Mel Gibson ha vuelto a encontrar la excusa perfecta para llenar la pantalla de sangre.
Sin llegar a nada, no deja de ser una película entretenida, carente de guión, para pasar a la acción pura y dura. Y que no tiene pudor alguno en mostrar las escenas más fuertes sin remordimientos.
Su violencia no deja de ser una parte más de la película. Al igual que un final "made in" Indiana Jones.
Conclusión:
No convence, pero entretiene. Es sangrienta, pero no excesiva. Típica, pero bien hecha.

Me parece una película sublime, con todo tipo de contenidos para hacer de ella una de las grandes. Acción, intriga, suspense, adrenalina 100%
Su guión te dejará boquiabierto. Hay que verla dos veces para darte cuenta de su doble guión, para exprimirla aún más.
Sin duda alguna, un grandísimo film que nadie debe dejarse escapar.
Película de culto.