Una niña mimada por unos padres "ausentes" se muda de casa. Ella no sabe apreciar las cosas que tiene, y los padres son un bravucón prepotente y una madre-florero que juntos, no dedican tiempo ni esfuerzo suficiente a educarla.
Por el camino el padre bravucón se pierde y pierde a toda la familia hasta adentrarlos en el mundo espiritual, que es el reflejo del japón moderno. De sus ríos contaminados, de sus industrias, entre la tradición y la modernidad, ... y en parte es reflejo del estudio Ghibli, como modelo de empresa. (El amo de calderas es Miyazaki, y Baba Yaga, aparte de ser la diosa Amaeratsu, es el director del estudio).
En este mundo las personas sin alma, como los padres de Chihiro, no tienen un buen sitio. Pasan, pastan, y son devorados por el sistema, puede que engorden, pero no VIVEN. Sobreviven, y gracias.
Chihiro, al encontrarse sola, tiene que aprender a sobrevivir. Pierde su estatus, su vida anterior, reflejada por su nombre, y empieza de nuevo: Es SEN, en japonés "Céntimo" (De Yen), casi no tiene valor, y sólo por una mezcla de cálculo y piedad, Baba Yaga, la empresaria, que es también "la madre", en suma, el personaje que describe y refleja como es "el mundo real", Amaeratsu, acepta ayudar a la niña a vivir, otorgándole su nuevo nombre y el privilegio de un empleo.
Pero vivir no es sólo trabajar, y menos sólo por dinero. No al menos si quieres estar "completo". Debes aprender porqué trabajas, que tiene "valor", cual es tu lugar en el mundo, porqué lo ocupas, y donde puedes y quieres llegar. Sen no sólo ejecuta órdenes, tiene iniciativa, trata de hacer "las cosas bién" porque entiende lo que está pasando, incluso mejor que Baba Yaga... (Ya que al fín y al cabo Baba-empresaria es sólo media Baba)
Conforme Sen logra adquirir sentido, sin dejar de ser SEN, puesto que esas tres letras ya estaban en su nombre, vuelve a ser Chihiro, recupera a sus padres y, es de prever, los salva de su existencia miserable, les enseña que hay más en el mundo que pastar o que oponerse al sistema.
(El Sin Cara no quiere nada para sí, salvo "ser bueno" y aceptado, porque se situa fuera, y en contra, del orden establecido. Pero no tiene un proyecto alternativo -a diferencia del Conservador DragónRío- así que cuando logra atraer al proletariado, con dinero, no sabe que hacer con ellos, y se los come. Su única salida es tragárselos a todos, la Revolución Global, como medio de ocultar su fracaso)
Es una enseñanza que se complementa con "El Castillo Ambulante", un canto justo a lo contrario, a no envejecer demasiado deprisa, a no aprender demasiado "como es el mundo", a los peligros de no soñar y ser demasiado conformista... esa sí es una película que, aparte de reivindicar la vejez, y señalar también los peligros de la ambición, ama la juventud y el Cambio ... Como siempre en Miyazaki, las cosas no son lo que parecen...

Vazque Figueroa dijo en una entrevista con Sanchez Dragó -Mientras Dragó levitaba, como es su costumbre- que el 20% de sus propias novelas lo consideraba "bueno", y el otro 80% pagaría poque no se reeditara, vamos, "para quemarlo". Pero también te prometía que siempre vas a encontrar cosas interesantes en sus libros, increibles pero reales, aunque el argumento sea una M*****.

Con House pasa lo mismo.

Hay evolución de personajes, aunque es tan lenta que parece una sit-com, pero eso es lo de menos: Lo que importa son los casos.

Consigue presentarte de forma amena enfermedades raras o formas raras de contraer una enfermedad. Desde el caso de la Super-modelo en la que ningún tratamiento como debería ... hasta que decubren que es XY y no XX ...

(Y , por cierto, dos matices: Uno.- Sigue siendo fenotípicamente mujer. Dos.- Su biografía me suena, se parece muchíiiiisimo a la de Kate Moss ¿Será su caso? Pero ella ha tenido un niño...)

