Cuando termines de ver esta película, te encontrarás en una disyuntiva dolorosamente real: no sabrás si compadecer u odiar al personaje. Walter es un ser despreciable, repulsivo;a su vez, es un luchador: combate incesante contra sus propios intintos enfermizos. Porque su deseo es cambiar. Y así, paga los errores pasados (imperdonables incluso para sí mismo), a través del autodesprecio, del control de su vida por parte de las autoridades vigilantes y del rechazo de todo aquel que le rodea y descubre su "otra vida".

Es imposible describir una película como esta. Delicada en lo imposible. Valiente, muy valiente. Y dolorosa. Más de lo que en principio puedes interpretar tras su primer visionado. Al concluirla, un fino poso de dolor se instaura en tu alma y es difícil evadirlo de tu conciencia.

Es infinitamente profunda, tan profunda que no es necesario que se descubran los detalles más escabrosos de su pasado para comprender la totalidad del sentido del filme. No es necesario ahondar en lo que ni tan siquiera el protagonista es capaz de volver a sumergirse.

La pregunta es: ¿Es posible que un enfermo sea capaz de analizar su mal desde un punto de vista externalizado? Tal vez sea posible, o tal vez sea en ese preciso punto donde la trama peque de inocente. No obstante, bajo ese frío, esa soledad que envuelve a Walter, un chillido rasga el viento en aparente calma: el grito de su conciencia. Y todos, su siquiatra, el sargento que le visita, sus compañeros de trabajo, el marido de su hermana (único confidente), todos ejercen una presión demencial sobre su atormentada alma.

Salir adelante de algo así es imposible. Y es perfectamente aceptable que jamás, jamás pueda un hombre ser perdonado por tales actos ante la sociedad. Sin embargo, sentí compasión. Es realmente triste comprobar que, en esta vida, uno no puede huir de sí mismo: esa debe resultar la mayor de las condenas. Si es que sienten remordimientos de algún tipo, algo que esta película defiende con mucha valentía. No sé si con acierto.
Una visión distinta. Una cinta magistral. Pero por la temática, muchos la odiarán.

Mención aparte merece su montaje: una obra de arte, pura poesía visual, realmente triste. Y su banda sonora: de esas veces que capta tu atención más allá de las voces y adquiere una significación real. Por último, Kevin Bacon realiza el mejor papel de toda su carrera. Frío y apático, repugnante y conmovedor.

Siempre me emociona ver al gran Robin Williams. Este actor ha sido ridiculizado, menospreciado e infravalorado sin que se le haga justicia: es cierto que ha aceptado papeles en películas infames y ha hecho el payaso más de la cuenta, pero es uno de los actores con mayor sensibilidad y transmite una maravillosa emocionalidad a sus personajes. Así, tenemos actuaciones soberbias cargadas de espíritu y tristeza en algunas de sus películas. ¿Quién no se emocionó con "Más allá de los sueños"? ¿Quién no quedó impresionado con Insomnio? ¿Todavía se le considera como ese actor incapaz de interpretar un papel serio, teniendo "Despertares", "El indomable Will Hunting"...?
Rockmina, usuario de esta página, lo define muy bien en una de sus críticas: "Siempre elijo todas las películas de este grandísimo actor, quien posee un talento sin igual tanto para hacer reír o llorar. Siempre consigue su cometido".

Lo que sucede es que está muy bien visto poner a parir a ciertos actores, sin saber muy bien por qué: Tom Cruise, Robin Williams... y después reirle las gracias a semejante basura como puede ser Jack Black, o que Ben Stiller resulte simpático. Me toca mucho los cojones.

Volviendo a la crítica, (disculpadme por mis divagaciones), "Retratos de una obsesión" es totalmente recomendable. Una cinta con guión bien estructurado donde se refleja la soledad insoportable de un hombre completamente abandonado a una vida de silencio. La sensación de tristeza que despide este encargado de fotografía es abrumadora, con su hieratismo, sus buenas maneras, su lamentable y enternecedora búsqueda de afecto ante aquellos que directamente le olvidan e ignoran. Esta película me dejó triste, resulta increible que los seres humanos podamos ser tan fríos y aislados ante personas que necesitan de nuestra ayuda.

Por otra parte, Mark Romanek desarrolla una dirección fluida, un ejercicio de estilos con predominio de colores pálidos y azulados muy elaborado y estético. No os la perdáis. La voz en off resulta fantástica y la banda sonora es magnífica, acentúa la tristeza que vive el personaje de Williams. Un tributo a este gran actor, dejad de dilapidarle ya (los que lo hagan).

Una historia de venganza. Enfermiza, absurda, sinsentido, demencial. "Descenso" es una película de mentes enfermas para mentes enfermas.

"Descenso" está estructurada en 4 partes. La primera, nos muestra a una chica normal la cual es brutalmente violada (no digo nada, eso lo dice en la sinópsis). Y digo BRUTALMENTE violada. Una de las escenas de violación más largas. La tal Talia Lugacy se lo debió pasar pipa, no ha cortado un solo minuto de metraje ahí. La 2ª parte nos muestra a Rosario Dawson profundamente dolida y traumatizada, en plan no quiero ni hablar con un chico. Y de pronto, la cosa cambia, se anima a salir sin venir a cuento, cambia totalmente su actitud y nos adentramos en la 3ª parte: la de las fiestas en el club. La 4ª se resume a esto: si la 1ª te parece dura, quítala.

