Este filme es producto de la mercadotecnia errónea que lo envolvió. Nos la vendieron como la Gran Película de Superman, cuando la verdad es que resulta ser un filme Más de Superman.
El guión no sólo peca de ostentoso, sino de incoherente. Los flashbacks no ayudan a la trama, sólo la enredan. Russell Crowe pudo haber sido el mejor Jor-el, pero la ridiculización de su personaje lo empuja a un abismo, Amy Adams se queda corta en una Louis Lane acartonada y poco femenina. Diane Lane y Kevin Costner hacen lo mejor que pueden con un par de personajes mal trazados. Michael Shannon es tal vez el villano más predecible y aburrido de los últimos años... Y Cavill... bueno, es mucho mejor que Brandon Routh, pero está muy lejos de ser tan bueno como Reeve. La fotografía es molesta (un 3D innecesario) debido a la mala selección de Snyder en la paleta de colores, sin mencionar la irritante movilidad de la cámara. Hans Zimmer deja atrás su innegable talento, para componer un score simple e insípido, tal vez el peor de su carrera. La secuencia final en la que se destruyen mil edificios y los puñetazos y vuelos en el aire se multiplican como moscas, es simplemente aburrida, exageradamente larga y poco original.
En resumen, Zack Snyder (que tiene talento para lo visual y no para lo narrativo) termina por destruir la ya de por sí mancillada reputación fílmica de Superman en colaboración con David S. Goyer, que escribe el peor guión que una película de superhéroes pueda tener. Atrás quedaron los tiempos de Nolan y Batman.

Desde la secuencia de créditos inicial sabemos de qué va a ir el filme; de un humor fresco, de un gran soundtrack, de una tonelada de acción imparable. Vemos un fastuoso producto que abreba de Dune, Star Trek y The Avengers. El reparto es el idóneo, aunque no deja de molestar el brevísimo papel de Benicio del Toro y de John C. Reilly. El humor se desborda constantemente de los diálogos aunque no alcanzan el nivel de Whedon. Visualmente es alucinante, aunque no es novedosa ni mucho menos. Digamos que la película cumple con todas las expectativas, viniendo de unos superhéroes que nadie necesitaba conocer. Un vehículo de entretenimiento placentero sí, pero que no rebasa al Capitán América 2 ni los mismos Avengers. Aunque, eso sí, tiene mucha calidad y muchas ganas de levantar la mano y gritar que Marvel es mucho más que The Avengers y Spider-Man.

Lacrimógena, manipuladora y sencilla. Es un filme hecho con los moldes de otros filmes. No es nada nuevo. Y sin embargo, es definitivamente, un gran film. Redmayne y Felicity Jones se comen la pantalla a bocados. Cátedra de actuación de parte de ambos muchachos. Una fotografía preciosista, una banda sonora bella y un diseño de producción correctísimo. Los actores de soporte están a la altura, aunque quizás Emily Watson tiene pocos minutos en pantalla. Es un filme que no aporta nada nuevo, que está hecho a la usanza, pero su inmenso acierto es hacer bien todo lo que ya hemos visto.

Un film bien rodado, con una cámara dinámica y un Scorsese talentoso.
El problema es el guión, pues es muy flojo e incluso, simplón. Los personajes son planos (excepto la maravillosa Bertha), pero las actuaciones convincentes.
Bien hecha, cumplidora a medias. Se pudo lograr mucho más.
Cabe resaltar el tratamiento violento y sórdido que Scorsese le imprime a la película.

Un filme intenso. Eso es lo que es. Maravillosamente bien hecho. Tal vez le sobran unos diez minutos, pero es una película que demuestra que los thrillers no tienen que ser llenos de acción imparable e inverosímil.
El maestro Hitchcock nos regala una pieza excepcional.
Actuaciones excelentes, una cámara esplendorosa (los close-ups son espectaculares) que retrata a la perfección la perspectiva del protagonista.
Llena de suspenso, tensión, humor existencialista y originalidad, La ventana indiscreta es un logro cinematográfico indudable.
Sin esta cinta no existirían directores como DJ Caruso, M. Night Shyamalan, David Fincher y muchos otros.
El thriller, las cintas de suspenso y acción estarían vacías sin la herencia de esta joya.
IMPRESCINDIBLE