RoboCop 2

Su única pretensión es la de hacerte pasar un rato entretenido. Lo consigue sin más, no acabas deseando que no termine nunca, ni tampoco deseas que acabe lo antes posible. Eso le hace ser una pasable película con cosas originales, como son algunos anuncios de televisión que se "cuelan" durante la trama. La realización es correcta y las interpretaciones de lo más normalitas. No pasará a la historia por su calidad, sino más bien por la primera parte y por la taquilla que consiguió. A mí personalmente, me parece más floja que la primera sin ser gran cosa ésta última que he citado.

... pero no se le quita una peli a Verhoeven de las manos, no una de las grandes al menos.
Robocop 2 deja en ridículo a un cyborg ciertamente curioso pero con mucho encanto. Tiene unas escenas de acción muy pobremente ejecutadas y carece de la magia narrativa intertextual que la primera destilaba: aquí Miller podría haberlo hecho muy bien, viendo la primera uno no puede evitar los paralelismos estilísticos del uso del lenguaje televisivo para complementar la historia con los de la novela gráfica "Return of the Dark Knight". No obstante apenas son interludios tontorrones totalmente inconexos en esta Robocop 2.

Además los diseños de los nuevos robocops en stop motion son verdaderamente terribles, más si los comparamos con el RC 209 de la primera, que parecía funcionar de verdad.

Tiene algunas cosillas interesantes, como algunos retratos verdaderamente divertidos del crimen, la droga nuke, o cierto retorno al mensaje incendiario de la primera con la ultraprivatización de servicios públicos (que si en la primera sufría cierta censura tras el ajusticiamiento del responsable del proyecto robocop -aaah... debería haberse cargado al CEO del OCP- aquí se desecha en pos de unos derroteros más carnavalescos y tebeísticos), los punkis en la sala de juegos arcade (que me recuerda a las videogalerías de Neuromante... un futuro con salas de juego en activo, como que ni la ci-fi especulativa ha visto el futuro y nos lo revela)... pero al final, la peli resulta ser bastante coñazo

Las andanzas de nuestro adorable poli cyborg toman un cariz un tanto caricaturesco muy alejado del dramático encuentro con el hombre máquina que Verhoeven dibujó de manera tan descarnada y genial.

No le sientan mal estos desfasados actos en los que hay gusto por la pirotecnia y el estruendo sin más, con carismáticos malvados a los que Robocop debe hacer frente de manera resuelta. Peter Weller, dando vida al hombre-robot una vez más se ríe de sí mismo como parte del caos de su sociedad, magníficamente plasmada por el veterano Kershner y la pluma de Frank Miller, aquel futuro sucio y desubicado que tantas películas adornó en los 80. Resulta curioso contrastar algunos comportamientos actuales con la anárquica visión que tiene la película de la sociedad moderna, así como ver que en el Hollywood de la época la violencia y la incitación explícita a la destrucción era lo más normal de la jornada laboral.

Recomendable por desfasada, punky, gamberra y por su colección de arquetípicos personajes tan bien caracterizados, tambien por su acción, por su mensaje sobre una sociedad destruida moralmente por un anarquico capitalismo al que también había que combatir, y por momentos como el excelente clímax en la angustiosa y tenebrosa aparición del Caín máquina.

Realmente demoledor el encuentro entre los directivos de la OCP cuando están reprogramando a Robocop y uno dice con sorna...
- ¿Por qué no le decimos que rescate gatitos de los árboles ya puestos??
- Esa es una magnífica idea.
Nuestro querido monstruo de "Franquenstein" metálico no aguanto un tercer asalto para nuestra desdicha, esa fue una frase premonitoria... ¡lástima!

Buena secuela con más violencia que la película original. En esta película si que no hay concesión a nada que no sea el caos y la destrucción.

La historia está muy bien y como sucede en la mayoría de las secuelas, una vez que se conoce el origen del personaje, se va más al grano. Por ello, al no tener que tratar el personaje de Robocop en profundidad, se centra más en la acción.

Los malvados de la función son terroríficos, sobre todo el niño que da cierta grima.

Película que merece un mayor reconocimiento del que tuvo en su día. Es muy entretenida y no excesivamente larga, lo que evita el aburrimiento.

Más hilarante, más sangrienta y más larga, que la primera entrega.

Más hilarante porque los personajes son menos lógicos. Buscan fines demasiado irreales como para tomarlos en serio.
Más sangrienta porque es más larga, y porque los fines irreales de sus protagonistas hacen que éstos no tengan problemas a la hora de acabar con la vida de quién se les interponga.
Más larga porque la colaboración de Frank Miller en el guión no le hizo ningun bien. Miller preparó ideas para otra película, para una que haga fiel adaptación de universos como el de "Ronin" o "Hard Boiled" y para eso hace falta otro presupuesto y otros intereses. Kershner no busca más que comercializar un film de acción, lo que hace que la subtrama de "corrupción en el poder" estorbe más que ayude.

Película de tiros demasiado larga, pero con una acción de nivel similar a la de la primera entrega.