Sabiendo que el director es el mismo de Superman IV ya esperaba ver una película mala. Pero ni mente no podía imaginar que era ta horriblemente mala y aburrida.
Todo es un disparate sin gracia. Actores a los que echarían de cualquier escuela de interpretación rodean a un Dolph Lundgren que sabe que está rodando una basura por la que le pagarán cuatro duros. Este hombre que ha sido Ivan Drago y ha pertenecido a un gran catálogo de tipos duros queda reducido a un ridículo papel de profesor de instituto que desentona más que un pulpo en un garaje.
Falla todo: el guión, la dirección, las secuencias, los efectos especiales... solo debería ser exhibida como tortura psicológica.

Es una película que había evitado ver porque la mayoría de veces había escuchado que era una basura. Aprovechando que echaron toda la saga en televisión le di una oportunidad y realmente no está tan mal. Tiene cosas muy interesantes. Es entretenida y creo que no se merece críticas tan malas. Es más, entiendo perfectamente a las personas que la llegan a considerar del culto.

La historia está muy bien y se nota la maestría del director en muchos momentos. Parece mentira que una persona con su experiencia y trayectoria sea capaz de cometer la torpeza de cargarse su propia película con la última frase que vemos en pantalla. Porque para dar esa explicación el director dispone de suficientes recursos en una película, como plasmar sus ideas por medio de personajes. Si necesita además poner una nota aclaratoria es que está convirtiendo su historia en un panfleto. Por eso, entiendo que haya personas que le den tan poca nota a un filme que se merece mejor opinión.
A pesar del despropósito, si obviamos ese momento, es un thriller entretenido en un estupendo ejercicio de cine.

Abogados, casinos, ludópatas, timbas clandestinas, ausencia de escrúpulos... pintaba bien pero el resultado es bastante mediocre.

Lo mejor:
- Natalia Verbeke
- Víctor Clavijo
- Que es una miniserie
- A pesar de los despropósitos, no aburre lo suficiente como para dejar de verla.

Lo peor:
- Parece un publirreportaje pagado por Garzón para que hable de las maldades de los juegos de apuestas.
- Hay actuaciones lamentables. Un actor profesional no lo puede hacer tan mal.
- Giros argumentales imposibles.
- Personajes que aparecen y desaparecen sin justificación.
- El proceso judicial es un desmadre. Sin pies, ni cabeza.
- Es un sí pero no continuo.

Está película está producida por el apellido aunque sin la calidad que destilaba su predecesor. El guión parece escrito por un niño de 5 años y la dirección de actores absolutamente nula.

Lo mínimo que se le pide a una comedia es que tenga algunos puntos, aunque sean mínimos, de humor. Aquí no los encontrarás.

Podría dar muchos argumentos que sostienen mi postura pero realmente no me apetece perder más el tiempo con semejante producto tan infame.