Toda la película es una auténtica obra maestra.
Desde el inicio hasta los títulos de crédito.
Sin duda una de las mejores películas de animación de la historia y sin contar de animación también.
Lo conjuga todo y a la perfección.
No he sido un fan de la saga TOY STORY aunque las consideraba de gran calidad, pero esta última película es impresionante.
No se debe de contar nada porque hay que verla, a los niños les gustará, pero los adultos la verán de otra manera y te apretará el corazón hasta soltar las lágrimas inevitablemente.
Te reirás, te angustiarás, tendrás miedo y diversión y lloraras de nostalgia y alegría.
Una auténtica montaña rusa de sentimientos que te vapuléan y te dejan totalmente sensible.
Los últimos diez minutos quedarán grabados en el corazón de muchos "niños grandes" que los vean.

El reloj avanza inexorablemente, El Sheriff camina buscando un apoyo, un amigo, un sustento, nadie responde, nadie contesta.
Ha sido el mejor Sheriff de la ciudad, la ciudad le debe todo, pero nadie estará con él para enfrentarse a sus fantasmas.
Impresionante actuación de Cooper, como se le va transformando su cara a medida que el reloj se acerca a la hora de la verdad, camina por el pueblo, como caminaría por la vida, a la hora de la verdad estás sólo para enfrentarte a tu destino.
Grace Kelly enamora con sólo mirarla, cualquier otro se iría corriendo pero él sabe que no puede dar la espalda a su destino, ¿lo hace por todos?, no lo hace por él, pero él que lo ha dado todo por sus amigos (esos sudorosos amigos, que sudan de miedo) a la hora de la verdad quien está con él?

La sensibilidad de este director es fuera de lo común, todas sus películas tienen un halo de sentimiento, de delicadeza, de misterio... Todas sus películas son cuentos, fábulas, la gente se equivoca, espera terror, finales sorpresas, pero Shyamalan no busca eso, busca conectar con la sensibilidad que todos tenemos, unos más dormida que otros, busca el espíritu del niño que los adultos lo perdemos, Busca a ese niño que le diga una noche más, cuentame otra vez un cuento...
El que dice "no me cuentes historias", "no me cuentes cuentos", ese, estará siempre muy lejos de Shyamalan, ese, habrá perdido el espíritu de la infancia.

Shyamalan, cuentame otro cuento por favor.

Como se puede resumir mejor un amor y una película que con esta frase de Elthon John. Todo en Moulin Rouge es exagerado, superlativo, es un musical totalmente barroco, Baz Luhrman es el Mozart del cine moderno.
Maneja con maestría los colores, toda la película es un decorado igual que el Moulin Rouge
Nicol Kidman jamás estuvo tan bella, y como canta... Ewan está igualmente maravilloso.
La película te envuelve, te vapulea, te emociona intensamente... y sobre todo te enamora, te enamoras de ese diamante chispeante que no es Satine, si no el maravilloso cuento convertido en un musical como MOULIN ROUGE

Quizás nada es original, ni la música, ni los personajes, ni la historia, pero está tan sabiamente llevada que en su puesta en escena resulta muy fresco y original, NADA ES NUEVO, TODO ES DISTINTO.

Como el travelling inicial hace, entra en el mundo de Moulin Rouge y goza de sus locuras.

La NOCHE DEL CAZADOR, es una auténtica perla a la que hay que acercarse como un niño para verla y comprenderla, es un cuento y como todo cuento exagera sobre todo a los malos (malos malísimos) auténticos monstruos que atemorizan a los niños, es un mundo oscuro y fantástico, exagerado a veces pues es un mundo visto desde los ojos de los pequeños que buscan huir de sus fantasmas.
Me recuerda mucho al mundo de Tim Burton que me imagino le encantará esta película y de la que es fiel deudor artístico.

Impresionante Robert Mitchum, un auténtico lobo que se quiere comer a los pobres corderitos.