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España España · Almendralejo
Críticas de Siferval
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Críticas 611
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
5
5 de febrero de 2024
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Una película dura, tanto por el relato como por el alcance que tiene de cara al espectador. No es sencilla de visualizar porque todo en ella es adusta, no quiere ser conformista y entregarse a la fórmula que siempre se repite. Por tanto, James Franco (The Disaster Artist) quiere convertir el relato de William Faulkner todo lo agreste que puede para semejarse al libro en que se basa: Mientras Agonizo. Siendo sincero, no he leído ningún libro del reconocido escritor, pero gracias a las anteriores críticas publicadas en Filmaffinity he podido hacerme una idea de la dificultad de la empresa de James Franco a la hora de adaptar la novela a un guión cinematográfico. Y por lo visto, no es sencillo. Así que una vez se visualiza la película, que no es fácil, puedo comprender las decisiones que toma el director para hacer algunas cosas que suceden en el metraje. En algunos casos, acertadas, y en otros simplemente cumple con lo que quiere expresar. Aún así, aunque nos escudemos en la premisa de que es una obra harto difícil de adaptar, el relato a veces es confuso y aburre. Pero por otro lado, tiene la capacidad de calar en la mente del espectador (la vi hace unos 3 meses) y hay escenas y ocurrencias que no se olvidan. Por esto mismo, creo que es una producción muy meritoria y se debe tener en cuenta a pesar de que no es un dechado de entretenimiento (más bien lo contrario). Digo lo contrarío porque es una cinta donde el espectador convive con las desgracias que va sufriendo la familia en esta singular odisea a otra ciudad para enterrar el cuerpo de la madre fallecida. Y ocurren cosas... muchas cosas. La recreación de la América profunda de principios del siglo XX es acertada y se mete muy bien en la piel de unos personajes analfabetos que hacen las cosas por sus creencias y costumbres, donde no hay contrastes: o todo es blanco, o todo es negro. Así, se difunde la idoneidad de cumplir a rajatabla los designios de los padres de la familia, sean o no buenas decisiones, donde la religión es base del pensamiento de ese núcleo familiar. Otro apunte interesante es que subraya muy bien la falta de cultura y analfabetismo de dicha familia, lo que queda retratado en las diferentes vicisitudes que corren.

Delante de las cámaras encontramos al mencionado James Franco en un rol menos protagónico de lo que cabe esperar, y no es el papel más acertado que encarna, pues denota cierto narcisismo en sus planos (concuerdo con la crítica del profesional Sergi Sánchez). Sin embargo, las interpretaciones de Logan Marshall-Green (La Invitación - 2015) y Tim Blake Nelson (Deuda de Honor) son de una calidad altísima, cada uno a su manera: el primero como alguien furibundo y el segundo como un sencillo hombre de campo, agreste y con pocas motivaciones para pasar la vida (en spoiler narro esas motivaciones). También encontramos a Danny McBride (Tropic Thunder) extrañamente en un papel dramático. En cuanto a la dirección, cumple bien Franco y arriesga con el montaje, porque en algunos tramos narra la trama dividiendo la pantalla a la mitad, lo que en algunas personas puede provocar cierto mareo al tener que ver dos escenas en la misma pantalla.

Conclusión: película arriesgada que es difícil de digerir por la forma en que está narrada, con una historia dura pero creíble, que no es apta para una gran parte de los espectadores. Pero si se le da una oportunidad, puede dejar cierto regusto agridulce por sus buenas interpretaciones y la conclusión final que deja.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Siferval
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5
29 de enero de 2024
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Es la típica película de acción de los 80 que no aporta mucho al género (el boom de la época) pero que muestra mucha resolución para dejar una buena función merced al bizarro dúo protagonista, quienes son los que realmente hacen que la cinta suba el nivel.

El poco arriesgado James Glickenhaus (El Protector - 1985) dirige esta sencilla película sobre policías corruptos donde pone toda la carne sobre el asador cuando la acción toma el mando de la trama. Aquí es donde salen a relucir el par de actores que llevan a cabo toda la caza de malhechores que pululan por la cinta, y más si son polis corruptos. Y bueno, no es el mejor papel de cada uno, pero cumplen perfectamente el trámite para dejar una cinta entretenida y puramente ochentera. El siempre competente Sam Elliott (Ha Nacido una Estrella - 2019) se mete en la piel de un singular poli que busca justicia a su manera, lo que se refleja en un tipo aguerrido y temerario que deja algunas joyas de frases muy típicas de la época. El otro tipo que se roba la función es Peter Weller (Robocop) que encarna a un abogado que empieza muy tranquilo, pero que termina siendo un tipo de acción igual de bizarro que su partenaire policía.

Muy típica, pero también película entretenida, con sus múltiples errores que sirve para pasar un ratillo entretenido, amén de ser cortita (90 minutos). Además, nos recuerda mucho la época de los videoclubs y los VHS de alquiler y eso siempre deja un poso a recuerdos de la infancia. Por cierto, a veces ese videoclub de los 80 nos lo proporciona Real Madrid TV, lugar donde pude visualizar este ejemplo de bizarría ochentera.
Siferval
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6
29 de enero de 2024
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Interesante producción australiana que es un reclamo de la defensa de la naturaleza y al mismo tiempo un viaje psicológico al interior del ser humano. Una rara avis que se sitúa entre el drama y el thriller que contiene un tramo final de buen cine.

