Una película dura pero interesante. Cuenta la infancia de un niño y de la visión del mundo de éste y de la nueva pareja de su madre. El desarrollo psicológico del pequeño. Además podemos ir viendo una Rusia pobre que nada tiene que ver con ese idealizado paraíso comunista que querían vender.

Los actores son excepcionales y convincentes. Quizá el mejor papel el del niño, para ser tan pequeño hace un rol excepcional y difícil en general. Y lo hace con una calidad sorprendente en un pequeño. El "tío Tanjal" también hace un buen papel, y también la madre Katya. Los tres llevan perfectamente el peso del film y le dan más fuerza.

Una película que merece ser vista y que creo que mereció ganar el óscar cuando optó a él (no he visto sus competidoras) pero tiene una calidad indudable en todos los aspectos fílmicos.

Narrar esta historia sin hacer una feroz crítica de la iglesia es complicado, pero creo que este film lo logra, al menos en parte. Quizá la mayor crítica pero no feroz en exceso, sea la del imperante machismo en época de la película y hoy en día.
Narra una historia de lucha por el conocimiento de alguien a quien éste le estaba vedado.
En mi opinión relata bien la historia, la ambienta bien y uno puede imaginar que lo que está viendo es más o menos real.
Quizá podría haber hablado más de la historia de Europa para que se comprendieran mejor algunas pasajes, sobre todo los del papado y el sacro imperio romano que quedan muy difusos.
Tampoco cuenta demasiado bien, me ha parecido forzada, la historia de amor que existe en la película. Es creíble, pero no tanto.
El final es demasiado rápido, desde la elección al desenlace se sucede todo en muy pocos minutos y creo que podrían haber distribuido mejor el tiempo.
No obstante no se hace larga, al contrario.
Un valor añadido es sacar a la luz una leyenda muy curiosa y que yo creo que está olvidada o poca gente conoce. Leyenda o no es bueno conocerla y esta película ayuda a ello, lo cual es muy bueno.
He pasado un rato agradable.

Por una parte siento que le sobra metraje. Sí, mucha presentación y tal pero luego de lo que es la historia central apenas hay nada. Hay mucho ruido, algún que otro susto pero no mucho más.
Las historias de los personajes que quizá en otra película hubieran dado más de sí, se quedan entre la chicha y la limoná sin ser ninguna de las dos.
Se pasa un buen rato, pero cuando se intuye el final, predecible hasta cierto punto y de un endulzamiento que a mí me ha parecido relamido, ya se le ha hecho larga a uno.
Es eso, interesante pero sin pasarse.

Es una película que me ha resultado bastante plana. Que no predecible. Aunque si uno lee el resumen que aparece en la parte de atrás de la caja, casi que no tiene que verla entera para saber a qué se van a dedicar los 90 minutos escasos de metraje.
Una vez que echa a andar ya uno sabe cuál será el siguiente paso, eso sí, no cabe duda. Es como una bola de nieve que no se puede parar porque el camino está marcado.
Lo de los saltos temporales sin avisar más que por una mera y triste mención de uno de los personajes en cada caso es un tanto desconcertante. Que pase un año de citas y que uno se entere por una mera frase en la que se dice la palabra año es algo triste.
Para pasar el rato, pero tampoco mucho pues por suerte no es larga. No es muy grande ni muy pequeña, es mediana, tristemente mediana.

Los actores son excelentes. El elenco elegido, creíble. El guión pésimo. Basada en historias separadas e inconexas, la película se convierte en un moroso espectáculo en el que podrían haber sido muy buenos cortos, sin embargo la película se hace terriblemente tediosa. El intento de unión al final del film resulta poco creíble y uno se queda con la extraña sensación de haber asistido a una nada aburrida y pesada.
La mejor Candela Peña, la única creíble y con una actuación decente. El resto se pierde en diálogos interminables que no llevan a ningún sitio, que cansan. Podría decirse que están forzados a sobreactuar, de ahí que la única decente sea Peña que hace algo creíble y aceptable dentro de una película tonta y sosa.
La heteronormatividad además resulta poco creíble, todo parejas heterosexuales que viven en un mundo angustioso y repetitivo de relaciones infructuosas que cansan al espectador.
Es mejor si no se ve, de lejos. No merece la pena ni el intento de visionado.