No entiendo las buenas críticas, debo ser alienígena. O, quizá, sea el morbo que parece despertar Strawberry... o las breves escenas de sexo, o los sueños de poseer un "red rocket" como el del prota de algunos...

Yo me dormía a chorros y no debía ser la única, porque 2 personas abandonaron la sala a la mitad de la película. Hay un leve atisbo de comedia, que se hunde al segundo en el tedio general. El personaje es no sólo infame, sino absolutamente carente de escrúpulos, pero cobarde y pusilánime, que se conforma con vivir de otras personas no señaladas por la fortuna, hundiéndolas más en la mierda si es preciso. Un jeta con escasa gracia, en un entorno deprimido, que fracasa estrepitosamente en Hollywood y vuelve, nunca mejor dicho, con el rabo entre las piernas, a chupar la poca sangre que queda en su pueblo.

No sé por qué decidí darle otra oportunidad a Sean Baker, ya que The Florida Project me pareció espantosa, con esa madre estridente y enervante, que ni Willem Dafoe es capaz de elevar a categoría de pasable...

No malgastéis el dinero, a menos que queráis echaros una siesta al fresco...

Llama la atención que la directora nos narre su supuesta experiencia personal de un modo tan frío, incapaz de despertar emoción y empatía por la protagonista, a pesar de contarnos una historia tan terrible. Su maniqueísmo y situaciones repetitivas la hace poco creíble e incluso aburrida. Lo siento, pero no me ha llegado

Visión un tanto suavizada acerca de la persecución de la homosexualidad (sobre todo, masculina) durante el franquismo.

Hay algunos cambios de postura un tanto bruscos, sin progresión. El final resulta un tanto forzado y hay poca o ninguna crítica.

Pero es una película que, lamentablemente, continúa siendo necesaria en estos tiempos regresivos, en que las sombras del pasado amenazan con volver. Buenas actuaciones y buena dirección de actores, que logran el tono justo, sin estridencias (lo que no es fácil)

No entiendo las buenas críticas y comentarios. Me pregunto si será porque refleja los sueños de muchos, alienados y deseosos de una realidad paralela para escapar de su triste realidad sin hacer el esfuerzo de enfrentarse y luchar en ESTE plano, el único que existe, por muy lamentable que resulte.

Una especie de super héroe imposible, un anciano increíble y un amigo invisible a modo de genio escondido en la lámpara. La mujer, por supuesto, mera comparsa indefensa y admiradora de semejante engendro.

Hora y media de violencia y aniquilamiento de "malos" de traca, estúpidos, mal organizados, sin puntería -a pesar de disponer de las armas más sofisticadas y superarles 30 o 40 veces en número. Absurdo y ridículo.

He intentado pensar que tal vez fuera una metáfora del ciudadano actualmente dormido, explotado hasta el límite por un capitalismo feroz, que, harto de injusticia, despierta y arremete contra el sistema. Pero es que no le veo base, ni crítica social a modo de la magnífica V de Vendetta... nada en lo que apoyarme.

Ridícula y, francamente, cabreante para una mujer, aunque muchos hombres se piensen lo contrario

Una historia terrible y es muy encomiable que se de visibilidad a los desahucios, que se han producido por miles y que, incluso hoy día, cuando ya "no son noticia" para los medios de "desinformación", siguen produciéndose y dejando en la calle a los de siempre: a los desfavorecidos por las crisis, que no son más que "oportunidades" de enriquecimiento para unos pocos privilegiados, a costa de la ruina y la vida de muuuuuchos desgraciados que han osado confiar en un sistema cada vez más depredador.

Pero, por segunda vez en una semana, estoy de acuerdo con el Sr. Boyero (cosa que hacía tiempo no me ocurría) y debo decir, como él, que la buena intención no es suficiente para hacer buen cine. Y lo lamento profundamente, porque soy una gran admiradora de Juan Diego Botto (actorazo en teatro y persona muy comprometida). El guión falla, se nos ofrecen retazos, pinceladas, en un montaje caótico.

Penélope Cruz está fatal, en uno de los peores papeles de su vida. No hay ninguna química entre ella y su pareja, no consigue emocionarme, no me transmite ni un ápice de la angustia que debe sufrir su personaje, no me creo nada de ella. Luis Tosar está infinitamente mejor, intenta defender su personaje hasta el final, pero poco puede hacer con esos diálogos y ese guión.

Es una pena. A pesar de todo, hay que verla, hay que seguir defendiendo un cine comprometido y de denuncia, español... pero, por favor, elevad un poquito el nivel. Hay actrices muchísimo mejores que Cruz -y más baratas- que lo hubieran hecho mejor. Esa servidumbre a los reclamos de un nombre no favorecen para nada a una película, que ya parte con muchos remiendos.