... a la sub-trama en la que una adolescente se enamora de House y éste parece descubrir, después de dos capítulos de coqueteo, que realmente no se ha encaprichado de él sino que está enferma y eso le afecta a la conducta ... digo parece porque resulta que ¡Es mentira! House engaña a la chica y, sospecho, a toda la audiencia que no viva interesada por las enfermedades raras, porque aunque la chica está enferma de lo que dice House, esa enfermedad no afecta a la conducta. Ella está realmente encaprichada de él y se la quita de encima con una media-verdad médica ... ¿Alguien se había dado cuenta?.

Lo que intento destacar es que House es tan plano como Sherlock Holmes, tan entretenido, tan repetitivo ... pero nos da información veraz, información que -tras buscarla en internet y contrastarla con los amigos médicos- a mí me ha servido, por ejemplo, para prestar atención y formarme una opinión al margen de los medios en el caso de la atleta hindú Santhi Soundarajan, a la que retiraron su medalla de oro de 800 metros en los Juegos Asiáticos de Dubai por "ser un hombre" (Tiene Síndrome de Morris). Quizás si los jueces hubieran visto House no habrían tomado la decisión tan rápido, porque sabrían que un Morris, al ser alérgico a las hormonas masculinas, tiene el desarrollo más femenino que se puede soñar ...

Cada episodio de House es formación y entretenimiento en grado sumo ... sólo le falta un buén guión, una buena evolución de personajes, grandes escenarios ... y sería ROMA, Temporada Uno :)

1) Personajes que hacen el idiota en una crisis: Lo-normal-pa-un-perro. Quién vea de verdad estallar el mundo a su alrededor y se comporte con la frialdad de un personaje de videojuego, de modo coherente y acertado, probablemente necesite un psiquiatra ... a parte de que sería el personaje menos creible del mundo ... (Como le pasa un poquito a Tom Cruise en "La Guerra de los Mundos") porque si no tienes información es imposible que aciertes siempre (Salvo serendipia, que a priori no es buena base para una película).

2) Ninguna explicación: Eso es lo que separa al miedo del terror. El terror es irracional, no hay cálculo en él. Huyes o te quedas quieto, da igual , lo que importa es que haces el tonto siempre porque no sabes que está pasando ...muchas películas de terror o de ciencia ficción proyectadas últimemente pecan de un exceso de explicaciones ... (Especialmente lamentables, los Midiclorianos de George Lucas en "La Amenaza Fantasma") ... gracias a el cual algunos expectadores (yo, por ejemplo) pueden sentir que el guionista les toma por idiotas a los que hay que guiar de la manita de una secuencia a la siguiente.
Explicaciones que, además, suelen ser bastante torpes y cuya única utilidad es eliminar la magia o el terror de la cinta ... (Como le pasa a Lucas, o a todas las Underworld, o a las diversas "Crónicas" de ésto y de aquello, etc ...)

3)La idea de hacer una historia dentro de otra historia. No es una novedad pero si algo muy intersante cuando sucede en un largometraje (No "subtrama" sino historias realmente dobles), más aún si sucede en dos (Cartas desde Iwo Jima y Banderas de Nuestros Padres), y aún más si las obras no tienen nada que ver, como sucede con Cloverfield y su referente.

Y ya está. Es poco, pero es suficiente para hacer una película decente, que se queda más cerca de Lovecraft que de Arthur Machen. ¿Porqué? Porque Lovecraft tenía muy buenas ideas, como las tiene esta película, pero las estropeba por pretencioso (ídem). Un poco como el final de los libros de Stephen King, en los que suele lograr cargarse todo el trabajo previo.

Machen sin embargo, en su pequeña obra "El Terror" (De la que la parte más floja es la explicación, afortunadamente corta y probablemente marcada por las circunstancias históricas) consigue meternos el miedo en el cuerpo bajando el Terror, con mayúsculas, al mundo de lo cotidiano.

Para lograr verdadero terror ni siquiera se enseña la causa -el bicho- ni, mucho menos, sus versiones pequeñitas derrotadas ... eso ha sido un error garrafal y una ruptura de planteamiento.

En resumen, Cloverfield es Lovecraft (Efectivamente, Cthulhu suelto en Manhattan, como dice otra crítica) pero la historia es tan pequeña, tan íntima (Y sí, tan estúpida) que casi se aproxima a Machen. Podía haber sido mucho más, pero también mucho menos. Y quién piense que es muy fácil hacerlo mejor, que escriba un guión ... aunque no sin antes leer "Como convertir una idea genial en un guión que ni fú ni fa".