Obra maestra de Vittorio De Sica. Película olvidada para la gente de a pie, pero que guarda una gran estela según pasan los años. Para cinéfilos y para las personas con el corazón roto por amor.

El jardín de los Finzi-Contini, una familia judía de alta alcurnia de Ferrara, es lugar donde se reúnen los jóvenes de buena cuna para jugar al tenis. Allí coinciden él y ella, desde que eran niños (ahora son jóvenes veinteañeros) y las cosas son más complicadas en todos los sentidos. Y se irán complicando con la venida del fascismo (nazismo).

Un conmovedor drama, un torbellino apasionado de amor y desamor que resalta por entre aquellos aciagos días para los judíos. No se la pierdan, aunque no esté de momento en ninguna plataforma. Búsquenla y adéntrese en aquel jardín ya marchito.

Llama Neeson y Lesley Manville hacen frente al cáncer de mama. Con un ritmo pausado, tranquilo pese al incómodo y apabullante tema del cáncer. La fotografía es impecable. Y las interpretaciones, geniales. Liam en su papel de marido cumplidor y Lesley haciendo frente a su drama particular.

Una buena película sobre un tema mil veces tratado, tan presente en nuestras vidas. Con mucho acierto. La música lenta, acompaña con precisión y gusto en toda la película.

Mi primera película palestina vista. Buenas sensaciones gracias a un guión bien elaborado y papeles bien representados. Con una base relativa al conflicto palestino-israelí, a partir del cual surge una relación shakesperiana entre un palestino (montesco) y una israelí (capuleto), con el incómodo añadido que ambos están casados.

No se la pierdan.

Película de aventuras con retazos de “Tras el corazón verde”. Un tipo de cine lleno de diversión que se echa cada vez más de menos. El caso es que poco tiene de parecido con la original “Jumanji” salvo por que aparecen animales salvajes. Esta vez no son los animales los que visitan nuestro mundo sino una panda de adolescentes los que van al mundo de Jumanji, donde se reencarnan en personajes del videojuego. Todo lo demás, una cadena de locas aventuras con toques de humor cuyo desenfreno placentero llegará a un The End, o quizá no...

Con el listón de obras maestras de sus predecesoras y partiendo de esta base, había que arriesgarse. Y no llegará a igualarlas pero sí que al verla deja un halo con olor a Star Wars original, metiendo nuevas premisas como la carrera, espectacular en sus formas, o los habitantes de Naboo con un genial secundario enternecedor.

Actores potentes con un Liam Neeson que lleva gran parte del peso de la película, Ewan McGregor como aprendiz, Natalie Portman como Padme y el pequeño Anakin en torno a quien gira esta primera parte de la nueva película y que seguramente vaya ganando importancia a lo largo de las próximas dos secuelas.

Nota: **** (sobre 5)