Haz click aquí para copiar la URL
España España · Barcelona
Críticas de Sémele
<< 1 2 3 4 10 45 >>
Críticas 223
Críticas ordenadas por utilidad
10
2 de marzo de 2014
18 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sin duda el que ideó esta nueva versión de Sherlock Holmes tuvo la suerte de que se le alinearan todos los planetas ese mismo día.

Ya de por sí el personaje de Sherlock tiene todos los elementos para atrapar al espectador/lector: El detective con una inteligencia extraordinaria que hace de la observación su arma más infalible y lleva al extremo el método de la deducción para dar con criminales muy peligrosos como si se tratara de un juego. Llevarlo al momento actual es un gran acierto.

La elección de Benedict Cumberbatch, sin embargo, da al personaje una dimensión enorme. Su rostro, entre extraño y atractivo, cuyos ojos claros y perspicaces parecen atravesar al que se pone por delante, su pose de gentleman, acompañada de su abrigo largo y su bufanda oscura, y su discurso deductivo, con grandes dotes para la observación, tienen como consecuencia que Sherlock sea un tour de force, un personaje intenso, arrogante, brillante y excéntrico.

A su lado, un no menos brillante, Martin Freeman, más comedido por exigencias del guión, se convierte en un John Watson perfecto, cuya mirada se corresponde con la del espectador que, al descubrir a Sherlock, se queda igual de descolocado. Pero acabará atrapado en esa telaraña que teje Sherlock a su alrededor porque "echa de menos el campo de batalla".

Un Londres actual visto a un ritmo frenético y un misterio que trata sobre varias personas se han suicidado ponen el resto. Se suma además un toque de comedia, porque la historia se presta a situaciones divertidas. El guionista y el director no pierden un minuto contándonos quiénes son Sherlock y Watson porque ya los conocemos. Lo que les interesa es mostrarnos con cuatro pinceladas sus personalidades para introducirnos directamente en la historia.

El resultado es un producto cinematográfico de gran calidad, que se ve por TV, como si fuera una película.

Un clásico al instante que seguramente hubiera gustado al mismísimo sir Arthur Conan Doyle.
Sémele
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
14 de julio de 2018
18 de 21 usuarios han encontrado esta crítica útil
"La chica en la niebla", escrita y dirigida por Donato Carrisi, basada a su vez en su novela homónima, entra dentro de los cánones del subgénero policial. Con tintes nórdicos, una extraordinaria atmosfera, una factura estilizada, unas dosis de crítica social y algo de suspense y toques de drama, el relato resulta entretenido y, a ratos, hipnótico y cautivante, aunque transite por los territorios conocidos en ciertos momentos.

Me gustó, en muchos sentidos. Sobre todo, por su atmosfera y por las interpretaciones. Su argumento, aunque no es muy original, sí tiene suficientes alicientes como para recomendarla.

Es una película con trasfondo, a pesar de su envoltorio más bien gélido y algo distante; no se le ven las costuras, algo que suele pasar con frecuencia en este subgénero, cuando hay que encajar las piezas, tiene coherencia y, lo mejor de todo, cuando llega la resolución, fluye con acierto, sin calzador, a pesar de que es bastante arriesgado ese final. Se la juegan y aciertan.

Avechot, un pequeño pueblo de los Alpes, vive una tragedia. Flores (un resultón Jean Reno), un psiquatra que trabaja en el hospital local, recibe una llamada intempestiva de la policía en plena noche. El inspector Vogel (un ajustado Toni Servillo) ha sufrido un accidente de tráfico del que ha salido ileso. Sin embargo, su camisa está manchada de una sangre que no es suya y no recuerda lo que ha pasado justo antes del accidente. Del relato de sus hechos, se desprende que estaba investigando la desaparición de una chica de 16 años, Anna Lou, dos días antes de Navidad...

A partir de aquí, la narración se centra en la investigación que emprende un grupo de policías locales, capitaneados por el inspector Vogel y su colaborador Borghi, que llegan de fuera. Los medios de comunicación llegan para poner patas arriba la tranquilidad del pueblo.

El resultado es un thriller policiaco de ritmo pausado y ascendente, en el que, sorprendentemente, se dan dos factores que lo enriquecen: 1.) El protagonista no es el típico policía íntegro que vive entregado a su causa; 2.) El punto de vista del relato cambia en un momento dado, aportando un aire diferente y ofreciendo una vertiente más cercana y humana al drama que conlleva la desaparición de una menor. No puedo extenderme más, para no hacer Spoilers aquí.

