Ninguno de los dos actores está a la altura, no se les nota disfrutar el papel, no se lo creen, y el romance entre ellos es... inexistente, nula química. Realmente Rihanna hace un papel más convincente que cualquiera de ellos. Ethan Hawke podría darle más empaque, pero su papel es pequeñísimo, como el de John Goodman. Parecen puestos ahí para poder figurar como reclamo, no para dar sostén a sus personajes. Clive Owen sí tiene bastatne más metraje y su papel es quizás el más convincente, pero ni por esas.

A partir de dos personajes tan planos la historia es difícil de encarrilar, y más cuando es una historia muy lineal que no te sorprende en ningún momento.

La parte del imaginario es lo único que se salva, un poco, en la película. Realmente esperaba más en esa parte, esperaba una locura de cosas entremezcladas, pero estando esa parte bastante mejor, no alcanza a salvar una película que se queda sin alma.

Quizás como destacable, en negativo también, es el guión. Los diálogos parecen tener 35 años, parecen de principios de los 80, y el público ha evolucionado mucho desde entonces. Me resultaron forzados, sin chispa, sin humor, sin pasión...

He salido de ver esta cinta con sensaciones encontradas. Muy probablemente porque llegué con expectativas demasiado altas.

Los agujeros en el guión me parecen excesivos: por ejemplo, el poco "flipe" de niños que jamás han estado en la civilización con la primera visión de esta; la enorme e irreal capacidad de unos niños que son superatletas, saben varios idiomas, física avanzada, y son perfectamente capaces de cazar sus propias presas; o la increíble incorruptibilidad del cuerpo de la madre que está perfectamente hermoso y no se ha podrido después de 6 o 7 días desde su muerte.

Por otro lado, la comicidad me parece escasa (daba para muchísimo más) y la profundidad filosófica un poco superficial al tocar varios temas en los que tampoco profundiza. Aunque el planteamiento puede parecer socialmente subversivo, al final no lo es, o al menos el autor no se sitúa claramente a favor de la subversión.

En cambio me gusta que una cinta comercial se atreva a tocar cosas generalmente tabú como el hablar de muerte a los niños, la ridiculización de los centros comerciales, lo absurdo de las religiones organizadas, e incluso mostrar con cierto "desprecio" a los primos civilizados.

Me falta un poco de todo, me falta más drama, más humor, y más profundidad en general para que la cinta sea lo que yo esperaba ver. Aún así, bastante por encima de la media general y una película en la que sales pensando.

A destacar la fotografía, con varios momentos de sol frontal y bajo contraste, y la música. Ambas con un toque muy indie.

Todos los actores me parecen fantásticos en sus papeles. Echo de menos más metraje para cada niño por separado. Pero también es cierto que echo de menos tantas cosas, que si hiciesen la película para mi duraría tres horas.

Estoy empezando el revisionado, después de haberme maravillado con el primero, en un intento de ser objetivo.

En todos lados donde lees sobre la serie, el análisis que se hace son las mil referencias cinematográficas y la ambientación del 83.

La pregunta que me hago es, ¿Y los nacidos en los 90? ¿La disfrutarán también? Y en el segundo visionado mi respuesta es que si logran superar el hándicap estético (la moda de la época resulta desagradable a quienes no la vivieron, como casi toda la moda de épocas no-vividas) y musical (tres cuartos de lo mismo, la música puede ser complicada para los nacidos de los 90 en adelante), la respuesta es un indudable sí: la serie se sostiene por sí misma sin las referencias: buen ritmo, punto adecuado de oscuridad argumental (y, también hay que decirlo, fotográfica), muy buenas interpretaciones (especialmente la de Winona Rider y la de "desdentado"), y un juego de intriga bien llevado y administrado durante los 8 episodios. Incluso el epílogo que deja un par de guiños claros para la segunda temporada, cuando parecía que ya no quedaba nada abierto para continuar en el futuro.

Incluso si no te has criado entre los clásicos (yo incluiría Alien y Poltergeist, además de los citados por todo el mundo, incluso Super 8 es otra referencia en algún detalle) porque naciste demasiado tarde, la serie sigue siendo una gran serie.

Es como un enorme cóctel con un montón de ingredientes distintos, quizás los conozcas todos pero el conjunto es un sabor nuevo y original con un sabor propio.

Le habría dado el aprobado de no ser un título engañoso. El Ragnarok es el fin del mundo nórdico, una etapa de destrucción donde incluso morirán los dioses. Con ese título uno pensaría en una película de aventuras fantástica clásica, con mucho decorado y mucho maquillaje, y nada más lejos de la realidad (añado algo en los spoilers).

Lo mejor, los espectaculares paisajes noruegos.

Creo que tiene todos los puntos comunes de este tipo de productos. Niña perfecta, padre viudo, humor que no te saca ni una sonrisa... Bueno, sí tiene algo gracioso, la protagonista se parece a Fernando Alonso.