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Argentina Argentina · Buenos Aires
Críticas de Mariano
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Críticas 23
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
4
26 de septiembre de 2016
117 de 180 usuarios han encontrado esta crítica útil
"No respires" parte de una premisa que pretende ser original: tres jóvenes incautos deciden robarle a un hombre ciego, y este resulta ser el verdadero victimario. Vaya, que con semejante idea uno espera que la película genere un insoportable malestar psicológico en el espectador. Y no, no lo consigue, y es algo que ya sabes desde el primer sobresalto que te ponen con un perro apareciendo de la nada. Sí, señores: estamos ante otra película en la que la tensión la van a sufrir nuestros oídos con su incesante acumulo de scare-jumps. Sea dicho, desde el inicio del conflicto, se pasan por el forro una gran premisa que tenía potencial para hacernos pasar un mal rato. A partir de allí,el espectador tiene dos opciones: a) reconocer que está ante una película más del montón y valorarla por lo que verdaderamente es o b) seguir atado a la "originalisima" idea de que el victimario sea ciego y, tan solo por ello, alegar que es una "joya, obra maestra, orgasmo del thriller", pasándose él mismo por la quinta capa del forro las expectativas reales que tenía antes de entrar a la sala, y luego ir y clavarle un 8 en filmaffinity o imdb.
En 1967, se estrenaba "Wait Until Dark", con Audrey Hepburn representando a una mujer invidente que sufría el acoso de un malhechor en su casa. Y la cosa funcionaba, se ponía la discapacidad de un personaje en pos de la tensión dramática, pues la discapacitada era aquella víctima por la cual nos rasgábamos las vestiduras. Pero en "no respires" el ciego es el victimario, y la verdad es que su discapacidad importa poco y nada en la trama, ya que parece tener más super-poderes que todos los personajes de Marvel juntos (¡y ni mencionar que tiene la misma voz que Darth Vader!). Pues, bien, eso y un perro que aparentemente tiene la habilidad de teletransportarse por toda la casa.
Completan la ensalada un trío de protagonistas bien estereotipados (el imbécil que quieres ver muerto desde el minuto cero, la rubia tonta con su historia triste, y el tipejo "buenaso" que ha caído ahí por accidente). Los tres parecen ejemplos sacados de un libro llamado "Todo lo que no tienes que hacer si eres el personaje de una película de terror". Y es que son realmente más tontos que una paloma. Y considerando que el villano tiene más habilidades que MacGiver, la trama se vuelve hueca y repetitiva: es tan solo un festín de caza gore que se sucede por habitaciones, dónde hubiesen quedado mucho mejor escenas de verdadero thriller (escenas que no utilicen litros de sangre -y otros fluidos- o efectos sonoros estridentes para espantar). Violencia, gore, y giros argumentales que rozan lo inverosímil, ya sea por lo imposible, o bien por la moralina y sentimentalismo que asaltan a un espectador que ha tenido que sobrevivir a miles de conclusiones épicas ¡que en realidad no eran conclusiones!
Para finalizar (el resto quedará en la zona de spoilers) recomiendo ver "Wait Until Dark", o bien chequear en Netfilx, "Hush", película estrenada en 2016 sobre una mujer sordomuda que es acosada por un asesino serial, pero manejada con la sobriedad y la intensidad que para un thriller alcanzan. Sobriedad de la que "No respires" carece, al apostar por lo pomposo (tanto visual como argumental).
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Mariano
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8
29 de marzo de 2016
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Recuerdo el año 2008, y el furor que generó "Cloverfield", una película apenas superior a lo mediocre, pero que revolucionó la manera en que hasta entonces tenían para promocionarse este tipo de cintas. Ahora bien, ¿por qué rozaba el film lo mediocre? Tal vez porque no exploraba en la psique de sus personajes como si lo hizo otra gran película del género ese mismo año, The Host (Gwoemul). Deben preguntarse a qué voy con todo esto; la respuesta es sencilla: 10 Cloverfield Lane encuentra ahí su razón de ser, convirtiéndose en algo así como una "secuela reivindicativa".

