Qué podemos esperar de una película cuya primera escena en flashback y su desafortunado título hacen un tremendo "spoiler" y le restan la única emoción a toda la cinta.

Además a esto hay que sumarle una media hora que entre prólogo y epílogo hacen constantes alusiones a la armada americana, a su formación y a su convivencia de una forma desvergonzadamente propagandística, quedando solo una hora y media restante que se convierte en un tiroteo entre dos tropas que bien podría ser un "colage" de otras 30.

Quizás el hecho de que azote a esta película de una forma para algunos desmesurada viene a raíz de de que estoy cansado de ver esto, y más aún, que haya gente a la que le guste, pero yo una película así no la considero necesaria. Sin embargo, tiene elementos algo más sólidos como la bella fotografía a los parajes montañosos y una banda sonora que destaca ante todo, pero salvo algún conflicto moral que surge como autojustificación del director a lo que está filmando, yo no le encuentro mayor aliciente.

Y si esto no fuera suficiente, en lo único que se centra la película, el extenso tiroteo y huída, no me convenció en absoluto.
Desprende inverosimilitud por doquier, y aunque por mucho que digan que esté basado en hechos reales, se aprecian las técnicas cinematográficas por todas las esquinas como recursos para añadir tensión y dramatismo fácilmente, tradicionalmente llamados tópicos. <Véase el "spoiler" abajo>


No os esforcéis en ver esta película con otros ojos, quizás sea algo más sólida, pero no deja de ser una americanada más.


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Reconozco ser algo escéptico con este tipo de cine catalogado como blockbuster adolescente. Y sinceramente de no haber sido porque fui gratis al cine, no hubiera pagado por ella. Sin embargo, salí gratamente sorprendido del cine.

Esquivando los típicos efectismos "hollywodienses" que ya me hartan o el romance previsible entre jóvenes guaperas con vidas complicadas... esta segunda entrega de "Los juegos del hambre: En llamas" se destapa con una historia realmente buena, reivindicativa, moralmente correcta y con grandes matices éticos. Quizás no sea todo ciencia ficción y se pueda rescatar algo del mensaje que logra transmitir la película.

Aunque sí es cierto que gran parte de esto es mérito del libro del que está basada, esta segunda parte está magníficamente grabada, con muy buen ritmo, ágil y atrevida, buen guion, buena música, buenos actores.. y poco más se le puede pedir a una película actual. Su secuela era una simple película de acción entre jóvenes y para jóvenes, algo inmadura y sin profundidad, que no pasaba de ser interesante. Esta segunda parte está mucho más consolida y se ve más compacta, algo que es de agradecer.

A pesar de todo, deja con mal sabor de boca porque una película así se disfrutaría mucho más viendo la saga entera, y no intentando recordar como fue la primera parte y luego tener que soportar como al final te dejan a medias y a esperar un año más para ver la primera parte del final de la saga que hasta 2016 no veremos su desenlace en las grandes pantallas. Sin embargo, hasta que no podamos ver películas de 8 horas en el cine, esta será la tónica en los próximos años.

La conclusión es que es una película apta para todos los públicos, disfrutable por los jóvenes que buscan lo de siempre, pero también para aquellos que buscan una profundidad que hoy en día se está perdiendo. Y así se ve reflejado en las críticas.

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Antes de nada, os aviso que esta no es una película más, si únicamente os gustan las películas convencionales y que no muestran ningún atisbo de originalidad, no sigáis leyendo esto.

Yo vi esta película sin ninguna referencia, ni de argumento ni de su reparto, y ya en los primeros planos percibí que se trataba de un cine diferente.
"Samaritan Girl" es una película cuyo director no sigue las premisas establecidas. Tras una presentación prometedora que deja el listón muy alto, el planteamiento continúa con una historia realmente original. Las "aventuras" de las chicas, la tragedia que se produce en una de ellas, la reacción de la segunda, el conjunto de miradas reflexivas entre los personajes, la dramática carencia de moral en sus acciones y sus resoluciones, y el clímax con un final cuyo desenlace es totalmente imprevisible. La historia que solo a un loco se le pasaría por la cabeza y que tenemos la oportunidad de ver en la pantalla.

