Con bajo presupuesto y unos efectos especiales penosos, es una de esas peliculas que piensas al principio que vá a aburrir, y termina enganchando y emocionando. Recomendable.

Por lo visto el realizador ha pensado que poniendo a Mila Jovovich dando increíbles saltos acrobáticos al estilo Mátrix iba a bastar para enganchar al público. Mucha acción y poco contenido. No llega a la suela del zapato de la primera.
Prescindible

Con bajo presupuesto y pobres efectos especiales se pueden hacer interesantes peliculas. No ha sido éste el caso.
Creo que una buena historia de Ciencia Ficción debe desarrollar una historia con un supuesto fantástico pero con una férrea coherencia interna, y este no es el caso presente, que tiene un planteamiento esclavo de mostrar diversas escenas mas o menos espectaculares ..Pero en fin, es un mal común por el que discurren la mayoría de películas fantásticas actuales, casi todas esclavas del "efecto Matrix"
¡Qué diferencia con el cuento original de Bradbury, en el que los viajeros del tiempo, al regresar, encuentran todo prácticamente igual salvo sutiles diferncias en el lenguaje y un opresivo gobierno ultra fascista!
En fin, de todas formas pienso que tiene algunas escenas interesantes y que se dejará ve bien en el DVD de casa con una bolsa de palomitas en las manos.

Film comercial, en el sentido menos peyorativo del término, tratando de llevar al mayor abanico de público posible ésta oriental versión del relato de Cenicienta, y a fé que Rob Marshall lo consigue con un cuidado relato, bien ambientado, con una magnífica actuación coral y una música muy apropiada. Puntualmente alcanza cotas especialmente brillantes.
La verdad es que la historia consigue entretener y también emocionar, sin recurrir a tremendismos ni a violencia explícita, ni a acumulación de secuencias límite, ni a desectructuración de la línea temporal, tan abusivamente omnipresentes en el desorientado panorama del cine de hollywood actual.
Creo que el principal lastre del film, ha sido el ser excesivamente fiel a la novela, y éste hecho, que en ocasiones, cuando la novela fuente es ya, prácticamente un guión cinematográfico, puede ser beneficioso ( p.e. El silencio de los corderos de Jonathan Demme -1991-, que sigue casi al pie de la letra la novela de Thomas Harris) en el presente caso, le ha restado creatividad y ritmo a la versión cinematográfica.
(Por cierto, que los carteles anunciadores de ambas películas tienen, casualmente, una gran semejanza)

Sorprende lo bien que está llevado a una nave espacial el tema de "la casa diabólica". Buenos actores ( sore todo el inconmensurable Fishburne) dirigidos con bastante buen pulso por el subvalorado director Paul Anderson que se mueve de maravilla en ambientes claustrofóbicos.
Terror Garantizado.