"La chica en la niebla" es un thriller entretenido e interesante, con dosis de suspense y algunas sorpresas muy bien llevadas que, a pesar de que se pueden llegar a intuir en algún momento, no resultan menos impactantes. Interesantísima también la crítica de la influencia de los medios de comunicación a la hora de resolver casos parecidos y de la estrecha y, a veces, conflictiva colaboración entre la policía y los periodistas, de ahí que la cinta se aleje con buen criterio de cintas de este estilo.

Es muy imaginativo el recurso de utilizar una maqueta para mostrar el pueblo, me gustó. También las notables interpretaciones de Reno, de Servillo y de un eficaz Alessio Boni que acaban convertiéndose en los 3 puntales de una historia entretenida y por momentos hipnótica y cautivante.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Sémele
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
1 de junio de 2010
27 de 40 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuanto menos interesante la propuesta de Gregor Jordan, al menos para despertar nuestro 'a menudo' adormecido cerebro.

"Unthinkable", algo así como impensable, referido a un momento concreto de la película, es un thriller absorbente, con muchas dosis de tensión y bien narrado que se centra en un ciudadano estadounidense, Steven Arthur Younger, aunque su nombre de ahora sea Yusuf Atta Mohamed, que un día decide colocar tres bombas en tres núcleos urbanos de tres ciudades muy importantes de los Estados Unidos de América. El ejército le captura, y empieza a emplear toda clase de torturas contra él para que cuente donde están ubicadas las bombas que en apenas unos días pueden masacrar a muchas personas inocentes.

Lo más interesante es plantearse: ¿Quién es en realidad el terrorista? Los métodos utilizados por H., el experto interrogador (y torturador), interpretado por un sádico Samuel L. Jackson, contra el -en teoría- terrorista islámico Yusuf, al que da vida Michael Sheen, no hacen más que despertar la compasión por ese hombre desválido, al igual que despiertan la compasión de la agente Brody del FBI, Carrie-Ann Moss, que trata por todos los medios de impedir ese maltrato.

El tema remite a la era post-11S, al caos y al terror, y también a la paranoia, que se ha apoderado de los EEUU desde entonces, además de, por supuesto, referirse a los abusos contra supuestos terroristas perpetrados en esa ratonera llamada Guantánamo. El terrorismo es un tema global y no algo remoto que ocurre en países lejanos, eso lo sabemos desde que derrumbaron las torres gemelas. Pero, ¿La forma de actuar de los países, digamos, más civilizados que reconocen los derechos humanos más elementales es la correcta? ¿Por qué en muchas, y demasiadas, ocasiones se recurre en secreto a la tortura para obtener información sin tener en cuenta los derechos de la persona que se tiene delante? ¿Por qué se tiende a esconder estos hechos como si fueran algo malo a los ojos del resto de la humanidad?

La cinta plantea estos y otros dilemas muy actuales, donde las decisiones nunca son fáciles, y, poco a poco, se va desgranando como un tenso thriller, con muy buenas interpretaciones, en la que el espectador va participando sin saber exactamente hacia donde le llevará esta amalgada de situaciones que superan los límites, que muestran con detalle la manera de actuar de los que se erigen como salvadores del mundo y que quieren acabar con el terrorismo sea del signo que sea, con métodos tan inhumanos como los que tratan de perseguir.
Sémele
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4
31 de marzo de 2018
23 de 32 usuarios han encontrado esta crítica útil
He desertado, lo siento.

Y la serie pintaba bien, lo prometo. Los primeros episodios arrancaron bien. Con Marcella, una detective que vivía alejada de su profesión para dedicarse al cuidado de sus hijos y que regresaba a la caza de un asesino en serie que, 11 años atrás, ya le quitaba el sueño.

A ver, no es la hostia de original, pero tampoco le voy a buscar los tres pies al gato. Es un policiaco, al estilo nórdico sobre la búsqueda de un asesino, aunque con varios peros. Es muy parecida a The Killing o Happy Valley, aunque, a mi modo de ver, estas dos son muy superiores a Marcella.

Las interpretaciones están muy bien, y la ambientación es excelente. La dirección, la fotografía y el montaje son de muchísima calidad... Hasta cierto punto, es una serie que, a nivel técnico e interpretativo, está cerca del notable.

A nivel dramático, para mí, falla como una escopeta de feria.

Me explico: ¿COHERENCIA? De una escala del 0 al 10, diría que un 4.

Creo que en una serie, película o novela de género policíaco es necesario que, al final, haya cierta coherencia. Sorpresas y giros argumentales, sí, ¡Por favor! Callejones que no llegan a ninguna parte y hay que retroceder, por supuesto. Personajes complejos con los que jugar al despiste... sin dudarlo. Me encantan estos elementos en una serie, película y/o novela...

