Aún no entiendo cómo es posible que este film (si es que así puede llamarse) tenga un 6,2 de media. ¿Comedia de terror? Ni me hizo gracia ni me causó ningún miedo. Bajo mi punto de vista es una de las decepciones del año e incluso del siglo en cuanto a cine español se refiere.

Para empezar, aún no entiendo cuál es el objetivo de la película. No expresa absolutamente nada. Sí, un aquelarre. ¿Y qué más? Este bodrio debería estar nominado junto con Project X y alguna película más a los peores films de la década...

Lo único que merece la pena, la belleza de Carolina Bang. Por lo demás todo es muy mediocre e incluso podría decir penoso. Efectos de la época de la polka, ninguna risa a lo largo de toda la película y un largo etcétera de defectos que me hacen terminar aquí esta crítica porque es una película que no merece la pena. Una pena que cobren casi 10 euros por entrar a ver este tipo de bazofias sin tener derecho a reclamar tu dinero...

Si bien es cierto que es una película que puede encantar a los más pequeños por su bonito colorido, sus encantadores pequeñajas y los simpáticos minions, aún más importante es que a los mayores nos puede enganchar hasta el punto de esperar una segunda parte de la misma.

Es magnífica de principio a fin, te reirás, disfrutarás como un renacuajo y llorarás... pero solamente cuando acabe la película y veas que en la realidad, no estarás rodeado por esos encantadores personajillos amarillos.

Es una película para disfrutar en familia con o sin los más pequeños. Pasarás buenos momentos y sin duda la recordarás como una notable película de dibujos animados.

Esta película desde el primer momento en que la vi anunciada, me llamó la atención. Quizás por el magnífico trailer, quizás por la idea del propio film en sí, quizás...

Pero es que todo se queda en eso, la película se resume en el trailer. Los primeros quince o veinte minutos son lo mejor, se expone la idea de que una noche al año, el crimen está permitido. Hay personas que salen a "cazar" y otros, simplemente deciden refugiarse en sus casas blindadas con sistemas de seguridad de última generación.

Y es que eso es en sí lo más atrayente de esta película y por lo único que se merece un aprobado. En general, partimos de unos datos surrealistas sustentados en que gracias a que se permite el crimen una noche al año, la tasa de criminalidad es inexistente y el paro es casi nulo.

Si continuamos con el desarrollo de la película, la familia es de risa. Lo lógico, cuando tu familia está en peligro es que cada uno se vaya a perderse por la casa (enorme, por cierto) en lugar de mantenerse unidos.

El sistema de seguridad de última generación, se destroza en menos de cinco minutos, lo cual no sé si da a entender que el padre era un total timador, o es que la película comete otro de sus muchos fallos.

La actuación de los hijos es patética, incluso hay un momento crucial en la película en la que se le otorga una importancia a la hija que durante todo el desarrollo ha pasado desapercibida.

Los chicos de las máscaras parecen de una película de broma tipo Scary Movie. Por favor, seamos serios...

Y hablando del final de la película... es totalmente patético. Deja mucho que desear para una película que prometía y que simplemente se quedó en una idea muy muy mal aprovechada. Por lo único que se merece la (para mí, alta) calificación que le he asignado es por su buena idea y sus primeros veinte minutos. No tiene mucho más que ver y para nada merece la pena ir al cine.

Bueno, qué decir de esta película....

Habrá muchos que estén conmigo en que es una película notable, y no veo por qué deberíamos estar equivocados. El reparto es bastante destacado, el trailer promete mucho y, en general, la película empieza sorprendiéndonos. ¿A quién no le gusta que le hagan un buen truco de magia?

Sin embargo, probablemente las críticas serán aún mayores. Si bien es cierto que los trucos realizados son realmente sorprendentes y, teóricamente posibles, se escudan totalmente en la categoría cinematográfica para realizarse. Si no, que se lo cuenten a los grandes magos de la actualidad. La mayoría son trucos que son casi imposibles de realizar, eso teniendo en cuenta que el mayor de ellos es engañar a todo un cuerpo (patético cuerpo) de policías y agentes del FBI. Nada que ver con grandes películas de la misma temática como pueden ser "El truco final" o "El ilusionista". Mucha acción, sin lugar a dudas, engancha durante las casi dos horas de duración y sobre todo, es muy inesperada.

Y tan inesperada es que el final se hace poco creíble (aunque es cierto que te deja ganas de volverla a ver). Es muy difícil situar ese final en esa trama sin atar cabos previos, que no son pocos. Aunque como bien dice Freeman: "...cuánto más cerca estés, menos verás..."

En general, es una película que te divertirá si vas al cine, te sorprenderá y enganchará, pero le verás algunos puntos débiles en los que cojea, así como otros poco creíbles. Es por ello quizás por lo que no se merece una calificación más alta. Merece la pena ir a verla.

Lo primero que se me vino a la cabeza fue: ¡Qué bien, otra vez los encantadores minions! Sin embargo, pensé que sería insuperable y siempre persigue el hecho de que las segundas partes nunca fueron buenas. Pues amigos, éste no es el caso.

Si la primera fue magnífica, esta es aún mejor. Las risas se vuelven a repetir continuamente durante toda la película, siempre de la mano -como no- de esos personajillos amarillos tan simpáticos. Vuelven a aparecer las tres pequeñajas, cada quién más encantadora. Y finalmente, un Gru que continúa con la labor de la primera película.

La razón por la que no la califico con mayor puntuación que la anterior es por el simple hecho de que intenta conseguir lo mismo que su antecesora, utilizando los mismos recursos que tan bien funcionaron, aunque bueno, si algo va bien ¿para qué cambiarlo?

Merece la pena para los niños... y para los adultos sin ninguna duda.