vista ante aquello que nos hace humanos que lo dejará satisfecho, como poco. Enhorabuena.

*Esencia de ‘Las paredes hablan’

El gran cartel de Las paredes hablan sintetiza perfectamente el espíritu esencial de su contenido, además de invitarnos a entrar en la cueva del tiempo para asistir a la evolución de la expresividad humana desde hace cuarenta mil años. A través de entrevistas del propio Carlos Saura con artistas, arqueólogos y especialistas del Arte, entre todos recorren el largo periodo cultural desde las primeras pinturas paleolíticas encontradas hasta los graffitis contemporáneos.

El documental Las paredes hablan desarrolla el guion de Carlos Saura y José Morillas que el ágil montaje de Vanessa Marimbert hace muy ameno su seguimiento, al intercalar fragmentos de las entrevistas con acertadas imágenes ilustrativas. La banda sonora con la música elegida de Alfonso G. Aguilar ambienta discreta pero eficazmente las secuencias y planos gráficos.

Así logra resultar el conjunto una inmersión reflexiva en la esencia y claves de las pulsiones esenciales que han llevado a la especia humana a expresarse, desde la Prehistoria con el grafismo más simple y a la vez más sintético. Las imágenes cuidadosamente elegidas por la fotografía de Juana Jiménez y Rita Noriega nos muestran los dibujos y pinturas encontrados en Altamira, Lescaux, yacimientos de Atapuerca y otras cuevas de Asturias y Cantabria.

Paralelamente el acertado montaje del documental las analizan en relación con los graffitis y murales de algunos autores actuales como Cuco, Suso33, Musa71 o el siempre interesante pintor Miquel Barceló.

*40.000 años con muchos puntos en común

La comparación entre ambas expresiones gráficas con casi cuarenta mil años de diferencia ponen en común muchas similitudes, compartiendo las motivaciones esenciales de las expresiones gráficas de aquellos primeros y actuales creadores. Son muy reveladoras las conversaciones de Carlos Saura con el experto en Arte Paleolítico Pedro Saura, que es uno de los dos autores de la recreación externa de las pinturas de la Cueva de Altamira.

También lo son las importantes aportaciones de Juan Luis Arsuaga, Director Científico del Museo de la Evolución Humana y Codirector de las Excavaciones Arqueológicas de Atapuerca. A ello se añade una significativa y enriquecedora conversación con el pintor Miquel Barceló que se ha acercado con sus ilustraciones, pinturas, murales y cerámicas al arte más primitivo, creadas en los mismos territorios de origen de la Humanidad en África.

En Las paredes hablan todo éste material es analizado y comparado con las motivaciones e intenciones gráficas de actuales grafiteros urbanos, que desde su firma personal y las letras tienen mucho en común con aquellas primeras expresiones impresas en las cuevas prehistóricas. La esencia del ser humano se conserva a lo largo de su evolución durante miles de años llegando hasta nuestros días en casi cualquier lugar del planeta Tierra.

Son muy interesante varias de las secuencias de Las paredes hablan, que muestran cómo trabajan los grafiteros, ceramistas y muralistas con estilos y técnicas muy diferentes pero coincidiendo en la intencionalidad básica de identidad personal ante el mundo exterior.

*Conclusión

Las paredes hablan, es gran título que resume el espíritu del brillante documental, precisa de varias visiones para continuar profundizando con las sucesivas proyecciones, ya que hay importantes reflexiones en muchas de las frases de las conversaciones.

Tras una primera visión global, las siguientes nos permitirán seguir sacar buen provecho de lo más esencial y significativo de la evolución de la especie humana en su dimensión espiritual y expresiva.

La conciencia personal, la imaginación y fabulación, la identidad personal ante los demás seres vivos, el significado de los enterramientos y la trascendencia de los rituales mortuorios, son algunas de las principales cuestiones que se abordan.

Las paredes hablan es un sencillo pero muy interesante documental de Carlos Saura que desde la gráfica profundiza hasta la esencia de la evolución de la Humanidad.

Escrito por Fernando Gálligo Estévez

Carlos Saura nos permite con su último documental, ‘Las paredes hablan’, ver como el ser humano ha evolucionado tremendamente en muchos aspectos desde tiempos prehistóricos hasta ahora, pero a un mismo tiempo nos dice qué, a nivel de genio creador y artístico con unas motivaciones particulares e individuales, quizá no lo hemos hecho tanto en gran medida porque hay cosas que simplemente son y no necesitan cambios o mejoras.

