Sólo la música, y para eso, más vale comprarse el disco. Si lo que queremos es ver videos de The Beatles, la película no nos defraudará. Un guión absurdo, muy malas actuaciones (menos The Beatles que hacen de si mismos).
Bueno que a los genios se les perdona todo…pasable (y es solo porque las canciones, ni quién lo dude, ya son obras de verdadero arte).

Si te gusta ver buenas películas, debes ver El Padrino. Si te gustan los actores que nacieron para interpretar a sus personajes, tienes que ver El Padrino. Si lo tuyo es la violencia totalmente justificada, el amor por la familia, las obras de arte, los dialogos de antología y quieres hacer un buen negocio...tienes que ver El Padrino; ¿lo entiendes...?. Puede ser que un día me lo agradezcas. El cine ya no fue lo mismo tras este magistral trabajo de Coppola y sus muchachos.
Una cosa, eso sí, te hago el favor de recomendarte este negocio (arriéndala, comprala si puedes)como una atención desinteresada, solo te pido a cambio tu respeto. Puede que algún día necesite que me devuelvas el favor aconsejandome acerca de una obra del séptimo arte que no nos defraude ni hoy ni en cien años. Eso es todo cuanto te puedo ofrecer; si después de estas palabras te decides y ves la película muchas veces, solo procura que parezca un accidente.

Películas como Pulp Fiction provocarán siempre todo tipo de reacciones y eso en términos mediáticos siempre es una buena señal. Al momento de dar una opinión siempre es saludable mantener latente el respeto por quienes consideran este tipo de películas como obras maestras y también es saludable prestar atención a quienes no las valoran tanto. Me siento parte de los que consideran que hasta el momento ésta es la mejor película de Quentin Tarantino; cuenta con un derroche de genialidad, humor negro y violencia propia del folletín (cosa que la película nos aclara desde el comienzo). Como escribió alguien alguna vez, este tipo de películas no son para analizarlas tanto como para disfrutar lo disparatado de sus situaciones; en este caso, las situaciones (magistralmente interpretadas por un sólido conjunto de buenos actores) son el único hilo conductor necesario, no hay para qué darle más vueltas. Desde mi perspectiva no es la mejor película de los 90, pero sí marcó las bases de una nueva forma de hacer cine. Tarantino es el más comercial de los directores independientes, es un gran armador de historias (aunque su discontinuidad en el relato ya sea un poco recurrente) y esto no resiste demasiadas discusiones. Estamos ante uno de los nuevos clásicos del cine.

Interesante ejercicio artístico; muy buena música, atractiva animación, a ratos entretenida. Tras “Qué noche la de aquel día”, la segunda película acerca de The Beatles que vale la pena ver.
Una anécdota: al comienzo del proyecto, a los integrantes del grupo no les agradaba la idea de ser dibujados, pero tras ver la película hasta aceptaron aparecer al final de ésta.