Un producto cinematográfico realmente extraño: mezcla de película de capa y espada, comedia romántica, culebrón mexicano y entre todo ello el mito de Don Juan. La verdad es que el argumento es rocambolesco, pues nadie puede creerse que un tipo se pasee disfrazado del Zorro por la ciudad y que la gente lo vea normal. Así como nadie debería creer que cualquier mujer se preste a ser seducida porque le dicen semejantes sandeces en un restaurante mientras espera al camarero. Da risa, pero es por vergüenza ajena. Johnny Depp, por sus rasgos, es ideal para papeles de latino y sería un fantástico D'Artagnan, pero de aquí a presentarlo como el mejor amante del mundo... (es ridículo, no le va nada). Y en lugar del romanticismo que vende la película, yo hablaría en el mejor de los casos de atracción física pura y dura entre Johnny y sus sucesivas (que romanticismo es otra cosa, señores).
El interés de la película, desde mi punto de vista, está en poder ver a Marlon Brando aunque esté mayor y muy voluminoso. Es que es un monstruo, capaz de proporcionar interés a algo como esto, con cada gesto, con cada mirada; a pesar de estar ya fatigado de la vida, continúa conservando ese "algo", que algunos tienen y otros nunca tendrán. Me gusta la escena final del baile con Faye Dunaway. También es muy divertida la escena en donde mira por la ventana como Johnny Depp baila con el enfermero negro.
A destacar también la música, alegre, maravillosa, ¿qué sería de la película sin ella? La canción de Bryan Adams ("Have you ever really love a woman"), es una genialidad. Además con Paco de Lucía como guitarrista. Un diez, me encanta la música de esa canción y la letra es muy muy bonita. Eso sí que es romántico...

Le doy una buena puntuación a esta película por lo que supuso hacerla en aquellos tiempos, y sobre todo comparándola con lo que se hace actualmente en el cine español. Muestra la vida de Alfonso XII desde el momento del entierro de la reina Mercedes, y es bastante rigurosa en los hechos históricos que se narran.

Evidentemente, las conversaciones entre los reyes no las conocemos, pero sí el resto de anécdotas que se narran (las salidas nocturnas del rey, las visitas a los enfermos, el pañuelo rojo...). Nos acerca a la manera de funcionar del gobierno en aquellos tiempos, a las presiones para conseguir un heredero, y de refilón se nos habla de conflictos como las guerras carlistas o la guerra de Cuba.

Las interpretaciones son interesantes: Vicente Parra, muy bien acertado en su papel, y realmente si lo comparamos con algunos retratos de Alfonso XII, el parecido es asombroso; también destacaría a José Marco Davó como Cánovas del Castillo. Sin ellos dos, realmente quedaría todo muy deslucido. Las escenas entre los reyes cansan un poco, por redundancia del dramatismo de la reina, pero creo que la pequeña parte de historia que se narra está seriamente representada: la ambientación, el vestuario...

Por cierto, que en la primera visita del rey a Cristina en Francia, me pareció reconocer el Palacio Real de Pedralbes. Tendría que comprobarlo, pero apostaría a que lo es.

Tenía reparos en ver esta película por lo sórdida y sangrienta que pudiera ser, pero teniendo en cuenta que el actor principal había recibido tan buenas críticas, decidí que merecía la pena verla, y así ha sido. Sí que es sórdida y violenta, pero salvo en una escena, se deja ver bien, no se regodea en la violencia. A mi entender la violencia mostrada es necesaria para que el film mantenga su fuerza argumental. Claro que sin Joaquin Phoenix esta película no sería lo mismo. Él le da una vida inmensa al personaje, le aporta toda la personalidad y la fuerza. Creo que merecería un premio Oscar por todo el esfuerzo realizado, y espero que lo gane. Tengo que decir que, aunque es un film dramático, Phoenix hace tan bien el loco que hay veces que hasta te ríes dentro de lo violento de la situación, porque ya hasta comprendes su punto de vista, y otras veces sientes lástima por como es tratado. Consigue que un personaje así resulte hasta simpático ¡es increible!
Así que, aunque es totalmente diferente a las películas que suelo ver, volvería a ver Joker, sin ninguna duda, y pienso comprarme la banda sonora si incluye dos de las canciones que salen en el film, que son preciosas y sorprendentemente no desentonan con el argumento: "Smile"y "That's life".

Hermosa recreación de la obra de L.M. Montgomery y de su personaje Anne of Green Gables, que le dio fama mundial. Aquí se nos presenta la continuación de la historia de la joven Ana, que se abre paso en el Canadá de principios del siglo XX, donde las mujeres comenzaban a cursar estudios superiores, trabajando como maestra y sufriendo las decepciones que todas hemos sufrido en nuestro trabajo. Sin embargo, ella es animosa y trabajadora, cree en lo que hace, y sus esfuerzos se verán coronados por el éxito. Todo ello narrado en el ambiente pastoril e idílico de la primera entrega y con nuevos personajes. En resumen, una delicia para los amantes de este tipo de historias. Les encantará.

Esta película refleja toda la estética del Londres de los años sesenta a través de las aventuras con las mujeres de un donjuán elegante y educadísimo, pero todo un sinvergüenza, sin responsabilidades y sin moral, que bajo una fachada de despreocupación intenta esconder unos sentimientos que le molestan porque le harían la vida menos cómoda. Es por tanto, un ser sumamente egoísta, y me recuerda a ciertas personas, que por supuesto carecen de su encanto, porque no son Michael Caine ni visten con tanta elegancia. Este film supuso el despegue de la carrera de dicho actor, que debo decir que está fantástico y hace un formidable trabajo. Incluso es capaz de hablar directamente a cámara, vamos, que llena la pantalla.
Estremecedor el tratamiento que se hace del tema del aborto. Me ha gustado mucho el contraste entre la inmoralidad del personaje y su reacción ante ello, aunque le dure poco, en ese momento se da cuenta de que su actitud no es buena.
Totalmente recomendable, agridulce como la vida.