Pese a ser interesante y destacar con actuaciones impresionantes, la historia es simplemente aburrida. No es mala, pero se siente como ver un documental, la vida suele ser así, sin grandes giros de trama ni conflictos y eso juega en contra de la película que se siente como si no fuera a ningún lado. No hay suspenso, pero hay mucho drama.

Esta película es mala. No es sorpresa para nadie, cine B del más puro, trama ridícula, personajes estúpidos, desenlace anticlimático, actuaciones pésimas. No destaca en absolutamente nada... excepto Nicolas Cage.
Se roba la película, es increíble como su personaje pasa de absolutamente todo con una apatía cómica, es un gran reflejo del espectador de este tipo de cine, al que no le importa el trasfondo o le da risa ver a los "actores" intentado actuar, la película tiene un gancho así que solo muestra interés. Como en las películas estúpidas de tiburones donde el espectador solo quiere ver a los tiburones y qué tan mala es, así el personaje de Nicolas Cage. Solo vale la pena verla si eres fan de este tipo de cine, fuera de ahí hay cero motivos para verla.

Adiós caníbales montañeses. La película no es mala, se sostiene por sí sola, lo que hace que el título Wrong Turn se sienta como un intento para llamar a una audiencia ya existente. Hay poco o nada de la esencia original de la franquicia, aunque eso no es necesariamente malo termina jugando en contra del público objetivo. Wrong Turn era una franquicia estancada y un reboot era lo último que necesitaba, pero si sobrevives a la decepción inicial te darás cuenta de que una nueva película con los mismo tropos sería irrelevante, ésta como mínimo la vas a recordar.
Los protagonistas son simplemente detestables, eso hace que al momento del giro no se pueda sentir empatía por ellos y más de uno se pondrá del lado de los antagonistas. Pudo ser peor, mucho peor.

Las películas de BlumHouse suelen ser tres cosas: Una buena película de terror autentico, una parodia del género muy acertada, o las anteriores pero hechas muy mal. Freaky es un ejemplo del segundo caso. Los chistes pegan donde deben pegar, la crítica social es tan acertada y divertida que no se siente como un sermón. Es como si Black Christmas no fuera una farsa de feminismo tóxico, Fantasy Island no fuera una mala versión nueva de un clásico y Truth or Dare supiera balancear correctamente la comedia del terror. Todo lo que las anteriores hicieron mal ésta la hace impecable.

Todos sabemos que esta película es lenta, aburrida, complicada y extraña. Dicho eso, para los que están acostumbrados a películas de este estilo no se les hará difícil verla. La trama no es compleja si se presta atención, el terror es sutil y utiliza más el terror psicológico que imágenes grotescas y gratuitas. Alerta de autolesión. Es una trama interesante y muy bien actuada, con un buen trasfondo y propuestas interesantes. No es recomendable para los que buscan una idea clara, o rápida, de una película.