La nave de Satán

Por lo visto se gastaron una pasta en esta película, muy en la línea de la época con inversiones que a menudo eran una verdadera exageración teniendo en cuenta el panorama. No sé si recuperaron esa inversión, me da a mí que no, pero lo que sí está claro que es que "La nave de Satán" ha quedado muy arrinconada y olvidada, ni un centenar de votos tiene en FA y los que lleguen aquí probablemente lo hacen por puro azar cinéfilo, más que dirigidos por un interés concreto.

La historia es una más mil veces vista de un don nadie que llega a la cima, entendiendo como cumbre vital el éxito empresarial y la cuenta corriente sin tener en cuenta el camino, saltándose todo código ético o moral. Sin embargo a Spencer Tracy le falta mucha mala leche, en el fondo no es más que un aprovechado con labia, no es un gran cabrón ni mucho menos, es un especulador como otros, nada exagerado.

Puede que el único interés sea la recreación de los escenarios del infierno descrito por Dante, pero apenas dura unos minutos y sabe a poco, porque realmente eso sí es un acierto de la película. La vida real es más bien regular, el personaje de Tracy se queda a medias en todo.

Obra bastante olvidada de Harry Lachman titulada en el original El infierno de Dante. La película se creó con un reparto de lujo y no escatimó en presupuesto en su época. Según se dice trabajaron 14.000 personas en el producción entre extras, técnicos y equipo. En aquel entonces seria el intento de logran una superproducción de esas que a veces nos acostumbran el cine de EUA.

La Nave de Satán nos cuenta la historia de Jim Carter (Spencer Tracy) que desde trabajar en un barco llega a crecer como feriante llegando al éxito y la riqueza. En un mundo armónico y lujoso todo vale con el fin de lograr un status y clase social que anhela.

El film llega a ser un folletín moralista de los treinta en donde la historia quiere contar muchas cosas en poco tiempo sin profundizar en nada. Como curiosidad vemos a una Rita Hayworth, aún con el nombre de Rita Cansino en un papel secundario bailando con Gary Leon.

Aunque solo sea por la recreación del Infierno de Dante, vale la pena ver esta película. Lo que cuenta y cómo lo cuenta no sorprende, pero la escenografía, y por ende, el trabajo del encargado de la cinematografía son excelentes.
Tracy y Trevor están muy bien, y además, una tal Rita Cansino sale bailando.
Resumiendo: curiosa, original y muy recomendable.

Fábula moralista de ambición, auge y caída, protagonizado por Spencer Tracy y la gran Claire Trevor, que tampoco tiene opción de lucir mucho. Tracy me encanta habitualmente, pero sigo diciendo que los papeles de cínico, malvado o duro le van mucho menos, y aquí yo creo que le pasa, compone un ambicioso un poco descafeinado, pese a que pasa por encima de ciertas cosas, más bien parece un picaruelo simpático venido un poco a más. Una superproducción de los años 30, que tira la casa por la ventana en decorados, vestuario y extras, muy al estilo de DeMille and company. Pero el tiempo no le ha sentado muy bien, se ve un poco acartonada y rancia, y simplona en sus planteamientos. Ahora se queda en una película correcta, de buen ritmo y de excelente dirección artística. La aparición de Rita Hayworth es completamente anecdótica.