De vez en cuando me da por volver a ver pelis que hacía años que no veía. Que me pillaron en plena adolescencia y me gusta verlas con los ojos del treinta-añero que soy. Para ser sincero no recuerdo que me pareció esta peli en su momento, quizás con sus tiros y sus puñetazos me llamese algo la atención. 20 años después os aseguro que es un producto infumable hasta para los seguidores del señor de difícil apellido. Vaya paquetazo con MAYÚSCULAS. El argumento es tan malo e infantil que me daba hasta risa. Venga chaval, de buenas a primeras un coleguita te dice que te hagas el muerto y le ayudes a resolver un caso en el que han asesinado a su hijo...y este va y pica. La acción es pésima, cuatro carreras en coche y de las malas, tres tiros por aquí, tres tiros por allá y lo demás lo rellenamos con puñetazos y una chica mona.

Lamentable de verdad la coreografía de las escenas de acción y las peleas, los que van siendo asesinados pésimos actores, escenas muy falsas y que son un insulto al espectador que en su día pagó por una entrada al cine.

Lo dicho, me imagino que el pobre Arnold en esta época estaba dándose a conocer y pillaría cualquier trabajo, sino, no entendería como lo engañaron con esta tremenda basura.

Cuando terminas de ver esta película, te quedas raro, incómodo, con la mosca detrás de la oreja. Algo no me ha llenado o solo a mí me lo parece.

Me enseñan una historia interesante. Por un lado tenemos a un grupo de jóvenes jugadores de waterpolo húngaros que se están preparando para las Olimpiadas, su mayor sueño es ganar el oro para su país. Y por otro lado se nos presenta a un grupo de manifestantes estudiantes que hacen todo lo que está en sus manos por recuperar un país en mano de la todopoderosa nación rusa.

En su comienzo tenemos un partido de waterpolo que te hace creer que se trata de una peli más de alguna azaña deportiva. Pero nos vamos adentrando en una historia más oscura, más dramática, donde el deporte pasa a un segundo grado y la guerra consigue eclipsar ese sueño de la medalla de oro.

Timur Bekmambetov nos presenta un nuevo producto comercial al 100% el cual posiblemente reviente las taquillas, aglomere una gran cantidad de espectadores en las salas en la que se expone y llene de bastantes ceros la cuenta corriente del director. Pero la cual veremos una vez, posiblemente dos...y no más.

Lo único nuevo que nos ofrece son unas escenas muy trabajadas, espectaculares en mi opinión y algunos nuevos efectos especiales. ( ver spoiler 1 )

Un argumento un poco repetitivo, simplemente se cambia la temática. En este caso un grupo perteneciente a lo que se conoce como LA FRATERNIDAD DE ASESINOS, la cual interpretan unos mensajes en unos linos de hilo y a partir de ahí, ejecutan a la persona cuyo nombre aparezca. Dentro de este marco encontramos a todos los personajes con su rol bastante determinado:

* El chico tontaina, deprimido y cuernudo, cuyo curso acelerado lo convierte en una especie de personaje de Matrix.

* La chica guapa, dura y que no deja ver sus sentimientos. Encargada de instruir al novato.

* Los compañeros cabrones, aquí hay donde elegir, el rubio con cara de pasmado cuya misión más peligrosa es ostiar al chaval cuando lo tiene atado. Tenemos al gordo cliente de McDonalds amante de los cuchillos.

* El asesino traidor de la Fraternidad, que por lo visto es mejor que todos ellos que llevan años entrenando, sin embargo hay que traer a un nuevo para que acabe con él.

* Y por último el jefe, el cual se limita a mirar de las alturas, a dar órdenes y a inventar nombres para ejecutar.

Eso sí el guión no es para tirar voladores, pero todo se tapa con una gran cantidad de escenas de acción y efectos especiales, rodeado de una buena banda sonora. Y se afloja un poco el tema, tranquilos, que ahí estará la Sra Pitt para enseñar su lindo culito.

Normalmente cuando nos hablan de hacer un viaje nos invaden conceptos como alegría, felicidad, excitación e impaciencia.

Y en esta historia se nos cuenta un viaje...un largo viaje de 6 días. Pero aquí no existen comodidades, ni un servicio de azafatas, ni unos asientos cómodos y mucho menos un servicio de catering donde saborear un exquisito manjar, ( sino voláis en iberia claro ).

El film no ofrece nada nuevo en lo que concierne al tema del holocausto, quizás nos la presenta desde otro punto de vista para el espectador...pero menos excitante visualmente. En muchas ocasiones el guión camina de forma cansina y el extenso metraje se podría resumir en una magnífica hora y media. No había necesidad de alargar innecesariamente la historia para no conducirla a ningún lado. Gracias a los flash-backs te sacan de la rutina de las escenas en el mismo escenario, de agradecer sinceramente.

Sin embargo hay muchas cosas a destacar en el film, que os relato en el spoiler.

Lo cierto es que con ésta peli me encontré más perdido que Wally en el frente Atlético, ni idea de lo que quiere contar el director, ni hacia donde quiere dirigir al espectador.

El inicio es espectacular, promete muchísimo y esperas una historia contada en flash-back, pero no, arranca ahí. Todo es como muy forzado, si, estamos ante posiblemente algo que ocurre cada día en Estados Unidos, pero es la forma de contar todo lo que me descoloca por completo. Porque en todo momento esperas que ocurra algo, que cambie la dinámica tan plana del relato, un hecho fortuito que nos ayude a comprender algo o simplemente que me saque de la monotonía.

En fin, prometía mucho y se quedó en nada, me sorprendió hasta la forma de finalizar.