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España España · A Coruña
Críticas de Marafarinha
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Críticas 89
Críticas ordenadas por utilidad
6
27 de marzo de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Techo y comida" es uno de estos films agónicos que incomodan, y mucho. Su fin no es recrearse en el Séptimo Arte, ni ofrecer una película de culto. No, su única meta es la denuncia socio política de un problema más que real: el paro, la falta de medios económicos y las pocas (o nulas) ayudas del Estado para estas situaciones de exclusión social.

Es Natalia de Molina, ganadora del Goya a mejor actriz, quien salva el trascurso del largometraje de manera bastante airosa. Interpreta a Rocío, una madre soltera, sin trabajo ni medios económicos, que ocupa un alquiler que no puede pagar y alimenta a su hijo con bocadillos de salchichas y vasos de leche rebajados con agua. A ella rara vez tenemos el gusto de verla comer. Se presenta ante una tesitura límite, a la que no sabe cómo hacer frente. Da la impresión de que Rocío está demasiado bloqueada cómo para actuar, apenas pone empeño y la sociedad tampoco le ayuda abrirse camino.

Se crea una atmósfera claustrofóbica, que nos hace removernos en nuestros sillones y apartar la mirada de nuestros televisores de plasma. De repente, nos damos cuenta que ese sándwich que devoramos sin darnos cuenta es un lujo, y que ese café caliente también. Porque para Rocío, y para su hijo Adrián, prepararse un plato de patatas fritas con una hamburguesa es asistir a un restaurante de alto nivel.

Refleja el gran vacío burocrático al que personas pobres y sin recursos tienen que enfrentarse. A la total y absoluta incomprensión de un sistema del "bienestar" que no encuentra maneras de ayudar a quiénes no tienen cómo ganarse la vida. Los organismos públicos se encogen de hombros con incomodidad, se escudan en conversaciones triviales y lo lamentan sin sinceridad. Pero mientras tardan seis meses en concederle cien euros para comer al mes (¡¡100€!!), Rocío tiene que conseguir alimentos, champú y zapatillas para su hijo pequeño.

"Techo y comida" se trata de un cuadro crudo que refleja una realidad actual y vergonzosa. Y dolorosa. Sin embargo, no logra crear esa empatía necesaria, ni tampoco esa sinceridad. Lo que pretende ser un reflejo costumbrista, se queda vacío y sin alma. El guion de una vida está poco explotado, y cabría esperar algo más.

Sin embargo, he de decir que este tipo de proyectos son muy necesarios para la conciencia social. No estaría mal que los políticos que gobiernan nuestro país se tomasen una hora y pico de su vida en verla. O, mejor aún, en experimentarla.
Marafarinha
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10
22 de febrero de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Discretamente grandiosa.

Esto llevaba a pensar el tráiler promocional de "La habitación (Room)". En él, la voz en off de un niño llamado Jack describe cómo es su mundo, que se reduce a un puñado de metros cuadrados en un zulo, mal ventilado y sin iluminación. Allí es donde ha nacido y ha crecido junto a su madre, y las esporádicas visitas del señor Nick, que obligan a Jack a esconderse en el armario.

Tenía que llegar un film inspirado en las terribles historias que hace pocos años salieron a la luz en el país austriaco (recordemos la terrible historia de Natasha Kampush, en cautiverio más de ocho años; y a Elizabeth Fritzl, secuestrada en el sótano de su casa por su propio padre), pero creo que lo ha hecho de una manera tan humana y tan real, escapando del drama fácil y anclándose a una nueva forma de ver el mundo: los inocentes y maravillosos ojos de un niño.

Jack es un niño feliz en sus cuatro paredes junto a su madre. Ve el cielo a través de un tragaluz en el techo, saluda a su mesa, sus sillas, su planta, su pileta, al retrete, al armario. Hace collares con cáscaras de huevos y, de vez en cuando, él y su madre hacen un pastel. También ve la televisión, pero ésta, cree, no es real. Lo único real es su habitación, dónde se siente protegido y aislado del "mundo".

Esta idealización de su realidad es gracias a su madre. Brie Larson deja atrás la comedia y se convierte en Joy, una joven que lleva encerrada siete años, secuestrada cuando tan sólo tenía diecinueve. Para proteger a Jack, haciendo un alarde de fortaleza desmesurada, idea e inventa un mundo inocente y libre de maldad para él. Para su hijo, todo aquello es la realidad que conoce... y eso le permite mantenerse feliz.

La crudeza de este retrato se impone a la belleza de su guion, con una explosión de ingenio desbordante. El film es una historia dura, de las más duras que pueden verse en la gran pantalla y, sin embargo, el toque dulce produce escalofríos. El impacto de esta contraposición es brutal y casi traumático, como un experimento. Además, el espectador lo es a través de los ojos de Jack, pero siendo consciente de la verdad que tal mundo se esconde. Es inimaginable de sentir todo lo que "Room" guarda en su pequeño interior.

Fascinante film, que remueve el interior de mil formas distintas. De palpable ansiedad y de visible hermosura. Una experiencia cinematográfica sin precedentes que, sin lugar a dudas, ha dado la vuelta al séptimo arte.

Magia pura.
Marafarinha
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8
21 de febrero de 2016
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si tuviera que calificar únicamente el papel de Marian Álvarez no dudaría en poner diez estrellas, u once. La actriz que protagoniza el cartel de "La herida", una dolorosa y sangrante apuesta de Fernando Franco que, en el 2013, presumió de numerosos premios nacionales e internacionales.

El tema central del film es la mente de Ana, una mujer de veintiocho años que trabaja como técnica de ambulancia. Aparentemente envuelta en una vida normal, vive con su madre y tiene un novio con el que lleva saliendo dos años. Además, tiene largas conversaciones vía chat que llenan las horas de soledad en su cuarto, donde parece sentirse muy cómoda. Pero no, Ana no es una persona como las demás. Ana no es capaz de controlarse, porque sus impulsos y su mente son más fuertes que ella. Y la vida, con sus problemas, hasta el más siempre, la superan, la enfurecen y la hieren. Y ella traduce el dolor de su alma en heridas y quemaduras en su piel.

Todo se precipita cuando Alejando, su novio, después de una acalorada discusión, desaparece de su vida. Ana se ve prisionera de su propia locura, y su vida sufre un declive peligroso. El mundo de la noche, el alcohol y las drogas, en contraposición a la necesaria e impuesta soledad de las horas en su habitación. Ana se va aislando más y más en su mundo, se regodea en su dolor. Los momentos de felicidad llegan poco a poco, pero se derrumban en segundos, como quién cambia una máscara. Su mente y su carácter son volátiles como una llama: es cálida, pero puede quemar sin piedad.

"La herida" es el crudo retrato de una mujer con un Trastorno Límite de la Personalidad, una enfermedad psicológica con un tratamiento muy difícil y que hace que las personas que lo padecen tengan problemas para controlarse en los ámbitos de relaciones interpersonales. La actriz, que no lograba encontrar ningún papel, hace alarde de sus maravillosa alma interpretativa al acercarnos una historia muy difícil y muy dura, en cuyo personaje recae el absoluto peso de la trama con grandiosidad.

Sin embargo, Marian Álvarez no es suficiente para inundar la película que, a pesar de todas sus virtudes y de ser una pequeña joya a valorar del cine español, le falta atar cabos y le falta fuerza. Ya que los personajes secundarios se muestran muy mudos y muy lejanos, tal vez porque así los siente Ana, pero el espectador puede echar en falta saber cómo se sientes, qué ocurre con ellos, cómo viven las personas de su entorno su enfermedad.

Recomendable, aunque difícil de ver. Muestra una realidad muy cruda: la de estar encadenado a la maldición de la mente.
Marafarinha
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9
18 de julio de 2015
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Una brillante apuesta de los creadores de UP (nada menos) para quitarnos el mal sabor de boca del cine de animación de poca calidad que llevan soportando los más pequeños (y no tanto) en las salas de cine.

Del revés (Inside Out) es un inteligentísimo retrato sobre cómo funcionarían los sentimientos en nuestra cabeza, la forma de manejar nuestros recuerdos, la manera en la que se forja nuestra personalidad y, en definitiva, una explicación plausible de por qué nos comportamos así en ciertas ocasiones.

Cargada de humor (las risas desternillantes están aseguradas) y de suspicacia, esta apuesta de Pixar-Disney está protagonizada por la flamante Alegría, la sombría Tristeza, la soporífera Asco, el irascible Ira y el tembloroso Miedo. Estos cinco aspectos, colores, sensaciones, son los que manejan la vida de Riley en los años fundamentales de su infancia y crecimiento. Todo parece ser sencillo y cargado de felicidad, hasta que en un determinado momento, debido a problemas financieros de sus padres, deben de mudarse. A partir de entonces, estas cinco voces que habitan en su cabeza, se embarcarán en la difícil labor de mantener la cordura de Riley a pesar de las adversidades.

Original, ¿eh? Sí, y además basándose con rigor a las teorías psicológicas sobre el funcionamiento de la mente y los recuerdos. Porque de la mano de Alegra y su equipo de 'expertos' ayudantes recorreremos los fascinantes recovecos de la cabeza y la personalidad de Riley, de una forma ingeniosa e interactiva, didáctica también, que supondrá todo un divertimiento para los más pequeños y una manera de acercarnos a la psicología para los más mayores.

Brillante y fascinante apuesta por parte de Pixar, la aplaudo hasta la saciedad. Estuve sin pestañear durante la hora y pico que dura el film, y sin ningunas ganas de que se terminase. Bravo.
Marafarinha
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7
7 de junio de 2015
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Curioso, interesante y demoledor puede ser lo que encontremos tras la biografía de los artistas más famosos y aclamados de la literatura universal. Es triste ver que, además, el arte culmina cuando el dolor es tan intenso que no deja lugar ni a respirar. La vida se rompe, la entereza también, estalla el mundo conocido y todo se impregna de oscuridad.

Elizabeth Bishop escapa de su vida en Nueva York para dar una visita fugaz a una amiga de la infancia. Ésta, vive en un lugar escondido de Brasil junto a su pareja: una arquitecta de renombre nacional con un carácter extrovertido y enamorada de la vida. Arte con arte, Elizabeth y la arquitecta, Lota, terminan por unir sus corazones y vivir una historia de amor sincera, peligrosa y extraordinaria que, no únicamente fue la causante del premio Pulizter por su poemario 'A Cold Spring', si no también del parque de Río de Janeiro famoso y reconocido como Patrimonio de la Humanidad.

Es realmente increíble lo que los films nos pueden enseñar sobre las realidades de la vida que nos rodea, que a veces la cultura y la sociedad se empeñan en velarnos los ojos. El amor lésbico entre Elizabeth y Lota nos acerca en esta película brasileña un nuevo concepto de hacer cine, basado en los silencios, en los planos lejanos, en los giros de guion sin miramientos y en la soledad del escritor. Porque el arista es, sin más, un alma torturada, que no parece encontrar nunca la felicidad, que tema al sufrimiento, y se condena a la pérdida de su propia realidad.

Sin embargo, a pesar de la historia extraordinaria, la película está llena de carencias. El director no ha sabido explotar toda la hermosura posible en sus manos. 'Flores Raras' no refleja ni la mínima parte de los sentimientos reales, de los motivos abrumadores y de la pesadilla en la que puede convertirse la depresión, el alcoholismo y los sueños rotos.
Marafarinha
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