Dirigido y protagonizado por el propio Saura, ‘Las paredes hablan’ es un personal y singular retrato sobre el origen del arte y su influencia en la actualidad. El consagrado cineasta nos muestra la evolución y relación del arte con la pared como lienzo de creación desde las primeras revoluciones gráficas en las cuevas prehistóricas hasta las expresiones más vanguardistas del arte urbano.

Es refrescante escuchar a personalidades artísticas y científicas pensar en voz alta qué piensan ellos del devenir del arte contemporáneo mientras recapacitan sobre las influencias que la vida prehistórica y su arte tiene en las corrientes creativas actuales. Lo es más escucharles hablar de la individualidad del arte y su papel social e histórico en lugares tan privilegiados como cotidianos de nuestro país.

Gracias a un guion ágil y a un montaje muy fluido, con tremendos matices didácticos como es la contraposición de imágenes, Carlos Saura y José Morillas, guionistas del proyecto y la montadora Vanessa Marimbert (ganadora del Goya a Mejor Montaje por El buen patrón) nos acercan de forma orgánica a un tema que en un primer acercamiento pudiese parecer demasiado especializado como para interesar al público general.

Pero, ¿Cómo no va a llamar enormemente nuestra atención ver imágenes de archivo de como Pedro Saura, pintor de la neocueva de Altamira que dio vida a uno de los lugares más espectaculares y místicos del planeta permitiéndonos preservar el original mientras nos imbuimos en su recreación? A un mismo tiempo es imposible no recapacitar sobre las palabras de Juan Luis Arsuaga, Director científico del Museo de Evolución Humana y Codirector de Atapuerca, quien nos hace expandir, un punto más, nuestra mente en temas evolutivos, ocurriéndonos lo mismo al sentarnos frente a frente con Miquel Barceló, uno de los iconos más reconocidos del arte contemporáneo, quien desde su experiencia artística y humana habla de como la curiosidad y la necesidad de mostrar al mundo quienes somos, no entiende de tiempo o fronteras.

Las paredes verdaderamente hablan en este documental, aunque, no todos nosotros sabemos escucharlas. Para aprender a hacerlo y ser conscientes de que hay mucho más que pintura sobre un muro, Carlos Saura se encuentra con un buen grupo de artistas a través de los cuales nos introducimos en un mundo muy personal, infinitamente cambiante y nada cercano para el ciudadano medio. Esta es la ocasión perfecta para acercarse a la obra de Zeta, artista de grafiti; Suso33, creador urbano; Cuco, muralista; y Musa71, escritora de graffiti.

El documental ha sido rodado en 14 localizaciones, entre ellas destacan el Yacimiento de Atapuerca y el Museo de la Evolución Humana en Burgos, además de las Cuevas de Puente Viesgo y Altamira en Cantabria y las calles de Barcelona y Madrid donde el graffiti es el protagonista. Con una fotografía llena de vida y color gracias a la mano de Juana Jiménez y Rita Noriega y el sonido de Inés Almirón y Raquel Forcén que nos hace sentir la paz del campo abierto y el bullicio de las ciudades por las que el director pasea, pronto nos vemos viajando sin darnos cuentas por lugares de nuestro país que nada parece tener en común, pero que gracias a este proyecto se interconectan de forma definitiva.

Para redondear el proyecto y hacerlo, aún si cabe, más dinámico y agradable tenemos una banda sonora original, así como una canción original que combinan el estilo clásico y electrónico, todo ello compuesto por Alfonso G. Aguilar, compositor de ‘Klaus‘, que nos acompaña durante todo el visionado aportando color y ritmo a las imágenes que vemos pasar ante nuestros ojos. Quédate hasta el final y déjate llevar en los créditos. La melodía y su letra es preciosa. Después de haber sido presentado en el Festival de San Sebastián y el Festival de Sevilla, además de haber sido premiada la trayectoria del director aragonés en el Festival Internacional de Cine de la India (IFFI), el documental llegará a los cines a partir del próximo 3 de febrero.

Te lo aconsejamos encarecidamente. Tu perspectiva sobre arte parietal y las actuaciones contemporáneas que rodean al mundo del grafiti cambiarán por completo tras escuchar a los agentes especializados que encuentran en el documental de Saura un lugar de proyección de sus inquietudes y líneas de pensamiento.

Para www.magazinema.es