En esta nueva entrega se abandona lo peor de la primera (entre otras cosas, esa cámara en mano, que creo que nadie va a extrañar) y se decide contar una historia "monstruosa" desde otro ángulo que no es más que el de las relaciones humanas (magnificamente representadas en un duelo actoral Goodman vs Winstead, donde ambos salen airosos) para crear un thriller siniestro, donde el aire es tan tenso que se corta con cuchillo. Tal es la maestría de la dirección -y el guión- que por un momento olvidamos que se trata de una secuela de un film sobre alienígenas gigantes que atacaban la ciudad de New York.

No por arte de magia se conciben películas como "10 cloverfield lane", porque la magia no existe, pero si existen los artilugios, y el de Trachtenberg tras la cámara es más que notable, el thriller psicológico dentro de la secuela de ciencia ficción. Dos películas que coexisten y se relacionan descarada, aunque brillantemente.

Mucho se ha dicho sobre el final, y sin caer -ahora- en el spoiler diré que ese final es justo y necesario... (el "porqué" lo menciono en el spoiler)
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Mariano
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10
1 de septiembre de 2012
48 de 66 usuarios han encontrado esta crítica útil
Luego de su pase por el festival de Sundance, donde hizo levantar a más de uno de su butaca; es llamativo que esta cinta de Craig Zobel por fin consiguiese ser estrenada en Norteamérica. "Compliance" es, sin rodeos, un análisis clínico de una sociedad psicópata. La premisa es simple: bromista telefónico llama a un local de comidas rápidas, diciendo que la dulce chica encargada de la caja no es más que una ladrona; razón suficiente para que la gerenta acate todas sus órdenes y haga sufrir a Becky humillaciones varias. ¿Parece estúpido, eh? Bueno, señores y señoras, esto pasó realmente.... y más de una vez, en 30 estados de EE.UU. En un país donde un hombre disfrazado de villano mata a una docena de personas en una sala de cine; la historia de "Compliance" no debería resultar tan alocada.

Primero lo primero, es un film para pocos; un desafío constante a tu tolerancia. Así como te preguntas "¿hasta que punto se han de dejar manipular estas personas?", también te estarás cuestionando seriamente "¿hasta que punto puedo seguir viendo esta película? ¿hasta que punto puedo seguir viendo sin sentirme cómplice?". Y ahí radica la inteligencia de Zobel, ya que su "Compliance" no solo te mete en el pellejo de Becky (excelentemente representada por Dreama Walker), sino que además te hace cómplice de la malvada gerenta (impresionante Ann Dowd, a quien seguro le espera una larga hilera de premios por su labor) y el pervertido bromista. Todo el guión es una bomba de relojería suiza; no hay ni una palabra más, ni una menos, que las necesarias para lo que Zobel tiene para decirnos: espera a tener un poco de poder en tus manos, y luego pregúntate "¿soy distinto a ellos?".

Segundo, cabe destacar, que todo el reparto lo hace muy bien. El plantel de actores trabaja en verdadero equipo metiéndose muy comprometidamente en este remolino de sensaciones; tanto así que uno puede verlos salir de la pantalla y pensar en esta cinta más bien como una obra de teatro, musicalizada -claro está ya desde el trailer mismo- por la estupenda banda sonora de Heather McIntosh. Y su minimalista fotografía, no hace más que reforzar esa sensación de "que quede entre nosotros"; a lo cual, con mucha complacencia responderemos: "así será, haré lo que me pidas".

Por último, ya están avisados de que es una cinta fuertísima. Ahora bien, no esperen mutilaciones a lo Von Trier, "Compliance" no se detiene en el golpe bajo; muestra hasta donde tiene que mostrar, y en los peores momentos apela a la más gratificante sugestión. Ya lo dicen algunos: no hay nada más aterrador que nuestra propia imaginación. Ver esta película, es una verdadera lucha contra nuestra mente. "No lo hagas, no pienses en ello", se reprenderá más de uno a si mismo. Imposible.

