Adaptación del Manga japonés, El lobo solitario y su cachorro, que presenta las aventuras y lucha sin cuartel de un samurái contra su antiguo Shogun que ha puesto precio a su vida y a la de su hijo.
Una historia tradicional japonesa con innumerables seguidores y que traslada a la imagen real, las páginas en blanco y negro del Manga original. El lobo solitario y su cachorro es una obra muy reconocida en Japón y todo un icono del Manga.

La película presenta un argumento que peca de sencillo e incluso simplista, pero tiene el encanto de las películas de aventuras, dejando espacio para los combates y enfrentamientos a espada, con toques de humor que ayudan a soportar tanta violencia.

El aspecto visual de la película no está muy cuidado, el maquillaje y efectos especiales de los combates son muy ajustados al cine de la época, dejando claro que el paso del tiempo ha dejado en mal lugar al trabajo realizado en aquella época.
El argumento peca de simple y cae en la reiteración de situaciones, todo se limita a ofrecer combates de mayor o menor calidad mientras el espectador sigue el avance del protagonista con su hijo buscando la venganza deseada.

La indumentaria seleccionada: las pelucas y el material de atrezo, se antojan mediocres y pobres, sin duda por el bajo presupuesto empleado y lo único que despierta al espectador son los combates que protagonizan padre e hijo a lo largo de toda la película, los cuales presentan un ritmo bajo, lo único que los salva es el sentido del humor que aporta el director ofreciendo un extraño equilibrio entre violencia y humor negro.

El asesino del Shogun se disfruta si uno es consciente de lo que va a ver, si espera cine al estilo actual de Matrix o Tigre y dragón que se abstenga de ver esta película.

El paso del tiempo no ha beneficiado en ningún aspecto, esta historia de cuatro hombres de ciudad que van a pasar un fin de semana de placer y que pronto se convierte en una pesadilla.
En lo setenta dio comienzo la explosión de exponer la violencia explícitamente, sin tapujos, películas como Perros de paja y La ultima casa a la izquierda, abrieron un camino, en la que se presentaba el lado oscuro del ser humano a través de situaciones de una violencia contundente y opresiva.
Defensa de John Boorman, se puede colocar en esa categoría, donde presenta una trama sencilla, en un principio idílica, que se convierte en una autentica pesadilla.
Genera desde un primer instante una atmósfera incomoda y extraña, que acompaña a los protagonistas por todo el camino, rodeados de la belleza de la naturaleza y de los extraños habitantes de la zona.
El desarrollo de la historia posee un ritmo parsimonioso, casi letárgico, que no ofrece grandes instantes de interés, el paseo en canoa se vuelve monótono y aburrido.
Los diálogos que se dan entre los protagonistas no llegan a decir nada, ni siquiera plasman con claridad el tipo de relación de amistad que existe entre ellos.
El ritmo de la trama al igual que el bosque se hace más denso y más denso, hasta que llega a una escena verdaderamente incomoda en la que estalla la violencia, con momentos de angustia y opresión.
Ese instante puntual eleva el interés de la trama, pero pronto vuelve al ritmo monótono y letárgico, al que le suceden comportamientos alejados de cualquier atisbo de lógica.
Logra generar una atmósfera incomoda y mal sana en todo momento, pero no consigue plasmar con acierto las sensaciones por las que están pasando los protagonistas, entre los que destacan las interpretaciones de John Voight y Burt Reynolds.
Tras el largo camino recorrido, deja la sensación de ser una trama densa e incomoda que refleja el lado mas oscuro del ser humano, que presenta irregularidades en cuanto a ritmo y desarrollo de personajes, resultando una historia vacía.

Prometedora, interesante, fría, morbosa, desenfadada, distante, gamberra, rocambolesca, endeble, oscura, polémica, irregular, previsible, reiterativa, mediocre e irregular producción independiente de los años 70 que relata las vivencias y experiencias de la vida de dos estudiantes y compañeras de piso, intentando hacer realidad sus sueños.

Creo que es la típica producción que pudo conseguir cierta repercusión en la época de su estreno, finales de los 70, pero en la actualidad no sorprende y no consigue mantener el interés, llegando a decepcionar.

Las amigas, queda como una pieza representativa de un tiempo, época y estilo de vida, en el que las drogas, el sexo y la cultura del morbo, se convertían en compañeros de viaje de adolescentes.

Vuelvo a caer en la trampa de siempre con el cine Español. Otra trampa mortal que prometía algo más de lo que realmente ofrece. Todo el mundo hablando maravillas de ella y yo me he llevado una gran decepción.
Todo bien, intérpretes, ambientación, pero mal con un desarrollo chapucero que echa todo a perder.
Que Dios nos perdone por hablar bien de estas producciones.

Decepcionante. forzado, ilógico, chapucero, increíble, sorprendente, dramático, tramposo y absurdo western que presenta y desarrolla una historia forzada e insostenible, desde el momento que dos hombres con cuentas pendientes entre ellos, participan en un trabajo común de trasladar ganado, en un viaje en el que van a estar expuestos a numerosos peligros..
El último amanecer, se beneficia de la presencia estelar de figuras del cine clásico, como: Rock Hudson y Kirk Douglas, para ofrecer un relato de aventuras entretenido en el que hay espacio para amores, ilusiones, celos, traiciones y riesgos de vida o muerte.
La premisa de la historia puede resultar interesante, pero todo el interés va decayendo a medida que se van tomando mayores libertades, haciendo que todo se antoje forzado, insostenible e increíble.
Es una película que no vuelvo a ver, puesto que no me ha convencido en absoluto con determinadas situaciones que se van dando a medida que se aproxima a su desenlace. Primera y última vez que la veo.