Meses esperando con ansia el estreno de esta peli y al final... para esto.

Demasiados diálogos vacíos y absurdos, demasiada charlatanería (igual Jesse Eisenberg se ha pensado que con su histrionismo interpretando a Lex Luthor iba a quedar a la altura del Joker de Heath Ledger, pero no, te quedas muy lejos, chaval), demasiados principios mal planteados y peor desarrollados, incoherentes y difíciles de empatizar. Y todo para llegar a finales apresurados. Que al final, tras tanta palabrería, te quedas con la sensación de que no se ha profundizado lo suficiente en las motivaciones ni en la personalidad de los protagonistas, con la sensación de que las cosas pasan porque tienen que pasar.

El principio de la cinta, muy lento, nos intenta explicar las razones de la desconfianza y el miedo que genera un personaje todopoderoso como Superman, que ha destrozado impunemente media ciudad en su lucha con el general Zod en la película anterior. Se comprende que Bruce Wayne le odie incluso, porque en la refriega resultó destruido un edificio donde trabajaban empleados suyos y hubo muertos. Lo que no se comprende es su doble moral: en su alter ego como Batman, se dedica a repartir estopa entre los malos, llegando incluso a cargarse a algunos sin el más mínimo remordimiento... Lo cual le hace merecedor de la inquina de Clark Kent, que le ve como un justiciero al que hay que parar los pies.

Dejando aparte el hecho de que unos y otros ven la paja en el ojo ajeno pero no la viga en el propio, lo cual ya de por sí te hace perder un poco de respeto a estos personajes, es bien sabido en este tipo de historias que cuando dos superhéroes se enfrentan, acaban siendo aliados al final. Toda la película no es más que una antesala de esa pelea, que todos sabemos cómo va a acabar. Y acaba sin sorpresas, pero tan mal resuelta que causa vergüenza ajena.

Como vergüenza ajena provocan también las numerosas incoherencias del guión, sobre las que no me extenderé, y lo apresuradamente que se resuelven otros conflictos, sentimientos y situaciones.

Si no has visto la peli pero has visto los miles de trailers previos, poco te pierdes. Porque antes de ir al cine, ya sabemos todos que, después de hacerse amiguitos, Batman y Superman van a luchar juntos contra Doomsday (el segundo clímax de la película; por cierto, qué bicho más mal hecho y cuánto han trivializado su origen y su propia existencia en este filme, con lo terrorífico que se ve en los cómics), que va a aparecer Wonder Woman y poco más, porque lo poco interesante que había que contar estaba, lo dicho, ya contado en los trailers.

Una pena que con una historia tan grande hayan hecho una película tan sosa. Bienvenidos a Hollywood...

Otra película encumbrada por la crítica y por los medios publicitarios que, al menos para mi gusto, no es tan buena como nos la han querido vender.

Visualmente impecable, buenas actuaciones, interesante sin más. Ni tan magnífica ni tan emotiva como dicen. No creo que pase a la historia del cine.

Casi 150.000 votos para darle algo más de un 8 de nota media a esta película. El viernes pasado tuve por fin la ocasión de verla y debo decir que estoy de acuerdo con esa valoración.

No deseo hacer ningún comentario grandilocuente hablando de crítica social o de nihilismo (palabra aparentemente obligada en toda mención a El club de la lucha, si es que quieres parecer guay) ni tampoco quiero ni puedo aportar nada nuevo a lo que ya se ha dicho por aquí. Simplemente deseo sumar mi voto a las valoraciones positivas que los usuarios de FilmAffinity han hecho de esta película, para que conste y para que sirva de referencia a todos aquellos que aún no la han visto y se están planteando hacerlo.

Hala.

Para gustos, los colores. Leo por aquí críticas muy positivas y otras bastante negativas. Yo me apunto a las segundas.

A mi mujer, a mi hijo y a mí nos gustaron las dos primeras películas de la saga y fuimos al cine con la esperanza de ver más de lo mismo. Al final, aunque a mi hijo le gustó (falta de criterio que achaco a su corta edad) mi mujer y yo salimos del cine muy decepcionados.

El comienzo de la peli es prometedor, pero poco a poco el guión va perdiendo fuelle hasta convertirse en una sucesión de topicazos, frases chabacanas sin sentido y personajes planos y carentes de carisma.

Vale que Riddick es un tipo duro donde los haya, pero sus fanfarronadas y sus frases lapidarias en esta película harían sonrojarse a Steven Seagal, Chuck Norris y Rambo.