Me decepcionó muchísimo. Colin Farrell no consigue transmitir la fortaleza de un líder histórico de la importancia de Alejandro. Stone se centra deliberadamente en la ambigua sexualidad del personaje y lo que es una anécdota pasa a ser la parte más importante del film. La historia transcurre en un segundo plano. Se hace larga y tediosa. Anthony Hopkins y Val Kilmer están muy bien y elevan la puntuación general de la película. Lo mejor, la escena de los elefantes. Sensacional.

Pero vamos a ver, se supone que esta es una película de miedo y aquí la única que está de miedo es Jennifer Connelly. A los cinco minutos ya estás aburrido de la niña y de los problemas familiares de los personajes. Aguantas porque esperas que, en algún momento, empiece la tensión. Pero no aparece por ningún lado. Con suerte, te puede dar un susto el acomodador. Allí de pronto aparece una gotera que sí, es cosa mala, pero tanto como para aterrorizarte, pues no sé. Si queréis pasar miedo de verdad, ved la gala de Miss España. Brrr, aún lo pienso y se me pone el vello de punta.

Hermosa, intensa y tremendamente original. La primera vez que se enfrenta uno a Amélie, se siente cautivado por su color, por su vida, por su mensaje inevitablemente optimista. Es una oda a las buenas personas, al amor inocente, a las pequeñas cosas. Una reivindicación del derecho a soñar en un mundo cada vez más vacío y cruel. Revisitarla es un auténtico placer y dificilmente se puede contener la sonrisa. Pero, ¿por qué hacerlo? Simplemente maravillosa.

Clint Eastwood firma una extraordinaria película con grandes interpretaciones y un clima delicioso. Resulta admirable que consiga hacer verdaderamente interesante la historia de una muchacha humilde que quiere llegar a ser la campeona del mundo de boxeo. Million Dollar Baby es un retrato amargo del sueño americano, una hermosa metáfora en la que el éxito va unido al fracaso y la vida a la muerte.

Trepidante, como suelen ser todas las películas de Michael Bay. Y además, no sale ni una sola bandera americana. Entrañable colaboración del siempre acertado Steve Buscemi. Si te gusta la acción y no te importa demasiado la presencia de la neumática y artificial Scarlett Johansson, no te la puedes perder.