Realmente es esta última parte la que hace que esta película sea ABSURDA. Con un final PATÉTICO, no explica nada, no ahonda más allá de lo simple, las imágenes lo son todo. Ni tan siquiera los silencios están bien llevados. A su vez, debemos añadir múltiples escenas de relleno, muy "Indie",sí, pero nada evocadoras, un auténtico orgasmo de imágenes y situaciones absurdas, pretendiendo ser profundamente trascendentales.

La iluminación es malísima (se nota la mala calidad), los planos y secuencias son de novel, y la elección y ubicación de la banda sonora es francamente mala. Los diálogos en muchas ocasiones pretenden decir muchas cosas y no dicen nada. Lo único salvable es la maravillosa actuación de Rosario Dawson, una actriz realmente espléndida que no sé cómo coño se metió en esta película, y que consigue que la hora y media de cinta no se convierta en una absoluta pesadilla.

La intención del guión es buena: el descenso a los infiernos, la degeneración a través de un trauma. El problema es que no pretende decir nada, no da a pensar, no lleva a soluciones finales del conflicto interior, solo hay dolor y más dolor. Es posible que con un segundo visionado pudiese extraer múltiples detalles, tal vez no sea tan mala, incluso sea una buena película, pero no pienso verla de nuevo. Ganas desde luego no da.

Vedla, por el hecho de que es curiosa, de que Rosario actúa divinamente. También Chad Faust, en un personaje nada cómodo. Y para las chicas, Wilson Heredia muestra su cuerpo en tres de cada dos planos.

No sé qué deciros... esta película me resulta difícil de evaluar. Sólo diré que cuando terminé de verla, una sensación agridulce quedó en mi conciencia. Por un lado, la buena actuación de Robert Pattinson con un personaje atrayente y (tal vez un poco, pero solo al principio) misterioso vampiro, te engancha y quieres saber más. Kristen Stewart es bastante peor, tiene muchos tics, excesos en su interpretación.
Esta es la película más descafeinada de vampiros que haya podido hacerse jamás, orientada a un público preadolescente, de una simplicidad que a mí me resultó terrible. Es como un cuento de esos antiguos adaptado al siglo XXI, realmente hasta Walt Disney podría estar detrás de esto. ¿Sin sangre en una película de vampiros? Casi por respeto a ellos mismos, debería haber salido una poca más. Bueno, de todos modos se trata de una historia de amor, así que pasaremos por alto esto.

Se nota que es la adaptación de un libro, porque las conversaciones y el excesivo (e inútil) discurrir de escenas iniciales en el instituto, con todos esos compañeros retrasados profundos y esperpénticos se antoja demasiado largo pero curiosamente obligatorio. La historia de amor en sí entre los dos protagonistas tiene varios problemas: se sucede demasiado aprisa, casi de forma desesperada (debe de ser un libro largo). Tan deprisa, que lo que sucede en varios meses de una relación cotidiana aquí pasa en días. Eso me mata, pierde toda credibilidad.

Y por supuesto, TOPICAZOS. Esta es la película con más tópicos que he visto en mucho tiempo. Hablaré de ellos en el spoiler. El caso es que hubo por ejemplo una escena en la que dije: "Oh no, no me vengáis con esto ahora", y sucedió. Una vez más, en la historia del cine.

Los efectos especiales son francamente malos, pero malísimos. Algunos irrisorios. La dirección (y yo que siempre ando contento con esto) me resultó bastante amateur. La banda sonora es buena, pero me quedé un poco viendo los créditos y se escuchaban las típicas canciones de toda película preadolescente: guitarras, rockerito melódico, amor...

En fin, que esto es una película de amor, leñes. Lo bueno a destacar es la química entre sus dos protagonistas, la reinvención de las característas del vampiro (muy lights pero interesantes), y el discurrir de una trama que posiblemente resulte más interesante en las posteriores entregas de la saga. Y por una vez, el doblaje es bueno.

Seré bastante benevolente porque me gustan las prototípicas películas "de negros" dirigidas hacia miembros de la comunidad. Me divierten, en ocasiones son sencillamente geniales, muy ocurrentes, aunque la fórmula comienza a marchistarse. Ellos mismos critican sus malas costumbres y ensalzan sus buenos valores y su orgullo por ser negros, algo perfectamente comprensible tras cientos de años de esclavitud. De esto precisamente es de lo que trata esta cinta. Por encima de su hilo conductor (podéis leerlo en la sinópsis), es todo un cúmulo de chistes sobre negros y blancos (sobre todo negros). Y ya está. No busquéis más.

Cinta para ser vista en casita un domingo en que no tengas nada que hacer. Diálogos flojos, humor que parece haber caducado con el paso de los años (muy pocos años). Película ñoña repleta de clásicos valores, un final que no se sostiene (aunque lo digieras en principio fácilmente) y diversas situaciones humorísticas, algunas muy divertidas, otras deleznables. Una cinta más, auténtica serie b de la comedia, olvidable. No obstante, sus referencias al rap y su estupenda banda sonora hacen más agradable el devenir de unos minutos (en ocasiones) bastante torpes.

PD: ¿Soy el único al que el humor de los clubs de comedia americanos no le hace ni puta gracia? Horroroso.