Me apasiona la historia de los Caballeros del Temple, por lo tanto tenía muchas ganas de ver esta serie. Tan solo verla anunciada me hice cuenta de HBO para poder verla. Pero he encontrado una serie que capítulo a capítulo empeora más y más. Esperaba ver una historia sobre la caída de los Templarios, una historia sobre como el Papa y el Rey Felipe persiguen, dan caza y condenan a estos caballeros. ¡NADA MÁS LEJOS DE LA REALIDAD! Es una serie que decide dar la espalda por completo a los libros de historia, que insulta a los libros de historia. Y mira, podría comprar que rehagan la historia templaria al "tun tun" si de ahí sacan una serie pasable e interesante. Pero no es así. Está repleta de actuaciones incomprensibles de los personajes (y no porque sean imbéciles, sino actitudes sin sentido), de giros de guión absurdos. Parece una serie dirigida a un público de 8 años donde el bueno se vuelve malo y ahora es el nuevo jefe de estos y lucha uno contra uno con su antiguo amigo. Una serie donde ahora un malo super listo se cuela en fortalezas con 50.000 soldados vigilando sin que nadie le vea y ya tiene ahí su cuerda preparada para la huida. Una serie que como mucho, la ha escrito un crío de 13 años.
Cuando la empecé esperaba encontrar una serie de 8 o 7, y me he encontrado un intento de serie de como máximo un 3 (y soy generoso).

Muy divertida, carcajadas durante todo el film. Muy buena sátira de la sociedad italiana y sobretodo de sus funcionarios y más que mundialmente famosa lenta y pesada burocracia. Quizá los únicos dos "peros" sean que puede llegar a hacerse algo larga, y que si no estás demasiado familiarizado con Italia no podrás captar toda su esencia y sus desternillantes bromas. Probablemente necesites haber vivido en Italia y haber "sufrido" de su burocracia para disfrutar plenamente de tan espléndida película.

Es buena, bastante buena. Hasta que se acerca el desenlace que decae con el siempre buscado heroísmo 'made in USA' donde prima ensalzar el valor de los suyos a un buen y minimamente verosímil final. Y con el pésimo final ya se corona.