Un ejemplo de cómo hacer una buena película. Un buen guion, con unos buenos actores, una buena manera de contar la historia, y un protagonista excepcionalmente bueno.

Daniel Craig está absolutamente sublime en esta película. Si no fuera por su nombre en los créditos y su cara, no habría manera de relacionarlo con James Bond... Aunque Daniel realiza un papelón, en general están todos bastante bien.

Se disfruta cada minuto que dura.

Más recomendable que Asesinato en el Orient Express (2017).

Debe ser que en la época de Netflix, y otras soluciones de streaming, ya no se lleva lo de que las cadenas típicas de TV emitan una película después de comer. Y debe ser que ahora esas mismas películas nos las estrenan en el cine y en HBO Max, para darles salida.

La película es mala. El guion es muy malo. Los prestigiosos actores que trabajan en ella no hacen ninguna actuación que sea digna ni de una puntuación de 5 sobre 10. Los no tan prestigiosos tampoco.

Mucho flashback pesado sobre el mismo tema, y mucho contar sobre cosas que luego no influyen en absoluto en la película.

Hay escenas de incendios y el fuego es de todo menos creíble. Como varias escenas "en coche", o "en medio del bosque" (el de la iluminación debería hacérselo mirar).

Espero y deseo que los responsables de esta peli no vuelvan a cometer otro error como éste. O eso, o que yo no lo vea.

A pesar de ser un fanático de las películas de terror basadas en la tensión frente a las basadas en gore, esta película se ha quedado lejos de enamorarme.

No es muy novedosa que digamos, y, muchas veces las consecuencias, o el desarrollo del guion, no tiene mucha coherencia con lo que los momentos previos de tensión te hacían temer.

La actuación no es muy buena, el sonido es medianito y los efectos visuales tirando a pobres. En su conjunto se podría decir que la dirección es mejorable, aunque no hay que dejar de ver que el guion, seguramente, no daba para una película sin una buena adaptación.

Digo esto, y a la vez que hubo escenas en las que me costaba mantener la mirada en la pantalla...

No hay nada bueno aquí. Ni la dirección, ni la producción, ni las actuaciones. Tan sólo se salva Pedro Pascal, que, sin llegar a la excelencia, no está mal. El resto de las actuaciones resultan insulsas y no aportan ningún dramatismo.

Los efectos especiales son lo único propio de 1984 de la película. ¡Qué oportunidad perdida para hacer una buena ambientación y levantar nostalgias y romanticismos! Hay más tiempo en la película tratando 1984 como el futuro que como la época pasada que fue.

El guion es ridículo. Hay que ser tan niñito para pasar por alto lo mala película que es, que difícilmente con dicha edad se tendrá capacidad de concentración como para aguantar 2 horas y media de un rollazo así.

Iba a afirmar que la puesta en escena es propia de principiantes. Pero no estoy convencido de afirmarlo porque creo que sería demasiado dañino e injusto para los principiantes.

A la directora ya la he incluido en una lista de exclusión. Muy buenas referencias tendrá que tener una próxima película suya para que acceda a verla.

Tras alguna pequeña duda sobre si continuar viendo la serie, ya que, aunque me había gustado la primera temporada, su parte final me había parecido un poco estirada artificialmente, me decanté por verla.

Esta es una serie que se disfruta episodio a episodio. Sí, hay una trama general, que avanza a través de todos los episodios. Pero cada uno por sí mismo es un buena unidad de entretenimiento y disfrute.

Y nuevamente, me vuelto a sorprende. La primera temporada me sorprendió por ser buena. La segunda me ha sorprendido por ser aún mejor.

La calidad de la producción sigue asombrando muchísimo, para tratarse de una serie (mucho más alta que la de muchas películas).

Ojalá los implicados en esta serie hubieran sido los encargados de las películas 7, 8 y 9.