Cuando empezaron a echar esta serie, yo me enganché, y me encantaba, la historia es más o menos buena, una madre soltera con una hija que no sabe cual es su padre. Después, cuando acabó, estaba impaciente a que empezase la segunda parte, pero me defraudaron. Se había convertido en una serie de niños pequeños, todo era magia, hechizos, brebajes... Y un rollazo completo. Decidí dejar de verla y calificarla con un 5, de pasable.

Esta serie, esta basura, es una de las peores cosas que le han pasado a clan TV.No aguanto un capítulo entero sin dormirme (y mira que son cortos.) El caso es que la historia es, en sí, original, pero la usan de una manera estúpida y sin setido, y los personajes son cabezones (vamos, que dibuja mejor un jabalí que quien quiera que sea el dibujante, y, la verdad, prefiero no saber quien es.)La serie es tan repetitiva como sacar a mi perro todos los días, y vamos, es tan emocionante como ver a mi padre durmiendo la siesta, o incluso menos. Y eso por no hablar de la banda sonora. Vamos, que hasta mi gato compone mejor. El guión es absurdo y nada gracioso, más bien hecho para la gente que quiere llorar. Lo que quiero decir es que basta con ver tres capítulos para saber que va a pasar en el siguiente, yo, que quieren que les diga, me sé el argumento de memoria: