Ni Batman ni Hulk ni Superman... ¡Matusalén! Cualquier guionista sabe (aunque sea Dios) que si un personaje tiene unos poderes que ya le gustarían a Gandalf, solo puede salir un par de veces en la película y tiene que morir de la manera más estúpida posible.

Destaca sobremanera la arbitrariedad de dos aspectos: los vigilantes, cuya existencia no es lógica de ninguna forma, y el hecho de que Noé sea el último eslabón de la estirpe de Set, lo cual deja en el aire el origen de su esposa. Es más, ¿nadie se ha preguntado de dónde surgen todos los descendientes si Adán y Eva solo tuvieron hijos varones? De todas formas, el bestseller en el que está basado no es que sea muy coherente en general.

En fin, lo único por lo que merece ser vista es por ver a Emma Watson desnuda. Es broma, en ningún momento sale desnuda. Eso sí, cerca del final da a luz a dos hijas gemelas, y en un giro de la trama esperaba que al menos fueran negras, pero ni eso.