Me ha parecido una película poco convencional, lo que puede hacerla difícil para un público acostumbrado a otro ritmo y otro lenguaje fílmico. El tema, como puede verse en esta misma página, puede explicarse con un par de frases, pero el argumento es muy tenue, difícil de narrar, pero que va calando hondo, como esa lluvia a la que ni siquiera nos atrevemos a llamar así. Bellamente fotografiada y excelentemente interpretada: Me ha gustado mucho la naturalidad de los actores (sorprendente en las dos niñas protagonistas).Y me ha encantado el final; me ha parecido un logro en una historia a la que, por ser tan tenue, como digo, resultaba muy difícil ponerle fin.

En películas como ésta (sólo dos actores y un único escenario, sin que en ningún momento el film se convierta en una obra de teatro), es en las que se puede apreciar la importancia de un guión (para mal o para bien). En el caso de "En la cama", para bien, para muy bien.
Claro que con la ayuda de unos diálogos excepcionales y una magistral interpretación. Tanto que el espectador puede llegar a sentir que no está viendo una película sino la vida misma.

Fui a ver esta película con verdadera ilusión... Y salí del cine completamente decepcionado, pese a que mis expectativas estaban arropadas por el Goya.
Nada que ver. “Juan de los muertos”, pese al alarde de truculencia, me ha parecido una mera payasada... No lo digo en plan despectivo, lo digo porque su argumentación me ha recordado a la de los “esketches” de los Payasos de la Tele; los chistes con la misma poca gracia que aquéllos, y la interpretación de los actores casi peor que las de Gaby Fofó y Miliqui. Una verdadera pena, un despilfarro de medios para tanta falta de ingenio, para tanta chabacanería.
Los primeros minutos y los dibujos del final, son lo mejor de la película. Algún chiste hace reír de puro tonto; por lo demás, ni despierta interés, ni se le encuentra humor, ni asusta o emociona cuando lo pretende...
Lo dicho: Esta película, interpretada por Gabi, Fofó, Miliqui, Fofito y Miliquito hubiera resultado más verosímil y divertida.

Durante mucho tiempo he conservado en la memoria algunas bellas imágenes de esta película… pero había olvidado por completo la inconsistencia de su argumento (recordaba vagamente que la gente esperaba un “eclipse”, pero ésta es sólo una historia secundaria y, además, se trata del paso de un cometa), y mucho más aún las malas interpretaciones de sus actores que, en el caso de José Sacristán, podría calificarse de nefasta (lo que es síntoma, también, de una mala dirección).
Quizás hubiera sido mejor no volver a verla y mantener vivas en la memoria esas imágenes mágicas, apenas unos fotogramas aislados que, perdidos entre un montón de desatinos, salvan la película y la hacen interesante (aunque sólo sea para los ojos y apenas sólo algunos de los noventa minutos que dura la cinta).

Tanto se ha dicho ya de esta película (de bueno y de malo, en estas mismas páginas), que añadir una buena puntuación o una crítica positiva parece innecesario. Pero está película me hechizó cuando la vi. me emocionó hasta las lágrimas... quizás eso no sea mucho decir, quizás sea lo que más se ha repetido... pero es que también me hizo sonreír, emocionarme, soñar... La he visto en varias ocasiones y en cada una de ellas, además de "disfrutar viendo una película" (lo que no siempre se consigue), he sentido que se me recargaban las pilas.
Me encanta la personalidad del protagonista, ese desmesurdo amor a la vida que vuelca en todos los que le rodean y que, a algunos "críticos" les parece una sobreactuación de Benigni.