Es muy poco creíble que una niña que vive sola en el bosque por muy criada por animales que este, pueda no solo sobrevivir desnuda con las temperaturas y clima del norte, si no correr como un animal salvaje, conseguir evitar a las personas del pueblo con tanta agilidad, y sobretodo y fundamentalmente... ser una asesina en serie tan bestia con el sigilo suficiente para entrar a su antojo en la casa de la familia protagonista sin ser descubierta, porque destaco que realmente tenemos ante nosotros una niña salvaje mas cerca a los animales que a las personas como para utilizar el sigilo como arma, además sabe evitar cepos y trampas que los pueblerinos le preparan.

De todas maneras, tampoco creo en fantasmas, zombies ni demás seres del terror que veo y disfruto en contados trabajos del género.

Cuando creías que algo estaba totalmente explotado, vienen estos Tailandeses y te demuestran que no, que ellos pueden hacer lo mismo de siempre, sin intentar cambiar nada, el argumento se resume de esta manera: Un protagonista a cuyo padre matan siendo él un niño y adopta un monje budista, tiene un par de hermanas y un amigo, todos trabajan juntos en un local de pelea con turistas occidentales, llega un americano que quiere comprar el local y como el dueño no quiere vender mandan a matones a obligarle, el dueño es un viejo luchador que a enseñado a pelear a todos (véase las chicas, el prota y su amigo tonto), así que tenemos a los jóvenes defendiendo el negocio del pobre viejo con un protagonista sin padre y sed de venganza cuyo asesino trabaja para el americano.

Luego los personajes, con los que tampoco se han partido la cabeza, las dos hermanas, que personalmente no soy capaz de diferenciar una de la otra, tienen una actuación en la cinta tan espectacular que si no estuvieran no te darías cuenta, su amigo fuerte guapo tonto y extrovertido que intenta ligar con todas las chicas pero ninguna lo quiere, el maestro viejo retirado terco como una mula al no querer vender su negocio por mucho dinero que le ofrezcan y el monje budista que le pide que no pelee por nada y los malos malosos.

Junto a esto, una peleas muy pero que muy malas, grandes primeros planos de las caídas tras los sutiles golpes que se dan, si, de esas de tirarte de culo, o patadas y golpes iguales de realistas que los de la lucha libre (de esos de no te vaya a ser daño, mejor ago como el que te doy, pero no te doy). Resalto la gran venganza del final de la película, la pelea mas espectacular obviamente, cuando el malo asesino de su padre tiene medio muerto al buenazo del prota y este tras recordar como mato a su padre despierta y mata al malo poniendo los puños hacia arriba para dar el en cuello del oponente que en ese momento volaba con intención de hacerle daño hacia el. por no hablar de las chicas peleonas, a diferencia de las películas de este tipo, en el que las tías tienen una agilidad increíble y se las ve que saben pelear, estas dos parecen haber salido de un pasaje de modelos y son incapaces de levantar la pierna mas alto que Michael Moore.

Lo más importante que quiero decir es que me parece horrible que un miembro de las fuerzas de seguridad emplee su tiempo laboral, que es pagado por los impuestos de todos los norteamericanos, para desarrollar su hobby de matar chicas tras un exhausto examen de suciedad en los dientes, orejas y nariz.
También resalto la ineptitud del asesino ya que su procedimiento esta mal elaborado: Secuestra vestido de policía con su compañero de curro al lado, lleva a las chicas a una nave y deja a este fuera durante a mi parecer largas horas, ya que en el interior de su guarida, interroga, examina y mata, para luego pesar y medir al cadáver, acostarlo en la cama, manosearlo con la bragueta desabrochada y tener un gatillazo. Además mientras las chicas mueren con una inyección el ve la misa por la tele.
Finalmente sale del almacén con una maleta pesada y sin chica ante la mirada escrutadora del poli bueno. No podría ser más evitende, en este punto, pierde realismo.

Los compañeros se dividen en dos grupos, los que estuvieron en la guerra con él y lo defienden aún sabiendo su hobby y sus compañeros de calle que lo denuncian. Los primeros se dedican a dar palizas a los segundos por chivatos. También golpean sin razón aparente a los familiares de las víctimas antes inclusive de saber que el asesino es su compañero.

Tras cosas de casa, en la que solo trabaja Carl Winslow y aún así tenia un adosado que lo flipas, esta peli me terminar de demostrar que los polis en EEUU cobran una pasta, no veas el yate que se calza el malo.

El maquillaje de las chicas zombie es colosal, un poco de sombra de ojos y listo, con unas gafas se oculta su condición. Aunque en cierto momento y con un espejo se da a entender que realmente si están podridas... eso no evita que los tíos se la coman con los ojos, aunque finalmente lo comido termina siendo sus penes y sus lenguas. En lo personal, estas chicas quieren ser normales, buscar gente como ellas, bailar, e integrarse. Lo consiguen tras su venganza copando todos los puestos de la policía local, el guionista no deja de sorprender en ningún momento.

Un par de escenas especiales son las de la conversación del asesino con su padre (que es cura) y la de la visita del Psiquiatra, sin desperdicio alguno. Como dato fundamental recordar que los zombies deben comer hamburguesas.

Finalmente para hablar de la escena de la venganza final solo puedo decir una cosa: indescriptible, no existen palabras para explicar tanto la banda sonora como la persecución y final deselace.

Este es un film que hay que ver al menos una vez en la vida.