Básicamente, una de las mejores del año. Y seguramente, una de las películas independientes más arriesgadas y furiosas que he visto desde que tengo uso de razón.
Mariano
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5
19 de septiembre de 2011
22 de 28 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desde el vamos, nadie espera hoy en día encontrarse con una obra maestra del género cuando se trata de terror. Pero las expectativas pueden llegar a cambiar, cuando te dicen que Guillermo del Toro está detrás de la película. El problema de "No le tengas miedo a la oscuridad", es lo que podría haber sido y no fue.
Arranca con una escena bastante tenebrosa y chocante, pero luego de eso, cae en picada tratando de conmemorar a las películas de terror de los 70', fracasando en el intento por abusar de la tecnología de hoy en día. El diseño de los monstruos se siente demasiado irreal, y para colmo se los muestra un millón de veces, hasta el punto de que uno se acostumbra y deja de sentir miedo (e incluso gracia). Creo que con mostrar menos, hubiesen asustado más.
El reparto no está mal (excepto Holmes, que realmente parecía fuera de lugar con semejante pasividad), pero ninguno transmite algo que te haga sentir pena por ellos. El guión -uno de los puntos más bajos- es irrisorio, hay escenas muy trilladas, exceso de expliaciones y situaciones que uno no termina de entender si son para generar tensión o risa (a los spoilers más abajo me remito)
En fin, le pongo un 5 porque aburrida no es. Para pasar el rato, no está tan mal. Pero me quedaron las ganas de sentir verdadero miedo, y no fue así: terminó la película, llegué a mi casa, apagué la luz, y me fui a dormir demasiado tranquilo.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Mariano
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7
12 de septiembre de 2009
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Desde el momento previo al visionado, uno puede llegar a creer que se encontrará con una biopic acerca de la "Coco diseñadora", pero no hay idea más errada que esa. Audrey Tautou ("Coco" en la ficción) encarna más a Gabrielle Chanel en sus primeros contactos con el mundo de la COSTURERÍA, cuando la intención era sobrevivir a costa de los hilos y la aguja para no morir de hambre. Sí, suena un poco a dramón de media-tarde, aunque ese calificativo también estaría errado. Anne Fontaine no dirige ni un drama ni tampoco una biopic a rajatabla; su trabajo es más peculiar: define a un personaje, sus vivencias, pero más que nada a la idiocincracia de la reconocidísima "Coco". Este es el primer acierto del film; aunque claro no lo mejor del mismo: ya que si hablamos de lo mejor.... ¿quién mejor que Audrey Tautou para hacer los honores?

La actuación de nuestra querida "Amelie" es magnífica; la actriz se compromete con un personaje complicado y difícil de hacer, ya que no es la imaginaria Chanel cargada de vestidos que todos esperaban, no-no: esta Chanel es más compleja: es una chanel huérfana, cantante, severa, seductora por momentos y masculina en ciertas instancias. Se me hace imposible que otra actriz pudiese haber representado mejor a la idea del personaje que planeó Fontaine: Audrey está llena de gestos, voces, bailes, frases y otros decoros que exigen de cualquier actriz un histrionismo pocas veces detectable. No entiendo el por qué de las críticas tibias que ha recibido: ¿tal vez sean los mismos críticos que obstaculizaron y finalmente impidieron el Oscar que debió haber ganado por Amelie? No lo sé, lo único que puedo afirmar es que Tautou realiza su segundo trabajo más exquisito en años.

Secundando a la protagonista, tenemos un coro de secundarios en su mayoría hombres, que no están simplemente "opacados", ya que la verdad es que ninguno muestra grandes dotes actorales. Si bien todos ellos caen simpáticos, eso se debe al guión y a la idea concebida por Fontaine, pero no al talento de los mismos. Si no fuese por la excelente fotografía, el vestuario (elegante, justo y medido) y la preciosa banda sonora de Alexandre Desplat, Audrey Tautou no hubiese tenido compañía digna; entiéndase de este modo que las vestimentas, la fotografía y el soundtrack funcionan a manera de personajes, imponiéndose por sobre las labores de Alessandro Nivola y Benoít Poelvoorde (actores que encarnan a los dos amantes más importantes de Chanel). Ahora bien, el film tiene otros defectos además de esos dos secundarios imberves, y estos son: un montaje completamente descuidado y un final que, aunque original y emotivo, se siente acelerado en contraposición con la delicadeza del resto del metraje. Si no fuese por tales descuidos, "Coco Avant Chanel" podría haber resultado no solo una poesía visual sino la mejor biopic del año; pero bueno... "al más rápido se le escapa la liebre"
Mariano
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