Tras las cámaras se sitúa el realizador australiano Daniel Nettheim (El Turista - serie de TV) en su única incursión en el largometraje y nos deja una cinta bien rodada, de estilo clásico, donde todo es realista, alejada de cromas y muy próxima a la naturaleza que la protagoniza. Porque la naturaleza forma parte del casting de esta producción, donde es casi más importante que los actores que la habitan porque el factor ecológico es prácticamente la principal premisa de la trama, con esa búsqueda que se da a lo largo del bosque y el páramo en pos de una leyenda o un fantasma. De todas formas, la huella e impronta del elenco la deja un magnífico Willem Dafoe (Van Gogh, a las Puertas de la Eternidad), en el papel de un cazador cuya perspectiva de la vida cambia drásticamente merced a esa complicada búsqueda en que se ve enfrascado. A través de esto, y en los momentos de soledad que provoca la espera de la caza, el protagonista comienza a reflexionar sobre las consecuencias de sus acciones al mismo tiempo que se implica emocionalmente entre la familia que lo acoge. Con este estudio de la psique humana a través de la toma de decisiones, El Último Cazador es una buena muestra de cine reflexivo donde también participan actores como Frances O´Connor (Mansfield Park) o Sam Neill (El Piano).

Una buena cinta que lanza preguntas al aire sobre lo que es necesario hacer, el deber y que deja poso de cine artesanal, sin ningún tipo de filigranas, sencillo y austero que habla con imágenes de un mundo que se va perdiendo entre la bruma, como el fantasma que persigue el incansable cazador de Willem Dafoe. En definitiva, es un buen ejemplo de cine que aboga por la defensa de la naturaleza.
Siferval
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7
29 de enero de 2024
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El spin off de The Mandalorian cumple a la perfección su función de entregar una serie competente y muy entretenida que narra lo que ocurre una vez que Jabba el Hutt es derrocado en Tatooine. Por lo que nos encontramos ante una historia de Star Wars más regional, por así decirlo, que apenas va más allá de lo que ocurre en el citado planeta. Esta falta de "ambición" a la hora de desarrollar la trama le vas como anillo al dedo a una producción que sabe que no compite al nivel de The Mandalorian en cuanto a trascendencia y nivel de guión, pero es competente con lo que muestra, bien filmado y con un elenco de actores comprometidos, amén de contar con buenos directores para sus episodios.

Como buen western espacial, Boba Fett tiene tras las cámaras en gran parte de sus capítulos a Robert Rodríguez (Alita: Ángel de Combate), conocedor de la saga y con buena mano a la hora de filmar las escenas de acción (como ya sabemos, su fuerte). También se encargan de dirigir otros episodios Dave Filoni (Ahsoka) y Bryce Dallas Howard (The Mandalorian). Mencionar que la labor de todos es buena, entregando una serie entretenida y con una historia interesante que contar, con un personaje mítico de la saga Star Wars que encarna Temuera Morrison (Aquaman) y al que acompaña la especialista en series Ming-Na Wen (Agentes de SHIELD). Esta dupla comanda este relato sobre cómo calar en el ámbito criminal de la saga intergaláctica. Junto a ellos aparecen otros personajes recurrentes del mandaloriano como el propio Pedro Pascal, Timothy Olyphant (Hitman), Emily Swallow (El Mentalista), Jennifer Beals (Flashdance) e incluso tenemos el lujo de ver a Danny Trejo (Machete) como un singular cuidador de mascotas.

El Libro de Boba Fett no alcanza el nivel de The Mandalorian, y copia sus fórmulas narrativas, pero es una vista nueva a otro horizonte de la saga Star Wars que le está haciendo un merecido bien después del traspié de la última trilogía. Además, cuenta con un importante punto a su favor y es que nunca deja de entretener, lo que hace que estas nuevas franquicias calen bien a todo tipo de público, incluido aquel poco imbuido por el espíritu de La Guerra de las Galaxias.
Siferval
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7
24 de enero de 2024
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Tercera incursión de Kenneth Branagh (Thor) en el universo del Poirot de Agatha Christie y, en mi humilde opinión, se alza como la mejor de todas ellas. Posiblemente no sea más enrevesada como la mítica Asesinato en el Orient Express, pero el veterano director y actor logra darle una vuelta de tuerca al personaje y al género, que va más allá de la simple búsqueda del asesino y las pistas, y enmarca la acción en una oscura Venecia, más en concreto en una mansión llena de misterios y alguna que otra maldición. Con esta premisa, la típica búsqueda del culpable topa también con el hecho sobrenatural que ronda las estancias de una casa que es casi tan protagonista como los actores que la habitan.

De nuevo, y portando bigotón, tenemos a Branagh (Mucho Ruido y Pocas Nueces) en el rol de un Poirot cansado y retirado del mundo detectivesco. Como siempre, cumple a la perfección el papel del investigador belga. Como en anteriores entregas, la secunda un reparto amplio con buenos nombres: Tina Fey (Ahí os Quedáis), Michelle Yeoh (Tigre y Dragón), Jamie Dornan (50 Sombras de Grey), Kelly Reilly (Sherlock Holmes) o Ricardo Scarmaccio (John Wick: Pacto de Sangre). Destacan de aquí la impronta que deja Michelle Yeoh, un atormentado Jamie Dornan y la poderosa Kelly Reilly. También hay que destacar la presencia de la mansión, a la que Branagh da protagonismo gracias a su capacidad para crear una atmósfera de embrujo y con algún que otro susto para darle otro aire a la saga. Y aunque hay algo de terror por la ambientación y la lóbrega Venecia nocturna, la búsqueda del culpable sigue en ristre, y aunque hay alguna convencionalidad, el disfrute de Misterio en Venecia es grato.

Una producción de época que nos mete de lleno en una ciudad ya de por sí misteriosa, con una ambientación de género de terror de alta calidad y unos actores en muy buen estado interpretativo. Y aunque el misterio parece desvelarse antes de tiempo, disfrutar con su visualizado es más que aconsejable.
Siferval
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