Además del compromiso social ante el colectivo, su creador, director y guionista exhibe una gran técnica a la hora de iluminar y manejar la cámara para obsequiarnos contraplanos, contraluces, planos secuencia, etc., que pueden deleitar al espectador.

Se presenta con estructura de miniserie, pero realmente se trata de una antología compuesta por cinco películas diferentes tanto en temática como en duración, unas más que otras pero todas buenísimas a mi juicio. Por ello me referiré por separado a cada una, teniendo en cuenta que a pesar de estar viendo una historia de ficción en el sentido de que se trata de actores al servicio de una puesta en escena, todos los hechos que recrea son reales y algunos de sus protagonistas continúan vivos como podemos ver seguidamente.

Magnífica serie, realista y comedida, que pone sobre el tapete la realidad del racismo, más allá del país en el que ocurre. Una cuestión tantas veces reflexionada y que, sin embargo, aporta una visión fresca y curiosamente esperanzadora. Música cuidada al máximo y actores que merecen un respeto por su papel, que lo hacen tan creíble como la vida misma.