El viaje de Arlo

Si hay algo de lo que puede alardear Pixar es de sus buenos animadores y encargados de fotografía. Esta película nos lleva a parajes realmente extraordinarios, como si estuviéramos viendo tomas reales de los grandes cañones y paisajes a los que los animadores fueron llevados para inspiración previa. En Chile se exhibe previo a la película el corto "Historia de un oso" ganador del Óscar a Mejor Cortometraje Animado, que vale la pena ver.

Me ha impresionado mucho las imágenes, realistas y al mismo y tiempo, hermosas llenas de fantasía

El viaje de Arlo es una película de animación de Pixar dirigida por Peter Sohn, animador y artista de Buscando a Nemo, Ratatouille, Up y WALL-E, entre otras.

Arlo es un joven y asustadizo dinosaurio, que trabaja duro para hacer que su familia esté orgulloso de él, aunque sin mucho éxito. Un día su padre le lleva a las montañas para que aprenda a ser valiente, pero tras un accidente Arlo se queda solo y perdido en un peligroso lugar.

A diferencia de Del Revés, esta historia no es nada original. Sigue teniendo la esencia maravillosa que siempre dejar Pixar en todo lo que hace, pero en esta ocasión ya nos habían contado la historia anteriormente. Una de las similitudes más notables es con El Rey León, aunque sin llegar a ser tan buena.

La animación es el punto fuerte de la película. El entorno en el que se desarrolla la acción, lo bien conseguidos que están el efecto del agua y la naturaleza, parecen casi tangibles.

Como de costumbre, este filme está hecho tanto para adultos como para niños, de esta manera todos pueden disfrutar en igual medida. Aún no siendo destacable ni original, es entretenida y hay momentos en los que incluso al más duro le ablandarán el corazón.



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Es verdad que no es la mejor película del estudio y que al acabar de verla te queda la sensación de que "falta algo". Además el final es bonito y emocionante pero también triste. Quizá, el conjunto quede un poco deslucido ya que el dinosaurio protagonista no está del todo integrado en los escenarios, no sé si los creadores tenían esa intención pero a mi me dá una sensación de infantil y artificial. Aparte de eso tienes toda una hora y media de deleite visual, ideas originales, buenos sentimientos, moralejas de la vida... A poco que te guste la animación no te la puedes perder.

Mis ojos se enamoraron de los pequeños Arlo y Spot, es una historia contada de manera sensible, cotidiana y realista.
Es para todas las edades, ya que yo misma la disfruté con mi madre y no tenemos niños en la casa, pero las dos terminamos llorando como niñas... De hecho comencé a llorar desde el principio hasta el final donde se toma una buena pero dura elección.
Se mete de lleno en la mente humana con el miedo, esa palabra tan gigante que nos impide ser capaces de avanzar, y es lo que le ocurre al gigante Arlo pero que tan pequeño se vuelve ante lo desconocido, lo dañino, ante el miedo. Entonces tenemos a Spot, un pequeñín muy parecido a Tarzán por cierto, que aunque sea diminuto se transforma en gigante cuando debe sacar a relucir su valor, algo que enseña a Arlo a afrontar sus miedos y hacer lo correcto.
El final es enternecedor pero doloroso. Preparen el pañuelo.
Lo peor:Quizás para los niños podría hacerse pesada, pero les encantará igualmente
Lo mejor: Hace sentir una mezcla de sentimientos que te mantienen viv@