Tenía un grato recuerdo de Viven y con tanto bombo y platillo esperaba que "La sociedad de la nieve" la superase con creces pero no ha sido así. Se me ha hecho larguísima, eterna, con una voz en off redundante y cansina, unos personajes con los que resulta imposible conectar y un recurso fácil sensiblero-lacrimogeno que se excede de falso. Un discurso new age pseudo religioso poco realista, pese a que técnicamente va sobrada. Muy buena fotografía pero poco más, el guion me ha resultado aburrido y vacío, plagado de monólogos éticos y poca realidad que contar.

Serie pésima donde las haya. No sé ni por dónde empezar. A Almudena Amor le viene grande un papel de co-protagonista, carece de credibilidad, expresión de emociones y dicción. Cualquier frase parece que la estè leyendo y no cambia el gesto en toda la serie. El guión, enrevesado donde los haya está plagado de errores y cabos sueltos, pero además no hay quien se lo crea. El trabajo policial es de traca , las subtramas son ridículas y carentes de sentido. Se intenta sorprender con giros de guión constantes pero resultan más inverosímiles cada vez hasta el punto de dar risa. Le pongo un dos porque la actuación de Aarón Piper está bastante bien , es el único que se salva de la quema.

Imposible meterse en la película con los cámaras por ahí dando vueltas. Los personajes no es que sean malos, es que no se creen ni ellos mismos que sean amigos. Te tragas una hora de conversaciones absurdas, insulsas y anodinas porque piensas que no puede ser tan mala y que algo tiene que pasar. Ya que no tenían guión al menos que cuenten una anécdota o un chiste decente. A todos les falta desparpajo, y capacidad de improvisación. Una pérdida de tiempo.

Clásico error de guionista aficionado de meter voces en off injustificadas a lo largo de toda la trama con el fin de explicar lo que ya estamos viendo (Tomen nota Sinde e Izaguirre) . No entro a valorar si se cuentan verdades acerca del cantante, ya que desconozco los pormenores de su vida, pero tanto el guión insulso como las actuaciones lo dejan muy mal parado. (Aunque no tanto como a Julio Iglesias, que da vergüenza ajena). Si nunca hubiese escuchado hablar de Bosé me quedaría con la sensación de un niño pijo y tonto que hace coreografías de upa dance.
Cero profundidad, cero subtexto, cero arte.

Aunque la idea es original y Joaquín phoenix borda el papel, se hace excesivamente larga. Transmite perfectamente el miedo con escenas surrealistas que causan ansiedad y desasosiego, pero abusa de estos absurdos para no llegar a ningún lado, simplemente mostrarte la mente y la infancia de Beau, llegando a ser repetitiva y pesada. No faltarán los de "es que no la entiendes" que se creen que van un paso por delante de la humanidad porque la película les recuerda algo de Freud que estudiaron de pequeños. Para hacer una película tan extensa hay que estar seguro de enganchar al espectador y de tener algo que contar por 3 horas, pero yo me he levantado cuatro veces y no veía la hora de que se acabase