Es aburrida, en algunos momentos bastante asquerosa (aunque pretende ser natural), lenta, previsible y sencillamente otra comedia mala de EEUU, que difícilmente se puede llamar comedia, porque los puntos graciosos son ínfimos. Después de ver esta película perdí todo el respeto por Jason Segel, que, aunque lejos de ser un buen actor, se defendía bastante bien en "How I Met Your Mother".
De todos modos, no todo es malo, el punto bueno, a mi parecer, es el musical que se representa al final de la película, que me pareció bastante original.

Podría decir que despierta sentimientos. Es una parodia bastante simple, con música pegadiza, de letra sencilla, algo absurda. A pesar de que parecen unas características bastante malas, creo que es lo que precisamente la hace especial. En un trama sin complicaciones con humor se critica a la sociedad: medios informativos, formas de hacer actos benéficos y los superheroes perfectos que siempre vemos en la televisión...