En Marcella se juega una baza con la protagonista (Spoiler) que me pareció un elemento interesantísimo y que podía dar mucho juego en la trama detectivesca. Pues, a las puertas del séptimo episodio, me di cuenta de que lo han mandado todo a tomar por... ¿Por qué? Porque después de varios episodios con la mosca detrás de la oreja y sin poder llegar a ninguna conclusión con cierto peso acerca de la identidad de un asesino, creo que es una serie vacía, hueca como una cáscara.

Sorpresas, muchísimas y nada agradables (y no solo porque se trate de una serie de asesinatos). Giros argumentales, todos los que quieras y más, pero con la coherencia de vacaciones. Personajes, entrando y saliendo, muchos, más malos que satán, y algunos de ellos, asesinos en potencia y raramente si no sospechas de ellos media docena veces a lo largo de un capítulo es que debes de estar en las nubes...

Traído todo por los pelos, parece un producto que busca por encima de todo ser efectista más que ser efectivo. El hecho de meter muchos hilos argumentales (y que pierdan fuelle a medida que avanzan los episodios) no le da complejidad a la trama principal, ni le da riqueza, sino que la dejan descafeinada y le restan credibilidad. Los giros argumentales son la mayoría de los casos muy forzados y no funcionan por su escasa o nula congruencia. Tampoco los personajes son para tirar cohetes... La mayoría son vanales, poco complejos, o malos o buenos... con los que es difícil identificarse. Empiezas a creer que los han sacado de una de Tim Burton.

En definitiva, se nota demasiado las costuras de Marcella. Aquí no hay el rocambolesco juego del gato y el ratón como sucedía en The Killing, donde realmente te atrapaban con la absorbente investigación y en el melodrama familiar... Aquí todo es frío y casi quirúrgico, sí, Marcella, ha vivido un drama (y tal vez acabe siendo lo más logrado), pero la trama del asesino juega tanto al despiste y a sembrar la duda continuamente que acaba teniendo más agujeros que un colador.

Increíble e incoherente, y es una lástima porque el planteamiento no estaba mal.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Sémele
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9
5 de marzo de 2012
15 de 17 usuarios han encontrado esta crítica útil
'Incendies' recuerda a las grandes tragedias griegas escritas por Sófocles. Es más, podría pasar por una revisión de 'Edipo Rey' mientras va contando la historia de dos hermanos gemelos, Simon y Jeanne, que deben afrontar el pasado de su madre, recientemente fallecida, una cristiana que huyó del Líbano y halló una vida más tranquila, al menos en apariencia, en Cánada.

Con un ritmo pausado pero firme, 'Incendies' es un drama en estado puro, profundo y desgarrador que trata de escarbar en el pasado remoto de una mujer cualquiera, Namal Marwan, cuya vida dio un vuelco cuando siendo tan sólo una adolescente se quedó embarazada de un refugiado palestino, y su familia, tras repudiarla, la obligó a dejar a su hijo en un orfanato, con la promesa de que un día iría a buscarlo.

La cinta está estructurada en capítulos y a la vez en 'flashbacks' que siguen, por un lado, la vida de Namal que, tras dar a luz a su hijo, se marcha a estudiar a Daresh (un lugar ficticio) justo antes de que estalle la guerra civil y, por otro lado, en el presente, tras el fallecimiento de Namal, como sus dos hijos, los gemelos Simon y Jeanne, tratan de entender la extraña petición de su madre: viajar al Líbano, buscar al hermano del que no sospechaban ni su existencia y a su padre, al que creían muerto, y entregarles a cada uno una carta de su parte.

El interés de 'Incendies' va creciendo a medida que los hijos, primero, Jeanne y, luego, Simon, el más escéptico de los dos hermanos, van indagando en ese laberinto que ha construido su madre en pro de que ellos puedan entender la tragedia que se gestó en su país, a la par con el conflicto bélico que los azotó por fuera y por dentro, y, al mismo tiempo, para que puedan conocer la procedencia de su madre y la suya propia y el drama personal en el que ha vivido inmersa tantos años y para que comprendan de una vez el porqué de su petición.

Raramente se puede encontrar una película tan intensa que se vea con tanto estremecimiento, sobre todo, cuando se ponen todas las cartas sobre la mesa y la verdad aparece como un mazazo que no sólo cae con todo su peso sobre unos hijos obligados a ver lo que ni siquiera podrían llegar a sospechar, sino también sobre un espectador que ha pasado la mayor parte de la película con la boca abierta de estupor por una historia que tiene entre sus virtudes caminar por el fino hilo que separa los culebrones de las mejores tragedias griegas. Y llegar hasta el final y hasta sus últimas consecuencias.

Sin duda, una grandísima película a reivindicar. Una obra mayúscula.
Sémele
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 45 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow