En esta película el emperador no necesitó ver que el zapato encajaba en el pie para saber quién sería su próxima emperatriz. Mizoguchi trata a los dos personajes principales de forma magistral, la plebeya no solo enamora al emperador sino también al espectador. El japonés hace notar la diferencia entre la nobleza y el pueblo, te presenta a la nobleza en un mundo distinto al del pueblo, situación importante para el desarrollo de la historia de amor entre los personajes principales. Impresionante la forma en que Mizoguchi nos muestra la cultura China.

Mizoguchi no pudo poner un nombre mejor al burdel “El País de los sueños”.
En ese país intentan sobrevivir a la catástrofe económica que supuso para Japón perder la segunda guerra mundial, y lo intentan hacer trabajando para conseguir sus sueños, pero resulta que dichos sueños acaban siendo pesadillas.
El japonés realiza un trabajo espectacular con un tema muy controvertido y siempre polémico como es la prostitución, una actividad mal vista por la sociedad en todas las culturas y castigado por el aislamiento social, incluso por la familia. Las historias personales del film de las prostitutas son de lo más variopinta, y cada una tiene sus razones moralmente aceptables o no para estar en ese mundo considerado socialmente como vergonzoso. Pero lo cierto es que todas ellas están allí por voluntad propia ¿Por qué su libertad tiene que ser frenada por la moral de los demás? ¿Por qué el país intenta prohibir esa actividad y no ayuda a esas mujeres para que no tengan que vender su cuerpo? ¿Por qué una persona que quiere vender su cuerpo no ha de poder hacerlo? Problema que lleva sin resolverse desde siempre y que no lleva camino de hacerlo pronto.
Gran película

Gran película de aventuras y suspense, donde lo que queda claro es que todos quieren al pajarraco negro. El detective Sam Spade no imaginaría nunca lo que le iba a suceder aceptando un caso que no parecía muy distinto de los demás, pero que se iba a complicar según avanza en el caso y según va descubriendo la verdad.
Gran película que te mantiene en tensión todo el tiempo y con un final de los mejores que he visto en el cine, no te esperaras ese desenlace. Grandes actuaciones y gran dirección

Primera y espero que última vez que veo a Hugh Grant en esta tesitura de médico entregadísimo a su causa que se ve envuelto en medio de una situación de pánico y de desesperación por recuperar su vida y su carrera tras intentar incriminarlo en asuntos no legales.
Primero, la situación de Grant que lo incriminan es patética, nadie se puede creer eso, y espero que menos la justicia, que como sabemos es ciega, pero no estúpida. Y todo lo que descubre después no es que sea de ciencia ficción o imposible de creer, porque como la vida nos demuestra, la realidad siempre supera a la ficción, pero está mal planteado, casi desde el principio. Si intentaban hacer una peli de intriga y de suspense que sorprendiese la verdad de esos enfermos, se la cargaron desde el minuto uno, la verdad sorprende, pero de suspense y de intriga cero patatero, se veía venir desde el principio.
Y el colmo es ver a Grant tipo detective medico ¡que no es una comedia! Menuda cagada

Película entretenida sin más, de la que me sorprendieron dos cosas: la primera fueron los anuncios de la televisión de la época futurista, sin ningún tipo de control ni de censura; y lo segundo, lo gore que son algunas escenas.
Por lo demás es todo muy típico, es como súper-detective en Hollywood pero en robot, o como una peli de Jackie Chan, solo falta la chica, pero claro es un robot que come potitos, y con lo de la chica es bastante complicado que se pueda hacer algo con eso.
Hay otro punto interesante del film sobre el que no se profundiza casi nada, como cabía de esperar, que son las huelgas de cierto funcionariado público tan necesario para mantener cierto orden y te preguntas ¿hasta qué punto pueden ser legítimas, y en qué casos?, no encontraras la respuesta en esta cinta.
Pero vamos, que si te apetece ver, disparos, explosiones de coches, y acción a raudales, y todo con un robot de por medio, esta es tu película. Por último, se nota que los efectos especiales aún eran algo precarios.