Pero sin lugar a dudas, esta película destaca por su dirección. Es un tipo diferente de cine a lo que se ve normalmente, mucho más introspectivo, más interiorista, eres tú el que te tienes que meter en la piel de los personajes para entender sus actos y no es la película la que te lo da todo masticado. Y a pesar de que la banda sonora pasa de una forma discreta, la fotografía es digna de las mejores películas de la última década.

Un cine sutilmente diferente, más abstracto, original y arriesgado. Y sinceramente, yo agradezco encontrarme películas así.

Guerra Mundial Z es una película post-apocalíptica donde el bueno de Pit (Brad Pitt) correrá de un lado a otro con el pelo grasiento buscando la cura a una nueva infección de zombies cuya amenaza acecha a toda la humanidad. Muchas explosiones, carreras, efectos especiales y una nueva película de zombies que en su conjunto suman la película más cara de este género.

La película está basada en una novela, pero como no he tenido el placer de leerla, me limitaré a comentar únicamente la película como tal.

En general la película es realmente amena y divertida. Sin embargo, me dejó un mal sabor de boca por lo que podría haber sido y se ha quedado en el intento. Guerra Mundial Z es una buena película de acción, pero no busquéis nada más. Luego matizaré esto último.

Tras ver el espectacular tráiler que habían lanzado a la luz me esperaba una película más excéntrica, pero al final desgraciadamente el argumento se convierte en una carrera más a contrarreloj del guaperas de Brad Pitt, intercalando debates políticos, pequeñas reflexiones inocuas e imágenes de su familia intrascendentes. Mientras, el bueno de Pit se va metiendo en las situaciones más estúpidas...
Esto último lo quiero explicar con detalle, a lo largo de la película el director pone especial énfasis en dejar al protagonista en situaciones estúpidas, tomando las peores decisiones, dejando importantes herramientas por el camino, e incluso la historia se va hilando mediante un conjunto de casualidades más que inverosímiles para que vaya cuadrando. Y esto es algo que acaba desquiciando un poco.

Por otra parte es una buena película de acción pero no de zombies ni de terror, es una pena que el director haya preferido dedicar la película a un público más amplio omitiendo toda posible escena desagradable para un niño, lo cual le hace más comercial, menos arriesgada, pero le quita realismo a la historia, y por mi parte, un punto bastante negativo. Con ello quiero decir que no puedes contar una historia de apocalipsis y de zombies sin mostrar un poco más de gore.

Por último, la cinta posee suficientes efectos especiales y detalles técnicos para convencer a cualquiera, a cualquiera que le guste una película de acción, porque dentro del género zombie se me antoja demasiado escasa. Destacar, eso sí, la banda sonora de MUSE que queda realmente espectacular en todo momento.

Sinceramente esperaba algo más de la película con más presupuesto de este género (200 M), dirigida por alguien de renombre y protagonizada por un actor con una larga trayectoria. Sin embargo, no deja de ser una película interesante y amena y que es recomendable si te gustan las películas de acción.

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"Casi 300" es una basura sin gracia ni sentido con la coartada de ser una parodia de 300. Una "película" con la única intención de llenarse los bolsillos gracias a un público ignorante y una pandilla de pervertidos atraídos con el nombre, bastante patético en el mundo del cine, de Carmen Electra. Además de unos clichés con chistes fáciles de homosexuales, penes, y la actualidad televisiva.

Los pobres espectadores deberían sentirse engañados cuando se den cuenta de que han sido atraídos pensando que se iban a encontrar con una comedia y no un conjunto de imágenes absurdas, con unos diálogos de mi primo pequeño de 7 años y un decorado de mi vecino el mecánico.
Un insulto al espectador que recaudó más de 35 millones de dólares en Estados Unidos, y que viendo estas cifras hacen plantearse seriamente el devenir del llamado séptimo arte.

Podría dedicarle más palabras a esta película, pero al igual que no merece la pena ir a verla, mucho menos hacer una crítica sobre ella.