Creo que esta serie pasará a la historia como uno de los fracasos más estrépitosos de la reciente televisión, y es que, a la barbie de mediana edad no se le ocurrió otra que apuntarse a la moda de las series feméninas, dado el boom que "Mujeres desesperadas" o "Sexo en Nueva York" han supuesto en medio mundo. Una mente privilegiada y visionaria la de esta creadora, que vino a deslumbrarnos con la televisión del futuro.

En su épica labor creativa, la única idea que rondaba por su cabeza era pensar alguna escena en la que pueda aparecer en ropa interior y saciar su ego, y ya en el primer capítulo tuvimos un plagio a "Mujeres desesperadas", cuando Ana se quita su abrigo de piel y se queda en ropa interior ¿les suena?.

Seguramente en el resto de episodios tendría planeado trabajar como sexy vigilante de la playa en Torremolinos o monitora de sado... Pero eso es algo que nunca podremos averiguar dada la cancelación de este delirante serial al tercer episodio, por eso pido a los directivos de Antena 3 que rescaten los capítulos grabados y que nunca se han emitido. Cuando la mente de la Obregón se pone a trabajar, mejor ponerse a temblar.

Lo mejor y lo peor: el rídiculo de Anita.

Estupendo duelo de terror en el que desde el escenario más simple se nos muestra la angustia y la impotencia de una persona que se encuentra en silla de ruedas y que sin comerlo ni beberlo se encuentra en manos de una auténtica desquiciada.

La personalidad de Kathy Bates se define poco a poco a lo largo del metraje, de modo que te va sorprendiendo poco a poco y resulta todo un aliciente descubrir lo despiadada que puede llegar a ser. La fabulosa interpretación de la actriz es el plato fuerte del film y nos hace creible su extrema obsesión.

Con alguna que otra escena que pone los pelos de punta, Misery es una inteligente película de escenas intrigantes y algo de terror psicológico, que con pocas fichas logra crear más tensión que muchas super-producciones, una auténtica lección. "Misery" es una de las grandes adaptaciones de Stephen King al cine que nadie debe perderse.

Lo mejor: El dosificado desarrollo del personaje de Kathy Bates.
Lo peor: Lauren Bacall no pinta nada

Una de las películas que marcó mi infancia, un clásico ya inmortal del maestro Craven que creó uno de los personajes más apasionantes y atractivos de la historia del cine, ruin y malvado poseía sus excelentes pinceladas irónicas e incluso cómicas que se potenciarían hasta el exceso en sus posteriores secuelas.

Para mí es imposible describir esta película con palabras. El guión puede que a día de hoy, en el que abundan las devaneos oníricos en muchas producciones, no nos resulte especialmente original, pero en su idea Craven invento el mundo de los sueños como reino de un ser que te persigue y perturba cuando se te cierran los ojos, del que estas a salvo cuando estás despierto, pero del que nada te puede salvar en tus pesadillas, es allí donde Freddy hace de las suñas, en un mundo irreal nada lo puede parar, hace lo que quiere, eres su presa y se divierte torturandote a su gusto, incluso se rie de ti ya que sabe que no puedes escapar.

Todas las escenas en las que vivimos las pesadillas de los protagonistas cuentan con una atmósfera sublime, difusa, oscura e imprevisible. A veces Craven juega a confundirnos entre lo real y lo ficticio pero es este ambiente subrealista lo que nos ayuda a situarnos. La banda sonora también merece especial atención, unas pocas notas que ya están en la memoria de todos los fanáticos de la saga, perfectamente coherente con el resto de la cinta.

La protagonista Heather Langenkamp no se ha prodigado mucho por el mundo del cine, por lo que siempre será la eterna Nancy, un personaje al que se entrega, con el que te identificas y coges cariños, Nancy nos hace participes de sus miedos, sufriendo una gran evolución (hasta física) durante el desarrollo de la cinta. . Su angelical personaje, con pelo pomposo y ropas rosadas contrasta con la ferocida de Kruegger por lo que sus duelos cara a cara con el punto álgido de la cinta.

En resumen, un clásico del terror, con escenas y frases memorables y un ambiente insuperable. Con Pesadilla en Elm Street nacio un mito, un icono, podiamos decir que el mejor villano que nos ha dado el septimo arte, un malo al que se le puede coger cariño.

Lo mejor: Fred Kruegger.
Lo peor: que Craven no dirigiera las secuelas.

"Primos" Raúl Arévalo y Quim Gutiérrez dirigidos por Daniel Sánchez Arévalo. 2011.

¿Quién dijo que en el cine español no se hacen buenas comedias? Daniel Sánchez Arévalo demuestra que cuando hay talento puede hacerse cine de calidad, que no sea sonrojante ni haga que el espectador salga irritado y despotricando de la sala. El director cambia el registro y ofrece su película menos compleja, quizá en un intento de acercarse al público (no en vano fue, en sus inicios, guionista de algunas series televisivas).

Aunque se trate de una comedia coral, Sanchez Árevalo continúa cuidando a sus personajes, les da corazón y consigue que tengan cercanía y verdad, y es aquí donde reside el encanto de "Primos". El director vuelve a contar con sus actores fetiche (Gutiérrez, Arévalo y De la Torre), los cuales demuestran su maginífico entendimiento. Muy interesante y nostálgica la similitud del declive del personaje de Antonio de la Torre y el fracaso del mundillo del videoclub, así como las referencias cinéfilas a lo largo del metraje.

Aprobado también en la parte feménina. Sorprende el carismático debut protagonista de Inma Cuesta en el cine con un cálido personaje, así como una excelente Clara Lago apartando su manido registro de niña sabelotodo.

El paraje cantábrico donde se desarrolla la historia le aporta un punto confortable, familiar y natural, además de bello. Un calor pueblerino que contribuye a la relación entre los personajes.
"Primos" es una buenísima opción, una comedia de calidad con algún transfondo dramático.
Correcto, correctísimo trabajo.

Lo mejor: La escena del barco pirata e Inma Cuesta.
Lo peor: es previsible en muchos momentos.

Sin lugar a dudas "The Hangover" ha sido la película sorpresa de este 2009, y es que, rebasa el nivel esperado gracias a unos protagonistas en estado de gracia y a una estructura que va desvelando poco a poco el enigma de ¿qué sucedió anoche?.

Esta despedida de soltero es divertida, salvaje y gamberra; pero, además, invita al espectador a formar parte de ella e integrarse en lo alocado del asunto. Hay que reconocer que la cinta tiene gancho, buenos chistes, sorpresas constantes, ... en definitiva, ofrece mucho más que el mero hecho de reirnos de las imbecilidades de cuatro idiotas.

Super blockbuster en los USA, con la alucinante cifra de 262 millones de dólares embolsados, aunque en España ha tardado bastante en estrenarse estoy seguro que será otro boom.
Con estos mareantes datos, es lógico que ya se esté hablando de una secuela donde estarán los mismos actores y director.

Una cinta que engancha y que nos mantiene atentos hasta los créditos finales, con unas ilustrativas fotos para no perderse, que desvelan parte de lo acontecido y que para sí las quisiera la Patiño.

Moraleja: las despedidas de soltero deben organizarse al menos una semana antes de la boda.

Lo mejor: alojarse en el Caesars Palace.
Lo peor: Heather Graham sale muy poco.